XXXVIII

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Por muchas canchas deambulan los hinchas. Caminan y caminan de estadio a estadio para seguir a su equipo y para ver un show que se vuelve aburrido con los años. 

Deambulan mientras arman la fiesta, porque la fiesta no la ven frente a sus ojos. 

Y piden y reclaman y suplican. Que sus jugadores ganen, que sus equipos triunfen, que el dinero de la entrada valga la pena, que la policía no pegue. Que sus alegrías vuelvan, que empiece e show, que el espectáculo sirva para olvidar las miserias de la semana. Que jueguen. 

En una tribuna verde, con recuerdos de los viejos tablones, una bandera también se suma al grito de las tribunas: 

Hagan un gol. 

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