Cap 10.

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Narra Alice.

Después de que Drake se vaya me di un baño en aquella lujosa habitación para luego irme a la mía.

Me fascinó estar con él toda la noche aunque me sentí mal cuando hubo la pequeña discusión.

Andaba por los pasillos con algo de hambre y con 4 fresas en el estómago.

Llegue a la habitación y ahí estaban Marta e Isabella.

— buenos días — salude y le di un beso a Marta.

— ¡y tan buenos! — dijo Isabella con alegría.

La mire confundida.

Nos cambiamos de ropa y luego nos dedicamos a ordenar la habitación.

De repente entro Walter y comencé a temblar al pensar que Drake habrá dicho algo.

— chicas — saludo.

Isabella le dio un beso en la mejilla y tuvimos que darle uno nosotras.

— Marta y Alice, despediros de Isabella ya que se cambiará a una de las mejores habitaciones — dijo.

Ella chillo de la alegría.

— si os comportáis como ellas pues podréis salir de esta sucia y pobre habitación — dijo mirando la habitación.

Isabella comenzó a guardar sus cosas en una maleta.

— adiós chicas aburridas — se despidió ella.

Se fueron y nos miramos para luego sonreír.

— menos mal que se fue — dijo marta y solté una carcajada.

— si, por fin... — 

Nos sentamos en la cama juntas ya que estábamos cansadas de ordenar la habitación.

— ¿y que tal la noche?— preguntó ella.

Sonreí.

— estuve con el chico del que vino dos veces antes y estuve muy cómoda, no era la misma persona que el primer día...pero tuvimos una pequeña discusión por mi culpa y lo jodi todo...dormimos y ya — le conté

— ¿no hicisteis nada? — preguntó.

— bueno si, dos veces...y nunca dije esto después de un servicio, pero era genial —

Ella se ríe y luego me pongo muy roja.

— ya Marta — ordene — bueno ¿y tú? —

Paro de reír y me tomo las manos.

— nunca estuve con un chico tan atento y tan amable — dijo feliz.

La mire preocupada porque tenía miedo a que la engañen como a mi...porque Luis actuó a si cuando lo conocí.

— me decía que si no quería hacer nada que solo se lo haga saber, que si algo no le gustaba le podía decir, que no esté nerviosa... — hizo una pausa — es el chico de la otra vez por cierto —

— es el amigo del chico con el que yo estuve —

— vaya casualidad — ríe — ojalá venga más o que hayan más chicos como el —

— eso es imposible — negué — aunque puede que venga siempre — dije y reímos.

Estuvimos cambiando de tema charlando durante bastante tiempo hasta que nos cansamos y nos tumbamos mirando al techo.

— tengo bastante hambre — dijo ella.

— y yo, no sé cuando comeremos —

Ella bufó.

Viviendo En La OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora