Again You (Wolvesilver)

Uno

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Despertó cuando escucho los pasos dentro de su habitación, gruño por lo bajo, sabiendo excatamente quien era y lo que pasaba. Sintió como el colchón de su cama se movía a su lado, y momentos después sintió unos helados pies jugueteando con los suyos.

- ¿Qué haces aquí, niño? - preguntó con voz pastosa, Peter se sobresalto, y lo miro en la oscuridad.

Podía distinguir sus facciones a la perfección, a pesar de que la noche opacaba todo, miro sus párpados cerrados y la barba en su mentón. Las ojeras bajo sus ojos siempre se habían visto igual de bien. "Que atractivo es..." pensó.

- ¿No es obvio? - cuestiono con un deje de suspicacia. - Me acomodo para dormir.

- Tienes que dejar de hacer esto, - murmura, una vez más. - ya es la quinta vez esta semana.

- No te has quejado. - se burla el menor mientras se envuelve en las mantas, que huelen como Logan, embriagador. - Además, si quisieras echarme, ya lo habrías hecho.

Sonríe con satisfacción cuando Logan abre los ojos y lo mira con una ceja enarcada. El joven se le había estado insinuando desde que llegó a la Mansión, con sonrisas coquetas y toqueteos, hablaba con el mayor sin parar, y gastaba todo su tiempo con él, Peter era todo menos discreto, pero Logan no podía negar que todo la situación lo enternecía.

Pero no iba a admitir ese detalle en voz alta, nunca. Menos frente a Peter... y mucho menos frente a Erick.

- Si tanto te molesta que esté aquí, me iré. - susurro, antes de que pudiera sacar un pie de la cama, el mayor le envuelve la cintura con un brazo.

- Ya estás aquí. - murmura, mientras vuelve a cerrar los ojos, Peter se acerca más hacia el cuerpo de Logan y coloca la cabeza en su pecho.

- ¿Qué tal estuvo tu día? - pregunta, Logan suspira, mientras reprime una sonrisa en la esquina de los labios.

- Pensé que querías dormir. - se queja el mayor, acariciando la piel de Peter inconscientemente.

- Solo trato de ser amable. - murmura, entornando los ojos, pero sin estar molesto realmente.

- Cansado, - se queja, Peter levanta la mirada y lo mira. - la misión fue muy cansada.

Peter sonríe de lado, se siente muy importante cuando Logan se abre a él - cosa que ha sucedido contadas veces - le pone la mano bajo el mentón y lo acaricia, el mayor abre los ojos justo en el momento en que Peter apoya sus labios sobre los del otro hombre, habían compartido "besos" antes, que más bien eran roces, siempre iniciados por Peter, y siempre terminados por Logan.

- Para. - suspira, y le aparta el rostro, con los dedos haciendo presión en las mejillas del menor, formándole una mueca muy graciosa. - No lo hagas, niño.

- ¿Por qué? - se queja, toma la mano del mayor con la suya y la mantiene entre las suyas. - Sé que también te gusta, no te hagas, entonces ¿por qué no?

- Soy demasiado mayor para ti. - explica, y el peli-plateado entorna los ojos. - Podría ser tu padre.

- ¿Y eso que? - replica, con la fiereza en los ojos que lo caracteriza. - Me gustas, en serio, en serio.

- Soy solo un capricho tuyo. - contraataca el mayor, Peter se separa de sus brazos, al borde de la cama, siente como las lágrimas se le acumulan en los ojos, pero se rehusa a llorar. - Ven, niño vas a~

Peter se mueve hacia atrás tratando de no ser tocado por el mayor, pero cuando siente como está a punto de caer por el filo toma la mano del mayor y se devuelve a su pecho desnudo.

- No eres un capricho, sé lo que son los caprichos, pero tú me gustas en serio, no sé como, pero lo sé. - su voz es baja, y Logan suspira negando con la cabeza.

- Estás volviéndome loco, mocoso. - le levanta la cabeza por el mentón y le planta un beso en los labios, es lento y suave, hasta que las manos de Peter suben a su cabello para atraerlo con más intensidad hacía él. Sus movimientos son inexpertos, y descuidados, mientras Logan lo abraza por la cintura, con maestría antes de separarse con la frente unida a la del menor. - Con calma.

- Después te arrepentirás. - niega con la cabeza levemente antes de continuar besándolo. - Tengo que aprovechar esto.

Logan le sonríe, le abre la boca con el dedo pulgar y lo besa, con intensidad, tragándose los jadeos y suspiros que se escapan de lo boca del menor.

- Sabes a cigarro. - comenta Peter, lamiéndose los labios, los ojos de Wolverine se entrecierran un poco.

- Y tú a comida chatarra. - le besa las comisuras de los labios antes de asentir, como si comprobase su teoría.

Peter ríe, con las manos unidas tras el cuello del mayor, y por primera vez en bastante tiempo, Wolverine sonríe con sinceridad.

(***)

Han pasado toda la noche hablando, y ahora estaban recostados, con las piernas entrelazadas, mirando sus manos una junto a la otra. Las manos grandes y robustas de Logan, con cicatrices y marcas, junto a las delgadas y cálidas de Peter, lucían tan diferentes.

Es como mirar nuestros corazones, había pensado Logan durante un momento, que bonito pensamiento.

- Deben ser las cuatro de la mañana, - murmuro con voz queda Peter, al fin parecía quedarse dormido, se giro, con el pecho de Logan tras él, y acomodó la cabeza sobre la almohada. - Es bueno que mañana sea sábado.

- Sí... - coincidió el mayor, abrazándolo más fuerte por la cintura. El cabello del joven le hizo cosquillas en la nariz, y sonrió sintiendo aquel sentimiento expandiéndose en su pecho.

Lo observó mientras dormía, parecía tan calmado y angelical, totalmente lo que no era mientras estaba despierto; hasta que surgió aquel pensamiento, trató todo lo que pudo por alejarlo, intentó quedarse dormido, pensar en su siguiente clase, sus estudiantes, incluso en las bonitas y delicadas facciones de Peter.

Sintió la culpa y el temor reemplazando la pizca de felicidad que había sentido, y de pronto pensó en que debía proteger a Peter de todo, a toda costa, incluso del mayor peligro de todos: él.