Epílogo

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Damian

Desde que nos casamos hemos estado agrandando la familia. Tenemos un gatito,al que  llamamos Leche, muy a la pesar de Jack, aún le recordamos lo de "Gatito quiere leche" jajaja. 

Estábamos en un parque cerca de la casa de Julie, habíamos quedado como casi todas las semanas para vernos y charlar, todos están casados ahora mismo, incluso Fran.

- Will ten cuidado - Gritó Jack cómo una madre protectora que es a nuestro pequeño William, nuestro hijo, ahora mismo tiene 5 añitos y es monísimo, su cabello es negro azabache cómo el mío y sus ojos de un color parecido al de Jack, lo adoptamos hace ya 3 años y lo amamos cómo si fuera biológico. Tiene unos cachetes rosaditos que dan ganas de pellizcarlos y es muy enérgico para ser tan pequeño, es sencillamente nuestro hijo.

Él jugaba con Olivia, hija de Daniel y Gabriel, Evelyn, hija de Julie y su marido Zack, Amelie, hija de Sara y Hayden (sí, al final se casaron, ¿raro verdad? y Lilly, la hija de Rachel y su marido Tom. Sí, William es el único chico de la pandilla, chico afortunado jajaja. Tenemos previsto adoptar una niña, Sophie, cuando Will ya haya crecido lo suficiente cómo para hacerse responsable de su hermanita.

- Chicos ¿echáis de menos el internado? - Preguntó Sara sensible.

- Pues para serte sincero sí - Dijo mi amor, nostálgico 

- ¿Os acordáis cuando Jack llenó a Damian de batido? - Dijo Daniel divertido.

- Jajajaja eso fue increíble - Rieron todos al unísono.

- ¿Y lo que nos costó preparar el cumpleaños de Damian? - Esta vez hablaba Sara - Fue una pesadilla, "Todo tiene que estar perfecto" - Dijo imitando la voz de Jack.

- ¡Eh! ¡Eso era un secreto! - Dijo Jack avergonzado - Pero bueno, ahora podemos disfrutar todos juntos con nuesros pequeños revoltosos - Miró a los pequeños que jugaban en el cajón de arena, todos jugaban y se reían, se llevaban todos genial, cómo si todos fueran hermanos de sangre.

- ¡Tío Damian! - Gritó Evelyn desde el cajón - ¡Juega con nosotros al escondite! - Me encanta jugar con los 5 pequeños, los quiero mucho a todos y ellos también me quieren mucho.

- ¡1! ¡2! - Comencé a contar levantandome de pronto del banco donde stábamos sentados y todos salieron corriendo en diferentes direcciones - ¡10! ¡Qué voy! - Miré en todas direcciones y no veía a ninguno a primera vista, se esconden bien los condenados.

Comencé a moverme y comtemple una cabecita rubia, Amelie, la cogí de la espalda y la puse sobre mis hombros, es muy tímida la chiquilla.

- Amelie, ¿me ayudas a encontrar a los demás? - Ella asintió alegremente y empezó a buscar, elevó su brazo señalando el tobogán, allí vi una cabecita castaña, Lilly. Le di un sustito y la puse en mi espalda.

- Jajaja me asustaste tío Damian - Dijo la pequeña abrazándose a mi espalda, ella es muy cariñosa. Seguí buscando con la ayuda de mis secuaces hasta que, después de un rato, divisé un pelo blanco en uno de los jugutes del parque, Evelyn, ella al verme intentó escapar pero la agarré antes y la puse sobre uno de mis costados.

- ¡Me pillaste jajaja! - Evelyn es una pequeña muy alegre. No me costó mucho reconocer una cabeza rubia y rizada que se dirigía hacia mí.

- Seguro no pillas a Will - Dijo Olivia, es una niña bastante alocada con sus primos.

- Ya veremos - La puse en mi otro costado y con 4 niñas encima me puse a buscar a mi escurridizo hijo. Busqué por bastante rato y no lo encontraba.

- ¿Dónde estará Will? - Miré a todos lados y vi a todos riéndose - ¿Qué os pasa? - Jack movió su boca diciendo "Detrás tuya" Miré y allí estaba mi querido hijo, por lo visto se me había subido no sé cuando y no me di cuenta. Comencé a reír mientras los bajaba a todos. - Buen escondite hijo, has ganado.

Will es un chiquillo muy protector con todas sus primas, no dudo que será un hermano mayor genial.

- Gracias papi - Dijo sonriente mientras abrazaba mi pierna.

- Bueno ¿le dais un descansito a tío Damian? - Pregunté yo, cómo un ruego más que cómo pregunta, estos niños te agotan en nada.

- ¡Pero después vuelves! - Dijo Evelyn, que graciosa es la niña.

- Ya veremos si os lo presto otra vez - Dijo Jack dirigiéndose hacia mí - Él es mío - Le dijo a todos los niños en tono de burla mientras me agarraba de la cintura.

- ¡Joooo! - Dijeron los pequeños al unísono mientras Jack me abrazaba.

- Bueno quizás os lo presto otro ratito - Lo miré con ojos de cachorrito y rió en alto.

- ¡¡Te queremos tío Jack!! - Todos se abalanzaron encima mía mientras Jack se iba a sentar otra vez riéndose.

- ¡Esta noche me lo pagarás! - Grité divertido mientras era aplastado por todos los niños.

Esa tarde volvimos molidos a casa, Will ya se había dormido, me parece gracioso que siempre se despidan todas con un besito en la mejilla de Will, son tan dulces todos. Cuando llegamos llevé a Will a su habitación y lo arropé mientras Jack miraba desde el marco de la puerta.

- No creas que te has librado del castigo - Él rió por lo bajo.

- Si lo disfruto no se puede considerar castigo querido Sherlock - Dijo divertido, me acerqué a él y torpemente nos dirigimos a la habitación mientras nos besábamos.

- A ver si lo disfrutas - Le reté, al fin y al cabo, siempre lo iba disfrutar porque no quería hacerle daño ni nada.

Y así es cómo continua nuestra vida de casados ¿queréis saber lo que ocurrirá después?

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Este ya es el final de esta serie que tanto he disfrutado escribir. Estoy pensando en hacer una segunda parte, ya eso depende de vosotros y el apoyo que tenga esta historia. Los amo mucho y espero que se sigan leyendo la historia que vaya a sacar próximamente, espero que les guste, estaba pensando en publicar la segunda parte cuando esta llegue a mil vistas, así que compartidlo y estaré ansiosa esperándolo, mientras estaré subiendo otra historia diferente que estoy escribiendo, espero que también les guste esa.

Os ama, vuestra amiga, Pauli <3

Te odio y te amo (+18 - Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora