Magnífica Melodía | Kookmin

XXII."Good day"

Algunos meses habían transcurrido, Sun había estado asistiendo a todas y a cada una de sus citas con el doctor y afortunadamente, les informaron que estaba mejorando bastante en poco tiempo.

Se le podía notar a Jimin un poco decaído debido a que los finos cabellos de la pequeña niña comenzaban a caer cuando los acariciaba o cepillaba como petición de la niña.

A ambos les dolía ver como Sun perdía su fuerza de la nada, su cuerpo era cada vez más y más frágil, el doctor explicó que era normal... efecto secundario de las quimioterapias.

Apesar de todas las consecuencias de su enfermedad, la niña siempre tenía grandes sonrisas y abrazos que regalar.

Eso les daba esperanzas.

En cuanto al caso especial de su progenitor, bueno, se había marchado una vez más luego de echarles en cara que tenía una nueva mujer... qué descarado.

A partir de aquel enfrentamiento entre Jeon y el señor Park, Jungkook se encargaba de que todo estuviera bien y lo protegía... si, aún más.

[...]

- No sé que hacer... ni siquiera se porque estoy hablando conmigo mismo ahora frente al espejo. Dios, soy un completo patético.

Rió con ironía rodando sus ojos.

- Bien, Jeon Jungkook... ¿Qué tan dificil es ir con Jimin y pedirle que sea tu novio?.

Guardó silencio por unos segundos pensando en su propia pregunta a la par que mordía su labio inferior.

- Bueno, para comenzar, es Jimin... El chico mas hermoso que alguna vez haya visto, es un chico maravilloso, es el chico que roba mi sueño... el merece algo especial, Jeon Jungkook, ¡No puedes solo llegar y pedirselo!. No... no, no, así no. Simplemente dejaré que las cosas fluyan.

Se acomodó su ropa decidido a salir del cuarto de baño. Cerró sus ojos exasperado y chasqueó su lengua.

- No, Jeon, eso tampoco... has dejado que las cosas fluyan durante todo éste maldito tiempo esperando el momento indicado. Claramente hubo demasiados y ninguno aprovechaste... Agh ¿En donde demonios tienes la maldita cabeza?.- se golpeó un par de veces y dejó de mover sus manos cada vez que hablaba para posarlas en el lavamanos y recargarse.- Piensa, piensa, debe ser especial ¿Cuándo había estado tan nervioso en hacer esta propuesta? nunca, nunca... jamas. Jimin ¿Que hiciste conmigo?.- sonrió eternecido pensando en dicho joven.- Dios, vuelve, pon los pies en la maldita tierra.- comenzó a jugar con sus dedos sobre la superficie.- Bien, lo tengo, está decidido y no lo cambiaré por nada del mundo. Yo...

El timbre sonó y sus ojos se abrieron como platos girando rápidamente para poder ver la puerta de la entrada.

- Ahora voy...- aviso desde el baño comenzando a correr para atender.- Jimin...- sonrió lo más natural que pudo debido a toda la carga de nervios que estaba experimentando ahora mismo.

- Hola, Jungkookie... ¿Estás bien? te ves demasiado nervioso.

- Cr-creo que estoy bien.-respondió haciéndose a un lado.- Anda, pasa.

- Supuse que aun no habías comido, así que traje algo para comer.

Le mostró la bolsa que tenía en manos y se adentro dejándola en la mesa para despojarse de su abrigo

- No debiste preocuparte.- caminó a él dejando un beso en su sien para luego caminar a la cocina por un par de platos y vasos para disfrutar del pollo frito que Jimin compró

- ¿Seguro que te sientes bien?.- frunció el ceño confundido y tocó el rostro del más alto para revisar su temperatura.

- Eh, sí... estoy bien.- llevó su mano a su nuca como muestra de nerviosismo y sonrió.- comamos...