Día numero seis, para la boda y contando.
Para ambas bodas faltaban seis dias exactos...
En el futuro hogar Way reinaba la paz y de igual manera la locura.
Preparativos iban y venían cuando de repente a los futuros señor y señora se les ocurrió una idea ¿y la despedida de solteros? Es decir, realmente se merecían un escape de todo el estrés y ambos realmente necesitaban un rato a solas con sus íntimos, su última noche juntos como solteros.
Carter se sentó a la mesa frente a Gerard quien sostenía su taza de café, y solo le sonrió demandando las reglas de su propuesta -Bien las reglas son que cada uno tiene pase libre, es una noche libre de nuestra relación, libre de todos nuestros compromisos y vida de pareja- Dijo melancólica la futura mujer removiendo el anillo de su dedo y entregándoselo en la mano a su prometido, acción seguida era el contrario haciendo lo mismo, ella sonrió de lado.
Era temprano en la mañana, escasas diez y media, Zu ya estaba en la casa de Carter planeando todo lo que de hace años tenía planeado para ella pero nunca concretó, situadas en el pequeño loft de hotel de los Way conversaban como quinceañeras una vez más, haciendo a la futura 'mujer' algo melancólica ya que, ella recuerda como planeaban las tocadas allá en Seattle de su banda y ahora planeaban su despedida de soltera, vaya que los años van volando..
-Tenemos un problema señorita experta en fiestas-
-Dime, que sería?-
-No tengo donde hacer la fiesta-
-Bien no hay problema con eso, puedo prestarte mi casa de verano en Jersey, es espaciosa y te puede servir solo que tendrás que limpiarla un poco- Comentó sonriente a su amiga.
-Es perfecto, ¿algo más?-
-Bien bien señorita Way, invité a todos los contactos de tu teléfono, espero no incomode eso, Max estará ahí, haré una fiesta de máscaras así que nadie sabrá quien está allí, comprendes?-
Carter asintió ante los comentarios de su amiga, mientras Gerard al teléfono se ponía de acuerdo con su hermano para saber donde y cuando sería la fiesta, Carter planeaba hacerla al día siguiente así tenía tiempo para llegar a hacer la gran fiesta de la que la mitad de Jersey estaba enterada.Si, probablemente la despedida de soltera del siglo.
*
-Estoy de vuelta Jersey, volví- Musitó triunfante, ante la vista de su amado Jersey.
Carter viajó en auto hasta la casa de Zu, lugar donde se situaría la fiesta.
Carter no tenia idea de la casa de Jersey de Zu, una casa ostentosa en la bahía de Jersey que lucía algo descuidada, aunque seguía siendo hermosa.
-Bien Carter, hora de ponerse a trabajar- Comentó para sí, tomando el trampeador y poniéndose en obra.
Así limpiando la casa vacía se tardó al menos dos horas, solo para dejarla impecable para poder dar su fiesta.
Al fin acabada la limpieza se tomó un momento para admirar triunfal su acto de aseo, con la cabeza alzada lo admiro recordando la última vez que había limpiado algo, aproximadamente tres o cuatro años, el hotel donde vivían tenia su propia ama de llaves y Carter nunca tuvo que pasar si quiera una escoba; siendo en su casa algo totalmente inútil tanto como en la vida. Carter sintió pesar por que algo tan insignificante como trapear una casa vieja la hiciera sentir triunfante, no hacía nada de su vida mientras Gerard se rifaba sus noches de sueño para poder darle de comer ¿Que clase de papel tenia? Solo era la mujer de alguien, nada más.
Al cabo de un rato ya tenia todo preparado en lo que aparentaba ser una casa de verano de su amiga la científica que sorprendentemente se había vuelto hermosa. Así paso el rato arreglandose y se puso su antifaz, y paulatinamente los invitados comenzaron a hacerse presentes, apoderándose del panorama la noche y las luces convirtiéndose solo en pequeños destellos en forma de focos LED, siendo Carter la celebrada de la noche.