48-cosas

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Tras lo ocurrido en el despacho de Lena, pasaron 2 semanas. Dos semanas en las que Lena le había pedido a Mel que la acompañase a todas las reuniones y que no la dejase sola.

También en esas dos semanas, Mel le había pedido a Kara que volviese a entrenarla, porque quería poder cambiar sin poner a nadie en peligro. Quizás, así podría ayudar también a Supergirl...

Alex y Sarah seguían centrándose en la pequeña Laurel, pero pasaban a visitar a Lena y a Kara siempre que podían.

Kara estaba preocupada por Lena. Después de aquél incidente, los recuerdos volvieron a laa mente de Lena y solía tener pesadillas por las noches. Pesadillas que la hacían gritar y llorar, asustada. Kara sólo podía abrazar a Lena y decirle que no pasaba nada y que todo iba a estar bien.

Esa noche, Kara se despertó. Lena se había quedado dormida con la cabeza sobre su pecho, y no se había movido. Kara escuchó atentamente. Lena parecía tranquila, relajada. No parecía que estuviese teniendo ninguna pesadilla. Llevaba ya tres días que no las tenía. Justo los mismos días que se quedaba dormida sobre el pecho de Kara.

Kara acarició el pelo de Lena y luego su vientre. Puede que Lena aún no notase nada, pero ella sí. Notaba al bebé moverse y estaba deseando tenerla en brazos. Al día siguiente, Mel le haría otra ecografía a Lena.Kara se movió con cuidado y se levantó al notar que Lena no tardaría en despertar. Miró el reloj. Faltaban dos minutos para las cuatro. Justo la hora en la que Lena solía despertarse y pedir sus nueces con nata y chocolate. 

Kara preparó en un tazón las nueces, la nata y el chocolate, todo en buena cantidad y volvió al cuarto, esperando.

-Lena: Kara, cariño.... - dijo, tanteando en la cama - ¿Kara...?

-Kara: Aquí tienes, amor... - dijo, tendiéndole el tazón.

Lena la miró, confusa.

-Lena: ¿Ya....?

-Kara: Siempre es a las cuatro en punto...

-Lena: ¿Cuánto tiempo llevas ahí?

-Kara: Dos minutos... Venga, come... - dijo mirándola - Hoy no has tenido pesadillas...

-Lena: No... Creo que es la forma en que me quedo dormida...

-Kara: ¿Sobre mí...?

-Lena: Sí... Me relaja escuchar tu corazón.

-Kara: Si eso te ayuda, puedes hacerlo cuando quieras...

-Lena: Gracias... - dijo terminando el tazón - ¿Me traes más?

-Kara: ¿Más...?

-Lena: Por favor... - dijo mirándola con ojitos de perrito.

-Kara: Está bien... - dijo saliendo y volviendo poco después, con un tazón más pequeño - Pero no mucho más. 

Cuando se lo terminó, Kara lo dejó en la cocina y volvió a tumbarse, abrazando a Lena y dejando que apoyase la cabeza en su pecho.

-Lena: Gracias...

-Kara: Te quiero...


A la mañana siguiente, Mel las esperaba en L-Corp. Nia estaba allí, había pasado a verla un rato y llevarle un café. Se estaban besando cuando Kara y Lena llegaron con Kieran y Llara de las manos.

-Kara: Mira eso, amor...

-Lena: Ya lo veo...

Al notar que las observaban, Mel y Nia se apartaron, completamente rojas.

Un amor de otro planetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora