Despacio // Albalia

38. Naturaleza en estado puro

NATALIA POV

Me desperté porque unos ápices de luz rozaban mis ojos, estaba tan cómoda, Alba dormía tranquila a mi lado, es tan bonita, me dan ganas de comérmela a besos, pero no es plan.

Me levanté un poco para mirar mi teléfono y ver la hora, las 8:30 a.m justo antes de la alarma, me levanto un poco sin despertar a Alba y miro los asientos de delante, Miki y África duermen plácidamente, me puse una sudadera y abrí el maletero despacio para no hacer ruido.

El sol apenas acababa de salir, estábamos en un prado enorme y apenas había caravanas, no era muy habitual hacer viajes en estas fechas, además no hacía mucho calor, no se estaba mal pero no era lo "ideal". Me dirigí a la parte lateral del coche donde estaba la tienda de campaña, María hablaba con Pablo fuera de ella.

-Buenos días- dije acercándome a ellos.
-Buenos días- me respondieron a la vez- ¿Quieres un trozo de bizcocho?
-vale- me acerqué y cogí un trozo.
-las vistas son espectaculares- dijo María abrazada a Pablo.
-pues os voy a llevar a un sitio... qué vais a flipar, pero será dentro de unos días, hoy vamos a un pueblo no muy lejos de aquí, comeremos y iremos de ruta por una montaña- dije mientras me alejaba para mirar el cielo de nuevo.

Unos brazos me cogieron por la cintura dándome un susto.
-buenos días Nat...- dijo Alba besándome la espalda.
-Buenos días Albi- me giré y la besé- no sabía que estabas despierta.
-María habla muy alto ¿sabes?- nos reímos.
-vamos a ir a un pueblo muy chulo hoy, vete preparándote- la abracé todo el camino hasta la furgo.

Después de cambiarnos de ropa y guardar la tienda de campaña nos montamos en la furgo, está vez Alba iba de copiloto, Miki, María y Pablo en el medio y África detrás.

Rodamos durante 25 min hasta llegar a un pueblo sumergido en la montaña, era precioso, aparqué la furgo y salimos del coche.

ALBA POV

Íbamos hablando de cosas aleatorias por el pueblo hasta que llegamos a una especie de estatua o recuerdo, estaba justo en un lado del pueblo, sumergido por la naturaleza.
-¡Guay! Dije apoyandome en la piedra enorme- ¿nos hacemos una foto en grupo?
-venga vamos- dijeron María y África.
Anduvimos un rato mas hasta que llegamos a una cafetería del mismo pueblo, nos sentamos afuera porque aunque no hiciera mucho calor, las vistas a la montaña eran impresionantes.

-¿Qué tal habéis dormido?- preguntó Natalia tomándose una cocacola.
-Pues Pablo y yo no hemos dormido mucho, no porque hiciera frío ni nada...- María miró a Pablo pícara y empezaron a reír, vaya 2.
-yo bastante cómoda y calentita- dijo África.
-yo bien la verdad- contestó Miki- me daba miedo dar la luz de la furgo cuando nos fuimos a la cama porque estabais más monas durmiendo...
-es muy cómodo el colchón de la furgo- contesté.
-¿cuál de todos?- preguntó Miki con una mueca divertida- Natalia o el de verdad.
-¡Oye!- dije algo avergonzada...
-Albi no pasa nada- se acercó Natalia y me abrazó, olía tan bien.

Después de comer y retomar fuerzas decidimos volver a la furgo por otro camino, era más adentro del bosque y la luz que se colaba entre éstos era preciosa, parecía un pasaje de ensueño.

Natalia y yo íbamos las últimas del grupo.
-¿Seguro que dormiste bien?- preguntó Natalia entrelazando nuestros dedos.
-si, enserio, estaba calentita y cómoda- respondí con una sonrisa- puede que te usará de almohada un ratito...
-sabes que no me importa Alba, de hecho me encanta- me besó la cabeza.
-gracias por la idea del viaje Nat, esto es increíble- señalé nuestro alrededor
-Me costó un poco pensar algo guay, no soy de ideas creativas...
-pues lo has clavado- la abracé mientras caminamos.

Llegamos a la furgo y era el atardecer, Natalia conducía por un camino de polvo hasta llegar a la cima de una montaña para ver mejor el atardecer.
Sacamos una manta del coche y nos sentamos todas juntas en corrillo mirando al sol.
-estoy es una pa-sa-da- dijo María sacando el móvil para hacer una foto.
-fantasioso- dijo África acomodándose al lado de María, yo estaba entre las pierdas de Nat apoyada en su pecho.
Natalia me hacía masajes por los brazos mientras mirábamos la puesta de sol, después de un rato filosofando nos metimos a la furgo de nuevo para ir al pueblo más cercano y cenar algunos bocadillos.

-Mañana vamos a la playa- dijo Natalia con la boca llena- así que preparad los bañadores para poneroslos.
-si capitán- contestó Miki de manera burlona, Natalia se levantó y le empezó a molestar, me encantaba verles jugar, parecían niños.

Volvimos a la furgo después de cenar y asentamos la furgo en otro camping, más que camping era un terreno verde que te cobraban por aparcar, sin más.
-La próxima vez no me dejéis comer tanto- comentaba María mientras montaba la tienda de campaña- que me sienta mal la comida...

No pude evitar reir, María se movía como una foca en medio de la feria de Sevilla.
Después de ayudarla me acosté con Natalia que ya estaba dormida, esto de conducir la cansaba mucho, era un bebé cuando dormía.
La empecé a dar pequeños besitos por la cara y Natalia gruñía ante el contacto.
-no me despiertes Alba..-suspiraba
-no te preocupes ya paro- dije riéndome, me encantaba cuando se enfadada así- buenas noches, no te olvides de la alarma...
-me despertaré antes que la alarma no te preocupes- se giró hacia mí y entrelazamos nuestras manos.
-¡Coño Miki!- gritó Afri dándome un gran susto.
-Perdón... Se me había caído el móvil-
Me empecé a reír por la situación de los 2 "peleándose" y me acurruqué en el pecho de Natalia para dormir esta vez sí, plácidamente.

NATALIA POV

Algo me rozaba la mano mientras dormía, abrí los ojos y vi un escarabajo bastante grande subiendo por mi brazo, me asusté.
-¡Ostia!- grité levantándome y dándome un cabezazo contra el techo de la furgoneta-
-¿Qué haces Nat...?- preguntaba Alba rascándose los ojos.
-¡Un bicho!- dije alterada.
-¡Natalia cállate!- dijeron al unísono África y Miki.
-déjame ver- Alba me apartó y levantó la manta encontrándose al bicho indefenso- Natalia es un escarabajo, no hacen nada.
-y yo que sé que es...- dije tocándome la cabeza por el golpe.
-Anda, déjame- Alba lo cogió con la mano abrió una ventana y lo tiró- ya está, ya no hay bicho.
-me he dado un susto enorme y encima una buena ostia- dije riéndome.
-Natalia tía que son las 7 de la mañana dejanos dormir- se quejaba Miki en la parte delantera de la furgo.
Alba no pudo evitar reírse y se tumbó de nuevo en el colchón.

-voy a salir fuera- dije poniéndome una sudadera, la sacudí primero para no encontrarme ninguna sorpresa.
-¿y que vas a hacer? Nos vamos a las 8.30- susurró Alba.
-voy a dar un paseo, por los alrededores- dije poniéndome las deportivas color mostaza que tanto me gustan.
-espérame, que voy contigo- dijo Alba poniéndose una sudadera y las deportivas rápidamente- no voy a poder dormir más, alguien se ha asustado por un mini escarabajo ...
-no te rías de mí- dije haciéndome la enfadada.
-anda tonta que es broma- Alba se acercó y me dio un mini beso en los labios.
-¡Si os vais a ir, iros ya anda pencas!- dijo Miki más molesto.
Nos empezamos a reír y salimos de la furgo.