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Era divertido hablar con él, me gustaba, teníamos muchas cosas en común, muchas cosas que a los dos nos gustaban y por eso era sencillo hablar.

—Me gustó el lugar –dije en cuanto la señorita me entregó mi tarjeta después de pagar

—A mí también –abrió la puerta para dejarme salir primero

—Gracias –sonreí -¿Qué te parece si volvemos la prisma semana?

—C-Claro

Subimos a mi auto y después de convencerlo de que yo lo llevaba a casa, puse la dirección en el GPS.

Al llegar a su calle, me di cuenta de que las casas no eran grandes, pero tampoco pequeñas. Eran clásicas casas de película donde esperas que una madre hermosa y bien vestida salga arreglándole la corbata a su apuesto esposo, le dé un beso en los labios y él se vaya a trabajar prometiendo volver para cenar. Donde esperas que el hijo sea el número uno en todas sus clases y sea popular. Donde piensas que la vida de esas familias es completamente perfecta, sin peleas, sin problemas, sin nada malo, pero luego pasas esas puertas y te llevas una gran decepción al ver que las cosas no son como las imaginabas.

Estacioné enfrente de esa casa donde solo había un auto como el mío, pero de color blanco

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Estacioné enfrente de esa casa donde solo había un auto como el mío, pero de color blanco.

—Es mamá –susurró él

—Bueno, entra antes de que te cuelguen por llegar tarde

—Sí

Tomó su mochila y abrió la puerta, pero antes de poner un pie fuera, me miró.

—Fue... divertido, gracias por haberme invitado –sonrió un poco y por lo bajo como siempre

—Ya sabes que regresamos la próxima semana –sonreí

—...Gracias

—No hay de que, nos vemos mañana

Me dio una última sonrisa y bajó de mi auto. Esperé a que entrará a su casa para poderme ir a casa. A diferencia de la Lihana que salía a la calle, cuando entraba mi casa era como si la vestimenta alegre, fuerte y segura que mostraba ante todos la colgara afuera y en el marco de la puerta me pusiera la vestimenta de la Lihana débil y todo lo bueno del día se iba al caño y me derrumbaba.

Taehyung

En cuento cerré la puerta, mi madre apareció por la puerta de la cocina.

—Tardaste –dijo

—Lo sé –sonreí –no sabía que vendría a casa temprano hoy

—Cambie de turno con Gemma, me toca hasta mañana en la tarde

—Que bueno –dejé mi mochila en el sofá de la sala y le di un beso en la mejilla como saludo antes de ir por un vaso de jugo de naranja.

—¿Estudiando? –entró para seguir preparando lo que estaba haciendo

Nerd (KimTaeHyung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora