Un amor de otro planeta

28-Supergirl Returns

A la mañana siguiente, Lena fue con Kara y los pequeños a L-Corp. Lena empujaba el carrito de los bebés y Kara llevaba una enorme bolsa con sus cosas. Melissa miró a Lena con desagrado y se acercó a ayudar a Kara.

-Melissa: No debería llevar tanto peso aún, señorita Danvers...

-Kara: No pesa tanto... Además, si todo va bien, dentro de un rato podré levantar un camión sin problemas.

-Melissa: Todo irá perfectamente. Señorita Luthor, usted y los bebés se quedan fuera.

-Lena: ¿Es peligroso?

-Melissa: No debería. Pero si funciona y sufre una sobrecarga, sus poderes podrían descontrolarse.

-Lena: Entonces entraremos con Kara. Y por su bien, espero que eso no ocurra.

-Melissa: Como quiera.... - dijo apretando los labios. y entrando, con Kara, Lena y los bebés siguiéndola - Túmbese en la lámpara de luz solar amarilla, señorita Danvers.

-Kara: ¿No me cambio?

-Melissa: No será necesario. Es más sencillo de lo que piensa.

-Kara: ¿Cómo de sencillo?

-Melissa: Así... - dijo colocando el trozo de Kryptonita sobre el pecho de Kara y encendiendo la lámpara.

-Kara: ¿Sólo esto?

-Melissa: Habrá que esperar, el efecto no es inmediato....

Kara cerró los ojos, relajándose. Lena observaba a la doctora, en silencio. Había algo en ella que no le gustaba. Y le gustaba aún menos verla cerca de Kara. Pero no entendía por qué. Sus movimientos eran siempre demasiado precisos. No hacía nada sin haber calculado antes todos los riesgos, o al menos le daba esa impresión. Quizás eso para el resto de la gente pudiese parecer algo bueno, pero a Lena no le parecía ni tan bueno, ni normal.

De pronto desvió la mirada hacia Kara, al ver que hacía un movimiento brusco.

-Lena: ¡Kara! - dijo acercándose.

-Melissa: No - la detuvo, impidiendo que llegase a ella.

-Lena: ¿Qué le pasa?

-Melissa: Es normal....

-Lena: ¡¿Normal?! ¡Eso no es normal! -gritó, al ver el cuerpo de Kara agitarse.

-Melissa: La Kryptonita está funcionando. El cuerpo de Kara vuelve a absorber la energía solar. Pero lo está haciendo más rápido de lo normal. Como  ya le dije, eso podía ocurrir. Le aconsejo que usted y sus hijos salgan de aquí.

-Lena: No pienso irme...

-Melissa: Si pierde el control de sus poderes, puede hacerles daño. ¿Eso eso lo que quiere? ¿Tan poco le importan sus hijos...?

-Lena: Claro que me importan. Más que nada. Pero también me importa ella.

-Melissa: Entonces esperen fuera.

-Lena: ¿Y usted se queda?

-Melissa: Por supuesto.

-Lena: ¿Y si pierde el control...? - Ironizó - ¿Sabe qué? Espero que lo haga... Espero que Kara pierda el control un segundo y le meta un rayo calorífico por el culo.... - salió con los niños, enfadada.

-Melissa: Eso no ocurrirá. Puedo controlarla. - dijo cerrando la puerta .

Pasaron varios minutos hasta que el cuerpo de Kara dejó de agitarse.