Capitulo 23: Memoria

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Cuando entró a su departamento, nunca se esperó encontrarse con el desastre que había frente a sus ojos. Papeles tirados, una taza hecha añicos, y la patita de la mesa ratona en algún rincón del lugar. ¿Qué rayos había pasado ahí? ¿Entraron a robar? Estaba seguro que no, la entrada no estaba forzada, y dudaba que alguien trepara catorce pisos para hurtar un lugar.


―¿Qué demonios...?― La última, y única, persona que pisó su departamento fue Ichiji―. Lo mataré...― Suspiró con pesadez, ahora tenia que limpiar todo. No era un maniático de la limpieza, para nada, pero eso ya era demasiado.


Comenzó por agarrar una bolsa grande de consorcio, ya que realmente estaba hecho un desastre. ¿Qué se supone que había pasado? El pelirrojo no era de las personas que perdieran el control de esa manera.


―¿Qué es esto?― Tomó unas hojas que estaban sobre la mesa, tenia muchos esquemas y algunos dibujos―. ¿Un cerebro humano?― Comenzó a leer todo, y, a cada párrafo que pasaba, las venas de su frente iban hinchándose más―. ¡¿Qué significa esto?!



En algún lugar del Bajo Mundo.


Toc, toc, tic, toc.

―Rosi, sabes que confío plenamente en ti, pero...―. Suspiró con pesadez―. ¿Estas seguro? Realmente no necesitamos gente. ¿De verdad son tan fuertes?

―...― Asintió mostrándose seguro de si mismo, el hombre frente a él sonrió de medio lado.

―No lo sé...― Apoyó su mejilla sobre el dorso de su mano―. ¿Tanto necesitas un sequito propio?

―...― Sacó una libreta de debajo de su capa de plumas, comenzando a escribir de inmediato―. 'Confió en ellos. En los tuyos también, pero son muy fuertes y cumplen ordenes sin miramientos. Confía en mí, Doffy. No te arrepentirás.'


El rubio se quedó callado, pensando en la razón por la cual el menor quería algo así. Por otro lado, era su hermano pequeño, podía cederle su capricho por una vez. Después de todo, ¿qué podía salir mal?


―Vale, vale―. Dijo finalmente―. Si son tan fuertes y obedientes como dices, entonces les daré un periodo de prueba. Que vengan mañana al mediodía.



Hospital General de Sabaody, habitación de Niji Vinsmoke.


Sus hermanos se habían ido hacia un rato, debían dejarlo descansar y les insistió en que fueran a dormir a casa en vez de quedarse en el hospital. Costó convencerlos, pero al final accedieron, prometiendo volver al otro día.

Ahora se encontraba mirando el techo, pensando en todo lo que sucedió. No estaba solo, se lo habían dejado mas que claro, y le alegraba el hecho de tenerlos junto a él.


Toc, toc.


Giró la cabeza al escuchar los toques en la puerta. ¿Quién sería? No esperaba a nadie a esas horas.

(One piece) Sálvame [Yaoi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora