∂éנαмє ιя -Sebastián Yatra-.

cincuenta y ocho

No hay que preocuparse; Sino, ocuparse.

Millie y Micka conversaron un montón, decidieron seguir en contacto. La rubia de ojos azules le prometió que nada le faltara a Maeve, si bien Millie ya no tenía nada que ver allí, la pequeña niña era hermana de sus hijos.

Cuando Micka se marchó, la rubia quedó parada en medio de la sala mirando la nada misma

—¿Millie? —murmuró Drew cuando bajó de arriba

—Yo... Estoy bien —susurró y se sentó lentamente en el sofá

—Empaqué tus cosas, perdón si me tome el atrevimiento —comento Drew sentandose a su lado

—No recuerdo a Kevin —susurró Millie con un nudo en su garganta

—Linda, ven aquí —murmuró Drew y la abrazó aunque sea para tratar de unir sus partes rotas

—Me han mentido en la cara, se han burlado de mi —sollozó con enojo —¿Por que? Yo nunca he querido hacerle daño a nadie. Puede que me haya olvidado de todo pero se que yo jamás me atrevería a jugar con los sentimientos de alguién más

Luces de autos alumbraron la parte de la sala, pura casualidad que Kendall llegara junto con Marlene, Drew corrió hacia arriba a buscar el teléfono de Millie, sabía que algo se estaba olvidando y la rubia tomo su equipaje que Drew se había encargado de hacer por ella y de bajar hasta la sala pero lo guardo en el armario

—¡Amor! —grito Kendall entrando —Mira a quién invite a cenar hoy, Dan y Marlene

Millie salió de la sala con una sonrisa tan falsa y un nudo en la garganta, tenía sangre en sus ojos.

—Hola, que sorpresa —sonrió ella —No esperaba verlos por aquí

—Trajimos comida ya hecha —comento Marlene caminando hasta el comedor a poner la mesa

—Si, así no tienes que cocinar —sonrió Kendall y se acerco a Millie para darle un beso

—¿Millie que esta sucediendo? —gruño Drew desde el descanso de la escalera, Millie rápidamente corrió hacia él y lo tomo del brazo

—Pues hoy cenaremos con mi familia, es hora de que conozcan a mi nuevo amigo —grito falsamente fingiendo felicidad y Drew sonrió a medias falsamente

Dan quien se había quedado en la puerta de ingreso observo a Millie y a Drew, levemente les sonrió. Por fin todo acabaría.

—Millie me puedes explicar... —comento Kendall —¿Que hacía él arriba?

—Es mi amigo Drew, de la familia. ¿Lo recuerdas?. Él salía con mi hermana Maybi —comento —Es amigo mio cariño, lo invitaré a cenar. ¿O te molesta?

Kendall y Drew se miraban a que hechaban chispas pero Drew tenía una sonrisa maléfica hacía él

Marlene salió de la cocina chupandose los dedos

—Mmmmh, no saben lo que sabe ese pollo chicos, la mesa ya esta pu... —freno a la mitad de la sala al ver a Drew del brazo de su hermanita. Sus ojos se llenaron de ira —¿¡Que haces aquí!?

—Hola cariño —sonrió Drew

—Espero que hayas puesto un plato demás —sonrió Millie —Pues mi gran amigo se quedará a cenar con nosotros

—¡No Millie! —gruño Marlene frenandola antes de ingresar a la sala

—¿Acaso escuche que le negaste la entrada a mi casa a un amigo mío? —gruño la rubia, ya se estaba enfadando —A mi no me vuelves a mandar nunca más en tu perra vida. Yo hago lo que se me de la gana e invito a quién yo desee... Adivina porque... —se acerco a ella —Por que esta es mi propia casa

Dan sonrió levemente, la Millie que él quería de regreso estaba en proceso. Marlene se quedo con la sangre en el ojo pero Kendall la tranquilizo.

La noche transcurrió entre miradas de miedo, angustia y desesperación. Tenían una idea de que Millie ya sabía algo o que Drew le había comentado algo

—Hay un cantante que me esta volviendo loca —grito Millie. Que comience el juego —Con todo respeto amor, pero si que me enamora —Drew sonrió levemente, Kendall trago en seco y Marlene se acomod en su silla, era hora de jugar —Se llama Sebastián Yatra. ¿Ustedes lo conocen? —nadie respondió —Dije.... ¿Ustedes lo conocen? —volvió a repetir ya con un tono más ronco

—Pues de echo, Sebas es muy amigo mío —comento Drew sonriendo y Marlene lo estaba fulminando con la mirada —A puesto a que él querra conocerte también

—¡Oh si! Pues él es muy tierno en sus canciones —sonrió. No mentía —Pareciera que hablará de un amor perdido... O de una novia que no lo recuerde, o de una memoria perdida

—Millie... —habló Kendall

—¡Silencio! —grito ella y golpeo la mesa — Ustedes han hablado demasiado ya y las veces que lo han hecho solo me han mentido. Ahora se callaran y escucharan lo que yo tengo para decirles, pedazos de mierda —gruño

—¡Millie!

—Callate Marlene —comento Drew —Ya la oíste.

—Ambos me mintieron y no solo me dañaron a mi, sino que dañaron a un ser tan sesible como lo es Sebastián.

—Y a Ari —habló fuerte Dan y Millie lo miro

—¿Quién es Ari?

—¡Dan callate! —grito Marlene

—¡Déjalo hablar! —grito la rubia —¿Quién es Ari?

—Pues antes de que olvidaras todo, tú y él iban a adoptar una niña de ocho años —confeso Dan y alivió sus hombros como si se hubiera sacado un peso de encima

—¡Oh por Dios! —sollozó la rubia —¿Ven lo que ocacionaron? ¿Acaso no ven todo el daño que me han hecho? Yo tenía formada mi vida y vinieron a arruinarme todo —grito en pleno llanto

—Vamonos Millie

—¡No te la llevarás! —comento rápidamente Kendall

—¿Cuando pensabas decirme que dejaste a una mujer por mi? —gruño por lo bajo acercandose al ojí verde y él la tomo de las mejillas —¿Cuando pensabas decirme que habiamos tenido un hijo juntos aparte de Aidan?

—Millie, eres la madre de mis hijos...

—No te da derecho a abandonar a nadie ni mucho menos a mentirme de esa forma Kendall

—Yo no quería pero.. —él agachó su cabeza. No tenía caso, Millie jamás lo perdonaría —Perdón

Millie se alejó de él, abrazo a Dan y se dió media vuelta para mirar a Marlene quién solo la miraba, la rubia se acerco y con su puño cerrado, lo acento con todas sus fuerzas en el rostro de la mayor

—A tí no te quiero volver a ver jamás en mi vida —gruño secandose las lágrimas con mucho odio —Quedense con su vida de mentiras —miro a Dan —Ojala puedas encontrar una mujer que valga la pena, ojala

—Te quiero Millie —susurró él abrazandola —Ve con Sebastián, él te esperará siempre —murmuró en su oído y para luego él abrazar a Drew —Peleaste por ella, gracias

Marlene lloraba y Kendall solo sollozaba por lo bajo, Drew se volvió cuando Millie ya había salido de su casa

—¿Enserio pensaste que ella jamás descubriria la verdad? —pregunto Drew caminando hacia Marlene, la rubia seco sus lagrimas pero se notaba que quería llorar de verdad —¿A que precio Mar? ¿Al precio de perder a la mejor persona que hay en esta vida?

—No era la intenci....

—Pero lo hiciste —gruño él colocandose serio —Y terminaste perdiendo a tu hermana —sonrió —Esto no era una lucha para ver quién obtenia a Millie, esto era una lucha para salvar a Millie y tú Marlene, jamás tuviste una buena intención.

gracias por su paciencia!!!!!!! lxs quierx