Cap 11. + NOTA

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Narra Alice.

Pasan los días y como siempre sigo aquí aburrida, muerta...

Marta está igual y eso me pone más mal.

Los días de diario el pub suele estar cerrado, solo abre de jueves a sábado, y mis turnos son los viernes y sábado, muy pocas veces los jueves para no decir casi nunca.

Nos hemos estado alimentado más o menos bien con la ayuda de nuestro comportamiento...ya creo que nunca más me quejaré porque recibo el maltrato de Walter y el pasar hambre durante muchos días...creo que soportar a un viejo por 1 hora mínima sería mejor.

Era jueves por la tarde y estábamos entrenando en el gimnasio que había en el hotel...bueno creo que os hago un lío entre club, pub y hotel...os explico.

Esto es un gran hotel que cuenta con la parte baja de un club y pub a la vez y la parte de arriba se instalan las habitaciones. Es uno de los mejores hoteles del país ya que cuenta con todo eso que os dije más lo lujoso que es, grandes salas, gimnasios, spas...ect

Pero eso no hace que yo sea feliz ya que vivo aquí encerrada y solo salgo 1 vez al mes, que me obliguen a hacer esas cosas con hombres.

— me gustaría visitar la ciudad — dijo Marta corriendo por la cinta.

— por lo que vi, es muy bonita — respondí.

— ¿eres de aquí? —

Subí mis hombros.

— ya sabes que vine aquí desde muy chica, Walter nunca quiso decirme nada de mis orígenes — respondí.

— es triste —

Asentí.

Estaba cansada de hacer bicicleta y me paré a beber agua que era lo único que había.

Siempre antes de ir al gimnasio nos dan un pequeño menú sano para que no nos desmayemos aquí.

Fuimos a nuestra habitación y nos duchamos.

— estoy muy cansada — susurre tirándome en la cama.

Mi pelo húmedo mojaba la cama y realmente me daba igual.

Mis golpes desaparecieron por fin y ya usaba ropa más corta.

— ¿alguien vendrá a ocupar el sitio de Isabella? — preguntó Marta.

— no lo sé, pero ojalá que no — dije y reímos.

Miraba el techo y comencé a recordar que mañana es viernes...joder vaya asco...otra vez la misma mierda.

Solo espero que venga Drake y me salve de toda esta mierda al menos por una noche.

Era lo único que realmente me agradaba un poco.

Eran las 9 de la noche y mis párpados caían del sueño a si que decidí dormirme.

Narra Drake.

— ¡Josep deja de joder! — grité.

Mis gritos se oían por toda la casa.

Lo buscaba y no aparecía.

Esta hombre me tiene cansado.

Lo vi en el jardín tumbado en el césped natural.

El comenzó a reír.

— no me da gracia estupido, mañana es la jodida reunión de Lenin y a la misma vez tenemos que asistir a otra del trabajo — dije cabreado.

— te comprometiste con Lenin pero la del trabajo también es muy importante —

— ¿como sabes que es importante? — pregunté.

Viviendo En La OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora