XVI

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|F I G H T|


Megan Ross:

Subí con total calma hacía mi habitación. Estaba segura que el bolso de Alice se habia quedado ahí cuando subimos un rato a charlar.

En cuanto lo vi en mi cama, busque lo que pedía.

Y mi rostro se volvió confuso al no verlo dentro.

— ¿Dónde está? — murmuré, buscando entre sus cosas.

Cuando la puerta a mis espaldas se cerró de golpe. Y con ello, di un pequeño saltó en mi lugar del susto.

Estaba segura de que estaba sola.

A menos que…

Gire con total lentitud y en cuanto pude ver a la persona con la grandiosa idea de cerrar la puerta, le mire mal.

— ¿Qué crees que está haciendo? — inquirió, serio.

Fruncí el ceño.— ¿De qué hablas? ¿Qué estas haciendo tú aquí? — replique.

— No me cambies el tema, Megan — interfirió, serio.— ¿Qué crees que haces? — replicó.

Le mire confundida.— Hablando de ti con tu novia — respondí, obvia.

Su mirada se volvió seria.— ¿Y crees que hablar sobre mi hará que le agrades? — soltó, molestó.

Le mire incrédula.— ¿Realmente esperas a que me comporte de la misma forma en la que ella lo hace? — espeté.

Dio un paso firme hacia mí.— Eso esperaba — murmuró.— Elle soló quiere conocerte, Megan — añadió.— No seas tan fría con ella.

¿Fría?

Mi rostro se desfiguro.

Él creía que era fría.

Genial.

— No sé qué carajos esperas de esto, Thomas. Pero te aseguro que no va funcionar si quieres que me lleve bien con tu novia — solté, entre dientes.— Es mi decisión si quiero hablarle o no. Por que te aseguro que lo único que veo en ella es falsedad — añadí, encarandolo.

No dijo nada.

— ¿Entonces por qué sigues hablando? — cuestionó, sin expresión alguna.

— Por qué estoy cumpliendo tu capricho — murmuré, saliendo de ahí olvidando lo que Alice pedía.

Aunque ahora que lo pensaba, ella evitaba algo como esto en la mesa. Y se lo agradecía aunque no del todo.

Nadie de los adultos se había percatado de nuestra falta.
En cambio, los chicos sí.

Pues su rostro preocupado lo decía todo.

A excepción de Alice que parecía querer matar alguien en ese instante y Elle que sólo comía distraída.

Me senté junto a Alice y continue comiendo como si nada.

YOU AND ME | TOM HOLLAND [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora