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-¿Te gusta Nick? -preguntó Leila sorprendida después de escuchar a Camila.

-¡No! -negó la morena moviendo su cabeza de un lado al otro. -No lo sé. -agachó la mirada unos segundos y después volvió a ver a su amiga. -No creo que sea eso.

-Dices que no te gusta verlos juntos y sientes algo en el pecho cuando se besan... -dijo Leila viendo por un momento a su hermano que estaba jugando con Sofi en los columpios del parque. -... y si no es Nick entonces es Lauren la que te gusta. -dijo finalmente.

-Lauren es linda y eso pero no creo que me guste. -la morena seguía negando con la cabeza. Parecía que trataba de hacérselo entender a sí misma.

-¿Cómo dices que es? -preguntó Leila de repente haciendo que Camila se confundiera.

-Pues es un poco más alta que yo, tiene el cabello negro y piel muy blanca. -le dijo Camila sin entender el por qué de la pregunta.

-¿Tiene ojos verdes? -Camila asintió con el celo fruncido. -¿Y no es la que está allá? -señaló detrás de Camila.

La morena se giró tan rápido que casi se caía de la banca en la que ella y Leila estaban sentadas. Efectivamente Lauren estaba a unos metros de distancia. Tenía su celular en la mano y una gran sonrisa en la cara. Camila sintió su corazón acelerarse al verla sonreír de esa manera. De pronto, Lauren levantó la mirada y dió con las orbes marrones de Camila. En ese momento Camila no sabía si seguía respirando o se había desmayado por la intensidad de la mirada y sonrisa de la pelinegra.

Lauren levantó su mano y la agitó para saludar, inconscientemente Camila respondió de la misma forma.

Muy aturdida, la morena volvió a girarse, encontrando la mirada divertida de su amiga pelirroja.

-Me queda claro que no te gusta. -se burló Leila con una sonrisa de lado.

-Basta, Leila. -se quejó Camila llevando sus manos a su cabeza. Recargó sus codos en sus rodillas y se tapó la cara con sus manos.

-Mila... -la llamó Leila.

-Ahora no. -volvió a quejarse.

-Camila... -insistió la pelirroja.

-Basta, dije. -Leila llevó una de sus manos al hombro de Camila y la sacudió, haciendo que esta levantara la cabeza. -¿Qué? -preguntó molesta.

-Viene hacia acá. -le murmuró.

-¿Qué? ¿De qué hablas? -Leila señaló detrás de Camila y, cuando ésta se giró, se dió cuenta que Lauren se había acercado a ellas.

-Hola Camz. -le sonrió. Camila se levantó de la banca, atónita por la sonrisa de Lauren.

-Hola Lern. -dijo Camila sonriendo de igual forma. Se quedaron un momento viéndose a los ojos hasta que la más alta desvío su mirada un momento detrás de Camila. Ahí fue cuando la morena reaccionó. -Oh, ella es Leila, mi mejor amiga. Leila, ella es Lauren.

-Un gusto. -dijo Leila estirando su mano.

-Lo mismo digo. -Lauren tomó la mano de la pelirroja. Después la soltó y volvió a ver a Camila.

Estaba a punto de hablar cuando una pequeña niña corrió hacia Camila mientras lloraba y un niño pelirrojo iba a hacia Leila con los brazos cruzados.

Camila se agachó para abrazar a su hermana mientras veía a Leila confundida. La pelirroja trataba de hablar con su hermano pero este se había sentado en la banca aún con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

-¿Qué pasa, Sofi? -preguntó Camila suavemente mientras acariciaba la espalda de la morena menor que no dejaba de llorar. -Tranquila, pequeña. Cálmate y dime por qué lloras.

Sofi se separó un poco de Camila y cerrando los ojos empezó a respirar hondo unas cuantas veces. Lauren, que estaba viendo todo sin decir nada, se dió cuenta que lo que estaba haciendo Sofi era igual a lo que hacía Camila para calmarse.

Después de unos segundos, Sofi dejó de llorar y vió a Camila haciendo pucheros.

-Estábamos jugando Ashton y... y yo en los... columpios... -explicaba Sofi dejando espacios para sorber su nariz y haciendo señas con sus manitas mientras Camila esperaba pacientemente a que terminara. -... entonces yo me bajé un momento para... para atarme las agujetas... cuando me quise subir... de nuevo al columpio Aston me lo había quitado. -sus ojitos volvieron a llenarse de lágrimas. -Le dije que me lo devolviera pero... pero dijo que no, que era suyo ahora.

Sofi volvió a esconderse en el pecho de Camila mientras lloraba otra vez y Camila intercambiaba miradas divertidas con Leila.

Mientras Camila trataba de que su hermana dejara de llorar, Leila regañaba a Ashton y le daba una plática sobre compartir las cosas. Al final Sofi y Ashton hicieron las pases y regresaron a los columpios.

La morena volvió con Lauren viéndola tímidamente.

-Lo siento. -se disculpó.

-Tranquila, sé lo que es lidiar con niños pequeños. -dijo Lauren riendo. -Me tengo que ir, Camz. Nos vemos mañana en el colegio. -se acercó a darle un beso en la mejilla a la morena y agitó su mano en dirección a Leila.

-Adiós. -murmuró Camila pero Lauren ya se había ido.

Leila miró a su amiga, después a Lauren y volvió a centrar su atención en Camila, específicamente en su sonrisa y la mirada pérdida que tenía. Estaba completamente segura que a Camila le gustaba Lauren, su cara la delataba, pero no iba a presionar a la morena. A su tiempo se daría cuenta.

-Kaki, ¿ya nos vamos? -dijo Sofi llegamos al lado de su hermana que, obviamente, seguía perdida en sus pensamientos. -Kaki... -insistió Sofi tirando de la blusa de Camila.

-¡Camila! -gritó Leila logrando que Camila al fin les pusiera atención.

-¿Qué? -preguntó Camila aún un poco desorientada.

-¿Podemos irnos ya? Tengo hambre. -dijo la pequeña Sofi con un puchero en sus labios.

-Pero comimos antes de salir de casa, Sofi. -respondió Camila.

-Pero tengo hambre. -volvió a decir Sofi.

-También tengo hambre. -saltó a decir Ashton mirando alternadamente a su hermana y a Camila.

-Vamos a mi casa, mamá puede prepararnos algunos sándwiches.

-¡Siii! -gritó Ashton. -Los sandwiches de la señora Sinu son los mejores.

-Yo te preparo los sandwiches que te llevas al colegio. -le reclamó Leila.

-Pero no saben igual a los que prepara la señora Sinu. -indicó el menor.

-No empiecen a pelear y mejor vámonos. -dijo Camila tomando la mano de Sofi y empezando a caminar siendo seguida de Leila y Ashton.

Cuando llegaron a la casa de los Cabello se llevaron la sorpresa de que Sinu había preparado ya los fabulosos sandwiches que amaba el pequeño pelirrojo. Comieron y después los más pequeños jugaron un rato mientras Camila y Leila seguían platicando sobre la pelinegra que se vivía dando vueltas en la cabeza de la morena.

Al llegar el atardecer la madre de los pelirrojos fue a recogerlos. Camila cenó con su familia y después de bañarse se fue a su habitación con el objetivo de ir a dormir pero la plática que tuvo con su amiga horas antes la dejó pensando.

¿En verdad le gustaba Lauren?

Era cierto que desde hace unos días le gustaba pasar tiempo con ella, verla reír, abrazarla y cosas así. Además, había perdido el interés por Ariana después de que Dinah le dijo por accidente que la castaña se estaba viendo con un chico que se había mudado cerca de su casa.

No podía gustarle Lauren, era novia de su mejor amigo. Pero para su desgracia así era. Le gustaba Lauren y tenía miedo de que eso se volviera más grande y terminara complicando su amistad con Nick.








En un par de horas es 3 de marzo aquí y me llegó la nostalgia de que Camila va a cumplir 22 años. Lo único bueno de estar llorando ahora es que pude terminar al fin el capítulo 😅.

Gracias por leer ❤️

Me enamoré de ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora