Exclusivamente mía

Renacer

Kagome: Gracias por ayudarme Jakotsu.

Jakotsu: ¡¿Pues como me iba a negar querida?! Ya sabes que cuentas conmigo para lo que sea *Le sonrió entusiasmado* Claro que iba a apoyarte luego de todo lo que esos dos cabrones te hicieron, los hombres son todos iguales *Enojado* Uno te embarazada y no se hace responsable y el otro dice que te ayudará pero te deja tirada como muñeca de trapo.

Kagome: Inuyasha no fue tan malvado *Dijo con timidad*

Jakotsu: Mejor olvidemos el asunto *Sonrió* Es una suerte que tenga un apartamento fuera de la ciudad y que me hayas podido contactar.

Kagome: ¿Te siguió Bankotsu o algo así?

Jakotsu: Claro que no, se ve que tenía necesidad de que me fuera para cogerse a la pelirroja que tenía en la casa ayer *Roló los ojos* Así que no te preocupes que nadie te va a encontrar aquí, es una lástima que estuvieras tan bien en el hotel de playa como para que te siguieran el rastro.

Kagome: Mis padres han puesto a todo el mundo a buscarme y le darán 50 millones de dólares a la persona que me encuentre.

Jakotsu: ¡Qué estupidez! Tú vales más que eso, es una ofensa.

Kagome se rió un poco, al fin tenía algo de compañía conocida y eso la hacía sentir bien, durante los últimos meses había estado escondiéndose de todo el mundo en hoteles donde no fuera reconocida por nadie, lo había hecho bien hasta que se hizo amiga de una chica y días más tarde la delató, cuando salió de allí ya no tenía otro lugar a donde ir y recordó a su amigo Jakotsu que una vez la había aconsejado, temía que Bankotsu se enterara pero decidió arriesgarse y Jakotsu sin pensarlo dos veces acudió en su ayuda, se quedó con él en un apartamento que él tenía fuera de la ciudad y solamente esperaba tener al bebé para buscar un trabajo aunque fuera humilde porque poco a poco se le agotaban los recursos, además ya había trabajado antes, no podía ser tan difícil de nuevo.

Jakotsu: Ni loca irás a buscar trabajo Kag *Enojado* ¡Después del embarazo debes descansar al menos un año!

Kagome: Pero yo solo decía que… ¿Un año? *Sorprendida*

Jakotsu: ¡Pues claro! 3 meses para ti recuperación y 9 meses en los que cuidarás de él.

Kagome: Exagerado mucho.

Jakotsu: Hablo en serio *Sonrió* Además no tienes porqué preocuparte por eso, ahora que vivimos juntas compartiremos todo y aquí conmigo no te hará falta nada.

Kagome: No Jacky, te dije que no quiero ser molestia de nadie.

Jakotsu: ¡Mejor cállate y veamos una película!

El entusiasmo de Jakotsu hizo que se olvidara de sus problemas por un mes más, todos los días era una rutina en la que él se iba a la universidad a estudiar aunque ahora le quedaba mucho más lejos el lugar y Kagome había podido conseguir un empleo en línea donde no era necesario que saliera de su casa para ganar dinero, la barriga además no la dejaba hacer mucho, era tan grande que se sorprendía, le costaba bañarse y hacer las cosas habituales en la casa, agradecía que Jakotsu fuera tan paciente con ella pero en cuanto tuviera el bebé se iría para no crear más molestias, reconocía que por ahora necesitaba ayuda, no había hablado con nadie más y seguramente ahora todos estaban preocupados, pero simplemente no podía salir a arreglar sus problemas y menos en el estado en el que estaba.

Cuando el mes acabó por fin pudo estirarse, como era sábado no tenía que trabajar en la computadora y solo se iba a dedicar a dormir, sin embargo el ruido en la otra habitación la despertó y a duras penas llegó a dónde Jakotsu.

Kagome: Buenos días *Somnolienta* ¿Qué pasa?

Le pregunto al ver que él metía sus cosas en la maleta una tras otra sin detenerse con rapidez.