CLC One Shots [SMUT]

Primer beso

El cine estaba abarrotado, tanto que ni siquiera existía una fila donde las personas pudieran pasar en orden para comprar su boleto, era un tumulto de personas en completo desorden ansiosas por ver el estreno más prometedor del mes.

Elkie y Sorn se encontraban en las puertas del cine, desesperadas porque no avanzaba la "fila".

—A este paso jamás vamos a ver la película— dijo Elkie— ¿Dónde están Seungyeon y Seunghee?

—No responden los malditos mensajes— bufó Sorn molesta mientras tecleaba rápidamente en su celular.

—Seguramente están en un hotel ahora mismo— Elkie bromeó.

—No lo dudo— secundó Sorn.

—No se puede confiar en ellas cuando se trata de dejarlas solas— dijo Elkie riendo.

—Ya las conocemos.

En ese momento el celular de Sorn sonó anunciando la llegada de un mensaje.

—Seungyeon me respondió— dijo Sorn.

—¿Que te dice?

—Dice que van a tardar por lo menos 40 minutos en llegar...

—¿Esta loca? La película empieza en 20 minutos

—Le dije que el cine este lleno, y a este paso ni si quiera vamos a alcanzar a verla.

—Maldita sea— Elkie renegó mientras su amiga continuaba moviendo rápidamente los dedos sobre la pantalla de su celular.

—Espera... Dice que la única opción disponible ahora es un autocine que está a 12 minutos de aquí.

—¿Un autocine?— Elkie se burló— ¿Esa cosa aún existe?

—Sí, y mientras más te tardes en mover el trasero más tarde vamos a llegar. Toma las llaves.

Sorn alargó la mano y para entregarle las llaves del auto a Elkie, a quien, al parecer, no le agradaba mucho la idea; la menor tomó las llaves sin más opción y ambas se marcharon del lugar para tomar el auto y conducir hasta el lugar.

Después de unos cuantos minutos de camino mientras escuchaban y cantaban canciones de Mamamoo llegaron al susodicho lugar, y se sorprendieron al ver que no estaba tan abarrotado como el primer cine que habían visitado, sino que era un lugar amplio y con suficientes lugares para hacer acogedora la estancia.

Buscaron un lugar apropiado para estacionar el auto después de haber pagado las entradas. Al fin estacionaron el auto en medio del estacionamiento donde precisamente se les ofrecía una vista perfecta hacia la pantalla.

—Iré a comprar nachos, ¿Quieres algo?— preguntó la mayor mientras abría la puerta del coche, aprovechando que aún faltaban unos minutos para que la película empezara.

—Unas palomitas y un refresco— respondió Elkie.

—Vuelvo en seguida.

La menor se acomodó en el asiento al momento de que la tailandesa cerró la puerta del coche, tomó su celular y escribió un mensaje para preguntar a Seungyeon si ya habían llegado, para su sorpresa, la respuesta fue afirmativa, sin embargo, aunque se asomó por la ventana del auto no lograba divisarlas por ningún lado.

Llegó la castaña con una bandeja con nachos, palomitas y dos refrescos.

—Llegas a tiempo— dijo Elkie, justamente en ese momento las luces del estacionamiento se apagaron y se encendió la pantalla para dar comienzo al tan esperado estreno, Sorn le dió a Elkie sus palomitas y su refrescos y ella se acomodó en su asiento para disfrutar de la película.