Ha pasado un mes desde entonces, Drake viene cuando puede, ya no tengo tantos problemas con Walter, con Marta tengo una pequeña amistad...pero aún a si me siento como una mierda, un objeto usado.Solo de pensar todo lo que se puede hacer fuera de esta carcel me da envidia.
Drake me regalo muchos libros, cuadernos y lápices para entretenerme ya que no se nos tiene permitido ni salir ni tener cualquiera aparato tecnológico.
Ahora, recibo una llamada, cuando antes nadie llamaba por mi, ahora es Drake y suele llamarme cuando puede. Esta situación me satura porque no quiero que todo sea falso y una ilusión...pero lo veo tan verdadero.
Tumbada en mi cama después de llegar del comedor pienso en todo lo que estoy diciendo.
— ¡estoy súper contenta! — oí que grito Helena.
De repente entraron ellas dos a la habitación.
Helena se veía muy alegre y no entendía el porqué.
Entro al baño y aproveché para preguntarle a Marta.
— ¿que le pasa? —
— Walter dijo que seleccionará a unas cuantas chicas para llevarnos al centro comercial —
Puse mis ojos en blancos.
No entendía que emoción era esa, salir de cuatro paredes para estar en otras cuatro pareces con telas colgando de percheros.
Entiendo que esté emocionada, yo también lo estaría porque al menos sales de aquí para despejarte algo...pero hubiese preferido una playa, el campo...
[...]
Estábamos abajo en fila frente a Walter mientras él nos recorría.
— voy a elegir a ocho chicas para ir al centro comercial, esas chicas que yo vaya a elegir es porque lo tienen merecido —
Empezó a decir nombres y a escucharse gritos de emoción.
Las 5 primeras elegidas son las típicas sueltas del pub.
Y entre las restantes estaba yo.
— perfecto, las no elegidas ya se pueden retirar — dijo Walter.
Nos quedamos las ocho más Walter y comenzó a sonreír.
— tenéis que sentiros afortunadas —
Ellas sonrieron muy feliz.
— ¿tú no, Alice? — se dirigió a mi.
Yo solo lo miraba y al final subí los hombros.
— eres muy desagradecida — susurro en mi oído.
Agarro de mi brazo mientras lo apretaba.
— igualmente vendrás — dijo por último.
[...]
Ya en la habitación por La noche después de una relajante ducha comencé a recordar todo lo que Dijo Walter.
Pasáremos el día entero fuera de aquí, nos tenemos que levantar temprano, ponernos ropa cómoda de la que él nos dio...
Entro un guardia y me llevo a la zona de llamadas, sabía que era Drake.
Me senté en el taburete y puse el teléfono en mi oído.
— hola Drake —
— hola Preciosa —
Sonreí tímida a la vez que sentía algo en mi estomago.
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Viviendo En La Oscuridad
RomanceAlice es destaca en el club como si fuera una joya, pura e inocente. Vive en un mundo en el que no encaja. Con su cándida inocencia, todos los hombres quieren aprovecharse de ella, pero desde que llega Drake, el solo puede tocarla, el solo puede sen...