Sangre Verdadera -Harry Potter. TERMINADA #1T

Voldermodt.24.

     - Es imposible, Thomas. -él me miró confundido, lo tomé de los hombros.- Draco es un buen chico, no le haría daño ni a una mosca. Draco es bueno, mi padre es bueno, mi madre es buena. Básicamente, mi familia es...

    Me callé. Thomas me miró confundido. ¿Cómo no estarlo? Si paré de hablar de golpe. Ahora entiendo todo. Cuando mi padre me habló sobre los tatuajes que nos llegarían, también hablaba de forma indirecta sobre nuestra llegada a los mortífagos. (Cap. 13).
    - Tu familia es... ¿Qué?. -me pregunta Thomas, haciéndome volver a la realidad.
    - Mi familia es mortífaga, Thomas. -contesté con los ojos aguados.

     Él me abrazó. Pero era un abrazo reconfortante. Me sentía como si estuviera en el cielo, volando y siendo libre. Como si estuviera comiendo chocolate... Bueno, creo que me entendieron.
     Después de su abrazo, yo... yo solamente ví oscuridad.

     Estaba en un parque, un parque vacío donde solamente se encontraba una madre y dos niños. Ella los llamó y se fue a quien sabe dónde. Miré detalladamente el lugar y encontré una amaca. Sonreí. Una silueta estaba en ella.

                        Harry. 

     Me acerqué para hablar con él. Necesitaba saber que pasó después de 'desaparecer' de Hogwarts. En realidad, ¡del planeta!. Okey, exageré. Pero es verdad...
     Mi sonrisa se volvió cada vez más grande -si es posible-. Me paré en frente de Harry para saludarlo alegremente, pero, cuando subió su cabeza, me destrocé tanto por dentro como por fuera. 

     Harry estaba con los ojos rojos, inchados. Ojeras adornaban debajo de ellos y unas pequeñas lagrimas casi inexistentes y secas estaban allí. Se paró, yo seguía preocupada. Me abrazó como nunca antes. Yo necesitaba ese abrazo.
     - Vete, por favor. Vete, _______. -se separó de mí. Aunque me haya encantado que mi nombre saliera de sus labios, me entristecí. 
     - ¿Porqué, Harry?. ¿Hice mal en venir aquí?

¿Venir aquí? ¿Acaso te has vuelto lcoa? Ni siquiera apareciste aquí porque querías. Es un sueño, imbécil. 

     - Vete, ________. -sus ojos esmeraldas se volvieron de serpiente. Me asusté e inconcientemente me caí, como si alguien me hubiera puesto el pie y hubiera caído por su culpa.
     - Harry. -lo llamé asustada.

     - Tranquila. -esa no es la voz de Harry.- Él ya no está aquí. 
     - ¡Harry! -mierda, de verdad me estoy asustando. Una sonrisa apareció en su rostro, pero no cualquier sonrisa. Era una sonrisa falsa, una sonrisa malvada.- ¡HARRY! Mierda, Harry. Sé que estás aquí. 

     Después de eso, estaba en la enfermería de Madame Promfey. Claramente, ella no estaba y Thomas me estaba poniendo una toalla mojada en  la cabeza mientras yo sudaba desesperadamente.
     -__________. ¿Estás bien?. -lo abrazé, de verda necesitaba un abrazo.- Dime, ¿qué soñaste? Soñaste con Harry, ¿verdad?

     Miré sus ojos celestes, ví tristeza.

     -Parecido, Tom. -me miró confuzo.- Estaba en un parque y ví a Harry. Me abrazó y luego me pidió que me vaya. Me caí y sus ojos se volvieron de serpiente y, ya no eran esmeraldas.

     Un silencio nos inundó.
     - ¿Dijiste... -tomó aire.- ¿Dijiste "ojos de serpiente"?. 
-lo miré confuza.- Si. ¿Porqué?
     -Creo que todo esto es sobre el mismo tema.

     -¿De qué hablas, Tom?. -pregunté separándome de él.
     -Voldermodt... -un escalofrío recorió mi espalda.- Voldermodt es el líder de los mortífagos. Y Voldermodt tiene ojos de serpientes. -hizo una pausa.- Creo que Voldermodt se está metiendo en tu vida, _________.

     -Explícate, por favor Tom. -rogué.
     -Creo que Voldermodt quiere que seas mortífaga.

Yo, literalmente, no podía respirar.