Pedacito mío.

Capítulo 17.

Golpes fuertes en la puerta lo despertaron, todavía era algo temprano para recibir visitas en un sábado por la mañana, y entre quejas tuvo que levantarse, arrastrando los pies y frotando sus ojos mientras caminaba, ahora arrepintiéndose por primera vez haber dejado la casa de sus padres, porque si todavía viviera con ellos como eses atrás, tal vez su madre, o So Dam habrían abierto la puerta.

—Ya voy —dijo cuando estuvo cerca.

Lo último que esperó fue que en cuanto abriera la puerta iba a recibir una bofetada, una que lo despertó por completo, y le hizo retroceder, viendo a la persona que lo golpeó, quien parecía demasiado molesto, que estaba seguro que si matar no fuera un delito, él ya estaría sin pulso sobre la alfombra de su sala.

—¡Qué demonios, Ki Bum! —gritó —¡¿qué te pasa?!

—¡Que eres un idiota! —Ki Bum intentó golpearlo otra vez, pero sus manos fueron sujetas —¡¿Cómo pudiste decirle a Jin Ki y Chang Seon que eres el padre biológico de Taemin?!

Y ahora todo empezaba a tener sentido, al menos para él, que creía comprender de lo que se trataba todo, esa manera de reaccionar de Ki Bum, que empezaba a creer que no sólo se trataba de su hijo, sino de lo que podía pasar si Soo Man se enteraba que su esposo era el padre de su nieto, porque con el tiempo, a pesar de que estaban bajo un acuerdo de paz, Jong Hyun se convencía cada vez más su ex no era muy diferente a sus padres, que el dinero era algo que le interesaba mucho, ya que de no ser así, ya se habría divorciado.

—¡No te mencioné, si es lo que te preocupa!

—Eres un idiota —sollozó —quieren llevarse otra vez del país a Taemin.

Jong Hyun sintió como si un balde de agua fría fue lanzado sobre él, porque hace dos días cuando visitó la casa de los Lee, su intención no fue empeorar todo, pero sabía que lo había hecho, porque antes no había una fecha para que Jin Ki y su familia se fueran, ni siquiera una mención a hacerlo, pero ahora su hijo iba a ser alejado otra vez de ellos, todo porque él había cometido un error al presentarse ahí casi exigiendo sus derechos como padres; aunque lo único que buscaba era poder estar más cerca de Taemin.

—¿Qué?

—Que por tu maldita intervención, Jin Ki y Chang Seon decidieron que lo mejor era irse otra vez.

Una información que él escuchó de casualidad, porque parecía que ningún Lee quería que él escuchara que se irían, y por un momento creía que sospechaban algo de que Taemin era su hijo, Soo Man pudo decirles, porque el hombre no estaba feliz con él por la manera en como hizo que su hijo los visitara, aunque su presencia sí lo hacía, y a pesar de que se veía respaldado en ocasiones por su esposo, sabía que él no estaba por sobre Jin Ki.

—Podríamos... no lo sé, tal vez intervenir, debe haber alguna ley que nos permita recuperar a nuestro hijo.

—¿Cuál ley?

No lo había, al menos con los abogados que hablaron habían dicho que era muy difícil, más cuando el bebé fue abandonado en la puerta de un orfanato, se podía creer muchas cosas con respecto, porque la ley amparaba a los padres adoptivos, incluso si Taemin quisiera ir con ellos iba a ser muy difícil, no había nada a su favor.

—Ki Bum...

—Te odio, Kim Jong Hyun, me volviste a arrebatar a mi bebé —eso dolió —y no quiero que te acerques a Taemin.

Ki Bum se fue del apartamento, dejando un sonido sordo detrás de él al golpearse la puerta, porque estaba tan enojado y dolido, e iba a hacer todo lo posible para que Taemin deseara quedarse y sus padres tuvieran que hacerlo, por eso llamó a Hee Chul pidiéndole que permitiera que Min Ho fuera a jugar con su hijo, porque tal vez la amistad podría hacerlo.

Jong Hyun no sabía qué hacer, porque él también creía que lo había arruinado, pero no podía dejar que se llevaran a su hijo, y de verdad que el secuestro empezaba a sonar muy tentador.

***

Hubiera preferido que Hee Chul llevara a Min Ho a la casa y no tener que pasar por él, pero su amigo estaba muy ocupado como para tener tiempo de hacer eso, sin embargo, parecía también ser el respiro que necesitó, porque el niño lo había recibido alegre, preguntándole por lo que había llevado para él, y Ki Bum le dijo que le daría algo en casa, a él y a Taemin, y parecía que la mención de su nuevo amigo lo hizo más feliz todavía porque había saltado emocionado, y le preguntó unas cuantas veces acerca de si a su hijo le gustaría sus figuras de acción.

Nada fue como Ki Bum había planeado, porque al llegar, Min Ho corrió por la casa buscando a Taemin, que no respondió a su llamado, y tampoco vio a Jin Ki o Chang Seon, haciendo que se preocupara y antes de que él subiera a buscar al niño, la voz de Soo Man lo detuvo.

—Ven a mi despacho... —ordenó el hombre.

—Lo haré, en un momento, ayudaré a que Min Ho encuentre a Taemin y después...

—Taemin no está, ven ahora.

No esperó esas palabras, y quiso correr por las escaleras y toda la casa para confirmarlo, sin embargo, se obligó a seguir a su esposo dentro del despacho, notando como éste se veía demasiado serio para su parecer, que le hizo sentirse nervioso.

—¿A dónde fue Taemin?, Min Ho vino a jugar.

—Taemin y sus padres ya se fueron.

—¿Qué?

—Lo sabías Ki Bum. Jong Hyun se presentó diciendo que es el padre biológico de Taemin, y Jin Ki y Chang Seon no están dispuesto a perder a su hijo.

—Soo Man —se levantó de la silla —debes hacer algo, no puedes dejar que se vayan —pidió.

—Jin Ki es mi hijo, y Taemin mi nieto, no voy a dejar que nadie se los arrebate.

—Soo Man...

—Lo siento, Ki Bum... no voy a ayudarte.

Min Ho entró en el despacho corriendo, sin preocuparse en saludar a Soo Man porque era más importante decirle a su tío que no encontraba a Taemin y que debería de ayudar a buscarlo, ni siquiera le prestó atención a las lágrimas que caían por sus mejillas, sólo lo haló de la mano llevándolo por la casa en busca de su amigo. A Ki Bum se le partió el corazón doble vez, una por saber que su hijo había sido alejado una vez más de él, y otra por la manera en que Min Ho buscaba a Taemin.

—Taemin no está —se animó a decir luego de un momento.

—¿No está? ¿A qué hora va a volver?

—No lo sé.

No lo sabía, y eso dolía, porque las cosas ya no serían tan fáciles como antes, ya no podría llamar a Jin Ki e invitarlo a una fiesta de cumpleaños, porque estaba seguro de que éste no lo iba a aceptar, si tan sólo Jong Hyun no hubiera hablado, si tan sólo no le hubiera arrebatado por segunda vez a su hijo.