Epílogo ❤️

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El cachorro nació sano y a salvo una noche de noviembre. El medico que atendió al joven omega y a su cachorro recién nacido, se aseguró de que estuvieran bien y tranquilizó al joven e inexperto alfa que estaba de los nervios luego de presenciar el nacimiento de su hijo.

-¿Pero están bien?-Pregunto con preocupación mientras contemplaba a su omega, profundamente dormido por el agotamiento.

-Los dos están perfectamente. Cuando la anestesia pase tu omega va a despertar tranquilo, aunque con dolor como es natural luego de una cesárea. Ya te lo había dicho. Tres veces. Ahora, ¿quiere sostener a tu pequeño? Haré que una de las enfermeras lo traiga.

Una enfermera llego a la habitación de Jimin con un pequeño bulto en brazos, le dio a su pequeño bebé a Jungkook.

Las manos de Jungkook sudaban del nerviosismo. Su hijo era tan hermoso, pequeño y con un dulce olor a frutas y canela, tenía una diminuta mata de cabello negro, era la criatura más hermosa del mundo. Ya lo amaba. Daría la vida por él. Sabía que tenía lágrimas en los ojos y no se molestó en ocultarlas.

-Los dejo para que descansen.-La enfermera se inclinó.-Felicidades por su nueva familia.

Jungkook se recostó junto a Jimin con su hijo en brazos.

-Lo hiciste bien, amor.-Beso la frente de su omega, estaba impresionado por la fuerza de Jimin al enfrentarse al parto.-Gracias.

-Lamento las cosas horribles que te grité...-Jimin entreabrió los ojos, estaba agotado pero feliz. Acaricio la mejilla de su alfa con ternura.-No era enserio cuando dije que te regresaras a la cabaña del destierro, puedes dormir en nuestra cama.

-Admitió que me preocupe un poco.-Bromeó Jungkook.

-¿Como está tu mano?

-Viviré.-Le enseñó sus dedos vendados, Jimin lo sujetó con tanta fuerza que casi le quebró la mano. Un dolor mínimo a comparación del que soporto su omega. Jungkook ayudó a Jimin a ponerse en una posición más cómoda y le dio a su bebé. La imagen de ellos dos, Jimin besando la frente de su hijo y el pequeño soltando quejidos tiernos y estirándose con los ojos cerrados se grabó para siempre en su corazón.

-¿Tienes una idea de lo mucho que te amo?

Jimin asintió.

-Claro que si, porque yo te amo igual.-Se besaron con su bebé de por medio, el pequeño se quejó al no recibir la atención a la que estaba empezando a acostumbrarse.

-¡Oh, también quieres un beso?-Jungkook lleno de besos la frente de su hijo mientras Jimin reía.-Creo vas a ser un omega. ¿Vas a darme tantos problemas igual que tu papi?

-¡No soy problemático!

-Lo eres, amor.

Jimin hizo un puchero.

-Admite que disfrutas acudir en mi rescate.

Jungkook no era capaz de resistir la ternura de su omega. Le dio un beso en los labios.

-Para eso me tienes, amor.

Esa fue toda la privacidad que tuvieron, la familia entró enseguida y comenzó a babear sobre el bebé. Hoseok abrió una botella de champaña y brindaron por el nuevo miembro de la manada. Todos estaban fascinados con el cachorro. En especial Hoseok, quien miraba a Tae con ojos suplicantes.

Un Alfa para mis días de celo||•Kookmin (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora