Historias cortas vol.2

Ella.

Tengo la agenda llena y no solo la agenda, la cabeza la tengo ocupada llena de pensamientos.

Mis pensamientos son varíados y llenos de nudos y encrucijadas, mis ojos se desorbitan y siento cada vez más que colapsaré. Cuando estoy al limite, en ese punto en el que me saldré de las casillas, estás tú.

Ese tú que me llena el alma, me llena la vida y me hace ver las cosas en distintas perspectivas. Esa persona que con solo una mirada me cautiva y me enamora aún más.

Camino firmemente y me dirijo a verla, estoy nervioso tal y como la primera vez que la ví. Me sudan las manos y ya puedo ver sus ojos y sus labios acercándose a los mios. Me duele la cabeza y me duele la espalda, me siento mal.

"Amor" dice a lo lejos y se acerca dando esos pasos que tanto amo. Todos los dolores se esfuman y me siento en las nubes, soy un ser dócil y hago lo que quéramos en el momento. Recuerdo cada frase, cada mensaje y cada mirada que me da. Recuerdo sus movimientos y reacciones a la perfeccion porque, siempre estoy observando su bello rostro y su hermoso cuerpo. Aunque tenga una atracción física importante por ella, lo que me cautivó fue su forma de ser, de ver la vida.

No todo ha sido bueno, muchas veces me he sentido triste y desolado pero le miro sus ojos y recuerdo que la amo con mi vida.

Cuando se despide de mí y me da la espalda, mi corazón se estremece y duele, la necesito aquí conmigo, siempre. Como me gustaría que su cuerpo estuviese en contacto con el mio y nuestras almas conectadas por nuestras palabras, miradas y besos.

Cuando estamos tensos siento un pie en el pecho que me aprieta y me inquieta, siento que el mundo se acaba y no tengo mi cabeza en nada más que en ella.

Mi corazón y mi mente son de ella, mi ser le pertenece y me entrego por completo.

Es la alegria de mis ojos y la luz de mi camino, cualquier paso que de en las tinieblas es seguro y puedo hasta correr si es de su mano, puedo hacer lo que sea si ella está a mi lado.

Cuando la tomo de la cintura y me habla al oído siento un éxtasis que nunca había sentido antes, cuando estamos hablando y nos conectamos, siento lo que ella siente, lo que pasa por su cabeza sigo pensando desde el primer dia que la vi que sería algo más que algo pasajero.

Cuando comence a enamorarme me dije: "Chico, estás entrando en algo serio" y asi me encontre atrapado en tus brazos y en tu aroma.

¿Mi agenda llena? No es impedimento para verla.

¿Dolor de cabeza? No es impedimento para amarla.

Cuando ella misma quiere alejarse de mi y no querer verme, el amor que sentimos ambos es más fuerte y rompe el orgullo que podríamos llegar a sentir.

Esos "Te amo" que le digo expresan mil veces más de lo que ella cree.

¿Es esto el paraiso? No muchacho, esto es el amor.

"Eres el amor de mi vida" le digo, a lo que me responde "¿Cómo estás seguro de eso?" y le respondo amorosamente "Porque te amo" pero no es solo por eso, es porque me alborota el universo y me acelera la respiración. Porque la veo y mi corazón salta de felicidad, porque la miro a los ojos y me hundo en ellos, porque le tomo las manos y siento su calor.

Su amor curó mis heridas y le dió significado a mi vida, me guía cuando estoy perdido y me contiene cuando me caigo. Toma mi menton y lo levanta y tiernamente dice "Estoy aqui para ti, siempre" y, ¿Sabes? Aunque no este físicamente conmigo, siento sus manos tocándome y siento su respiración en mis mejillas o en mi cuello.

Su amor me hace mejor persona, su amor vale la pena en todo momento y, ¿Sabes? Ella... ella... valdrá la pena ahora y siempre.