Extra: Valiente (AU)

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Peter empuja con sus dos manos sobre el pecho del hombre, quien no parece querer respirar por más que el castaño trate de obligarlo a hacerlo, le cubre la nariz con los dedos y pone su boca sobre la del extraño, dándole aire. Hasta que por fin -y gracias a Dios- el rubio comienza a toser, mientras las manos de Peter lo ayuda a ponerse de lado, haciendo que escupa toda el agua en sus pulmones.

- ¡Alan! - chilla la chica pelirroja a su lado, abrazándose a su cuello, mientras el rubio toma aire por la nariz, las personas alrededor aplauden levemente, felicitando al joven que le salvó la vida al pobre rubio que posiblemente podría haber muerto ahogado por el salvavidas enclenque que no supo ni siquiera, como sacarlo del agua -cosa de la que tuvo que encargarse Logan-.

- De acuerdo, creo que es hora de irnos. - farfulla, enlazando sus dedos con los de Logan, tras él, se levanta de la arena caliente para apoyarse contra el pecho del mayor.

Recogen las cosas bajo la sombrilla, y las meten en la canasta, mientras Peter obliga a su novio a ponerse la camiseta, enfurruñado por las miradas que todo el mundo le dedica a su torso. Logan ríe y le susurra que no hay nada de que preocuparse, que lo ama solo a él y a nadie más, pero el joven paramédico insiste, así que su novio no tiene más remedio que aceptar.

- No me gusta lo que hiciste. - murmura, con la cabeza baja, abriendo la puerta del auto y dejando la cesta en el interior, Peter se sienta en el asiento del copiloto y frunce el ceño, mientras ladea una sonrisa.

- ¿Hablas de salvarle la vida a la gente? - cuestiona, el mayor sonríe también, sentándose en el asiento frente al volante.

- Hablo de la respiración boca a boca. - se queja, Peter entorna los ojos, y pone la mano sobre la de su novio.

- Creí que ya habíamos hablado de esto, anciano. - farfulla, acomodándose sobre la superficie de cuero, y dedicándole una mirada enmarcada por cejas perfectamente perfiladas.

- Sí, lo sé, - murmura, girando en una curva, mirando de soslayo al menor. - pero siento que es...

- Extraño. - completa el chico de rizos, Logan suspira, y asiente levemente. - Amor...

- Sé lo que vas a decir, y lo entiendo, enserio que sí. - afirma, parando el auto cuando se encuentra con un semáforo rojo. - Yo solo... - pone la mano sobre la pierna del menor. - solo...

- "I was born to love you, with every single beat of my heart..." - canturrea, y Logan entorna los ojos, sonriendo. - Anda, sabes como continúa.

- "Yeah, I was born to take care of you, every single day..." - contesta, riendo, antes de volver a arrancar.

(***)

Los hombres y mujeres caminan alrededor de las cenizas, aún con las pesadas botas y los sucios uniformes puestos, a excepción de Hank y Logan, que están sentados en el borde de la ambulancia, con la puntas de los pies casi rozando el suelo.

- De acuerdo, grandulón, - avisa Peter, dando un suave golpe en el hombro de Hank. - como nuevo.

- Necesito hibernar hasta agosto. - se queja, levantándose y caminando hasta el camión de bomberos, hasta recostarse contra una silla.

- Ahora sigues tú, - farfulla el paramédico, mirando al mayor. - ¿dónde?

- Aquí. - señala, extendiendo la mano derecha una gran mancha roja se extiende por el borde lateral de su palma, Peter asiente, tomando su brazo con delicadeza, aplica analgésicos y una pomada que parece reducir el ardor en su carne, las manos del menor le envuelven la venda alrededor de la mano, delicadamente, mientras hace aquella mueca de concentración que Logan ama. Cuando acaba, no suelta su mano, sino que la sujeta y mira sus nudillos, llenos de cicatrices de quemaduras, manos que han cargado mujeres, niños y hombres, manos que han salvado vidas. Peter le besa el dorso y los nudillos con delicadeza, antes de sentarse a su lado.

Again You (Wolvesilver)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora