Luchando contra el destino

Capítulo 3

(Jessica)

Me bajo del coche aparcado en la plaza que los médicos teníamos reservada en el Parking del hospital.  Me acerco a la recepción para fichar, hoy estoy realmente feliz, no podía dejar de pensar en que me iba a casar con James y lo maravillosa que resultó ser la noche anterior.

-Buenos días Theresa. ¿Qué tenemos para hoy? -pregunté a la recepcionista mientras firmaba mi ficha.

- Pues ahora mismo acaban de pedir una ambulancia,  al parecer un chico se ha desmayado. ¿Lo quieres?

- Sí,  yo lo cojo.  Voy a por mis cosas si llega avísame.

Me dirigo hacia la sala donde los médicos descansamos y tenemos nuestras reuniones informales. Allí están mi amiga Lucy y el director del hospital Geoff.

- Buenos días -saludo acercándome a mi taquilla depositando en ella mis cosas y  cogiendo mi bata blanca con el estetoscopio. 

- Buenos días,  hoy estas feliz eehh -dijo Lucy mirándome con una sonrisa pícara.

-Habrá descansado bien, no te metas con ella Lucy. -dijo Geoff

Entre nosotros siempre había muy buen rollo. Unos tenían unos cargos más altos que otros pero en la amistad todos éramos iguales. Mi busca empezó a sonar, me llamaban de recepción,  seguro que era la ambulancia había llegado.

-Bueno chicos me voy, tengo que atender a un paciente.

-Espera voy contigo.  -dijo Geoff

- Un caso juntos eehh, ¿no confias en mi?jajaja- dije mientras corríamos a recepción

- Te ayudo porque el que viene en esa camilla es mi hijo, confío en ti al 100%

Salimos a recepción y efectivamente estaban entrando con una camilla y un chico sobre ella en la recepción de urgencias.

-Hombre, 25 años, coma etílico por ingerir drogas vía oral, marihuana y hachís entre otras y mezclarlas con alcohol -anunció el paramédico que venía empujando la camilla.

El chico era castaño claro,  su torso estaba al desnudo con parches pegados en él, tenía una mascarilla a través de la cual le daban oxígeno para que llegase al cerebro. Geoff y yo nos fuimos a uno de los quirófanos y lo tratamos.  Veía a Geoff perdido,  sin saber qué hacer, es normal, su hijo es el que estaba ahí, con el pulso bajo, con dificultad respiratoria y luchando por salir de aquello.

- Geoff, deberías salir, no estás en condiciones de ayudar. Tus relaciones afectivas con el paciente te impiden actuar correctamente.

- Jessica, no me pienso apartar de él, es mi hijo. 

- Escúchame Geoff, tu dijiste que confías en mi, ¡pues demuéstralo!  Sal por favor.

Geoff me hizo caso y salió no sin antes pedirme que no le dejará irse. Yo se lo prometí y mis promesas las cumplo.

Oí como el electrocardiógrafo demostraba que el paciente se había ido. No lo podía permitir, me dirigo rápidamente a él y le comienzo a hacer la maniobra de Heimlich, pero no reacciona,  sin parar de hacerla pido el desfibrilador. Comienzo a darle descargas eléctricas,  quizás el chico acabaría quemado pero yo he dicho que mis promesas las cumplo y no va a ser de otra forma. Una, dos, tres... hasta siete veces le di descargas hasta que a la octava su corazón comienza a latir otra vez.

- Dije que no te dejaría ir... cumplo mis promesas...-dije más para mi sola que en alto,  estaba completamente exhausta - llevadle a hacerle un lavado de estómago y luego lo subís a planta -ordené a las enfermeras.

Me quito los guantes y miro al chico, no podía ser mucho más mayor que yo, pero las drogas y el alcohol lo tienen envejecido. Lastima de muchacho, es guapo,  podía llegar a mucho más si dejase las porquerías como esa. En un acto reflejo miro a la puerta, en la ventana redonda de la puerta veo a un Geoff pálido, con los ojos rojos y reprimiendose las ganas de llorar. Salgo a hablar con él pero no necesita palabras, porque el sabe exactamente lo que ha pasado, pero necesita un abrazo y no lo dudo ni dos minutos.

- Se pondrá bien - Le dije acariciando su espalda.

-Espero que si, ese chico me va a oír... ¿sigue en coma?

- Sí,  lo siento no he podido sacarle de ahí. 

-Pero has cumplido tu promesa, no le dejaste ir. Gracias.

-Yo siempre cumplo mis promesas Geoff y lo sabes.

-¿Te puedo pedir un último favor?

-Claro, lo que quieras.

-¿Podrías llevar tu a mi hijo?

-Pero Geoff yo solo soy doctora de urgencias, no trato a los pacientes de planta.

-Lo sé pero... es que solo confío en ti para tratarle, tú ya sabes cómo esta y sabes lo importante que es para mí.

-Lo siento pero si ayudo a tu hijo...

-Liam

-Eso,  si ayudo a Liam, desatendería a los pacientes de urgencias y mi trabajo está aquí, no en planta. Lo siento.

- Es igual... gracias de todos modos. Se lo daré al doctor Coleman

-Es un gran médico, lo hará genial y aunque no lleve su caso estaré pendiente de él y si sé de algún cambio te aviso.

- Gracias Jessica, no tengo palabras para agradecérstelo,  no quiero involucrarme, es demasiado verlo ahí, es mi hijo y ningún padre quiere eso para sus hijos.

-Lo sé, tranquilo. Tengo que irme, luego hablamos.

Me fui a la cafetería, me tomé un café y le mandé un mensaje a Louis, sé que esta trabajando pero me gusta molestarle.

-Hola pequeño saltamontes, ¿qué tal el día?

No esperaba una respuesta instantánea pero al parecer Louis no tenía nada que hacer hoy.

*escribiendo*

-Pues entretenido, un compañero mío se ha desmayado y han tenido que llevárselo al hospital.

Porque será que tengo que la impresión de que ese compañero es... ayyy, ¿cómo se llamaba...? ¡Liam! Eso.

*escribiendo*

- ¿Cómo se llama tu compañero?

*escribiendo*

-Liam, Liam Payne, ¿lo conoces?

¿Soy lista o no soy lista?

*escribiendo*

Sí,  le he atendido yo.

*escribiendo*

-¿¡Qué?! ¿Cómo esta?

*escribiendo*

-Pues está en coma pero estable. Ha ingerido mucha cantidad de droga mezclada con alcohol.

*escribiendo*

-Wow, ¿en serio? No le he visto...

*escribiendo*

- Pues sí... oye ¿que te parece si me vienes a buscar esta noche y nos vamos a tomar algo con James?

*escribiendo*

-No quiero estar de sujetavelas

*escribiendo*

-Que no bobo que te puedes traer a El. Así os lo contamos a los dos a la vez.

*escribiendo*

-¿contar?  ¿El qué?

*escribiendo*

-Aaaaaahhhh,  sorpresa. A las 8:30 aquí. Byeeee

*escribiendo*

-Vaaaale, hecho. Adioooos nenita.