Capítulo 9.

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No estaba sorprendido cuando el doctor le dijo que Ki Bum estaba desnutrido, con sólo verlo lo sabía, y tampoco esperó que los padres de éste aparecieran rápido en el hospital, no cuando él conocía como eran realmente, que su preocupación por su hijo nunca fue tanta y que por eso en el pasado a Ki Bum le gustaba llamar la atención, era como un hermano pequeño del que cuidaba en las fiestas, eso hasta que Jong Hyun apareció y se volvió alguien importante en la vida de su amigo.

Todavía había demasiado que no lograba entender, como aquel guardaespaldas al lado de la puerta y que los acompañó hasta el hospital, porque de otra manera no hubiera podido sacar a su amigo de la casa, y eso era nuevo para él que en el pasado vio a Ki Bum solo todo el tiempo, así como tampoco sabía lo que había pasado con su hijo.

Escuchó la puerta de la habitación ser golpeada y vio al guardaespaldas aparecer con su rostro serio que parecía imperturbable, y si no hubiera estado preocupado porque Ki Bum todavía no despertaba, habría estado haciéndose preguntas de cómo se lograba tener esa seriedad.

—Disculpe, hay un señor acá afuera que quiere entrar porque dice...

—Que soy su esposo —Si Won reconoció la voz.

—Déjelo entrar.

Si Won vio a su esposo entrar llevando en sus brazos a su hijo, quien al verlo extendió de inmediato sus brazos hacia él mientras balbuceaba, pidiéndole que de esa manera que lo cargara, y parecía que por un momento tener a su familia ahí le hizo sentirse un poco más tranquilo con respecto a Ki Bum, que todavía no despertaba, aunque el doctor le dijo que en algún momento de esos debía de hacerlo.

—¿Cómo está? —inquirió Hee Chul posando su mirada en el joven.

—Todavía no despierta, el doctor dijo que debía de hacerlo pronto.

Hee Chul asintió y luego miró a su esposo con el ceño fruncido, porque había algo que no estaba bien de acuerdo a lo que él había pensado ver.

—¿Y el bebé?

Si Won suspiró, la misma pregunta que no dejaba de repetirse en su cabeza y nadie más que Ki Bum podía respondérsela, él y sus padres, pero estaba seguro que los Kim no iban a decir nada, sabía que estos no querían que nadie se enterara que tenían un nieto.

—No lo sé, cuando fui a su casa la empleada dijo no sabía de bebé.

—¿Se los has dicho a Jong Hyun?

—No, he estado preocupado por Ki Bum.

—Tal vez deberías llamarlo ahora, yo cuidaré de Ki Bum.

—Primero quiero saber qué pasó con el bebé, la razón de que no estaba con él.

Fueron horas que le tomó a Ki Bum despertar, podía sentir su cuerpo débil y aquel aroma algo familiar que le recordó, y cuando sus ojos se abrieron le pareció haber vuelto a despertar en la clínica, que hizo que su pecho se sintiera pesado, como si la pesadilla volviera a empezar, eso hasta que sus ojos se posaron en la pareja sentada en el sillón dentro de la habitación, y su mente le hizo una mala jugada.

—Mi bebé... —susurró —dame a mi bebé... —suplicó.

La pareja se vio sorprendida por ese grito, y el que estaba en brazos de Si Won empezó a llorar de inmediato, así como Ki Bum, cuando vio a su amigo levantarse del sillón y dar vueltas por la habitación para calmar a su hijo.

—Por favor, dame a mi bebé...

Hee Chul compartió una mirada con su esposo antes de acercarse a Ki Bum, acariciando su cabello con intenciones de calmarlo, sin saber exactamente lo que estaba pasando, no cuando el joven a pesar de estar débil intentó levantarse de la cama a su esposo e hijo.

Pedacito mío.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora