Eres Mia

2. Capitulo 8

Me levante por el molesto de Tommy, ya que entro corriendo y gritando incoherencias, de mala gana levanto la parte superior de mi cuerpo y lo veo con los ojos entrecerrados acostumbrándome a la luz que hay en mi habitación blanca.

— ¿Que? — fue lo único que pude decir después de que se calmo un poco.

— Que me alegra verte de nuevo, te extrañe demasiado —se lanzo a mi y me dio un abrazo. — ¿Cómo te fue, cariño?

— En general bien, solo tuve un pequeño accidente cuando iba en camino a casa de Jane.

— Si me entere de ese accidente, pero dime ¿vendrá Jane?

— Si, vendrá con su mate y el hermano de su mate, que casualmente es mi ¿mate?

— ¿Que?

— Yo tampoco lo entiendo muy bien, pero Jue dijo que era nuestro mate, aunque yo no pude olerlo como con Darren.

— Es demasiado extraño. 

— Lo se, pero no hay que pensar tanto en eso, mejor concentrémonos en pasado mañana y en la nueva integrante de la familia — me levante de la cama y me olí para saber si me faltaba una ducha o no.

— Vamos de compras, nos llevamos a Lidya que aun no compra su vestido, y a los gemelos que tampoco saben que se van a poner.

 — Claro.

Entre al baño y me lave los dientes y la cara que solo eso era necesario, salí y me pude algo cómodo para salir, o sea unos jeans azules, una camisa gris y una sudadera negra. Para cuando baje ya estaban platicando Tommy y Katie.

— He llegado — me acerque a Ney que estaba cocinando algo y le di un beso en el cachete. — Hermanito, ¿me puedo llevar a tu chica? Solo sera un ratito, por favor — el negó con la cabeza.

— No lo se ustedes son mala influencia — reí por la forma en que nos llamo y ademas por la mentira que acababa de decir.

— Por favor, ¿que pudieran hacer un comprometido, una madre con sus dos hijos, dos chicas con mate y dos chicas solas y solteras?

— Aunque no lo creas pueden hacer muchas cosas que a mi no me gustaría que hicieran.

— Por favor, solo saldremos los del scuat, nadie mas vendrá, no invitare a nadie externo a nosotros, solo Tommy, Lidya, Sofia, Rayden, Katie y yo.

— Esta bien — termina por decir.

— Gracias, no te arrepentirás de nada, lo prometo — le sonreí y me voltee a ver a los chicos, que me miraban. —  Chicos, me dieron permiso para sacarlos a todos así que podemos salir a donde quieran, menos a lugares no adecuado para bebes y personas con compromisos, no me agradezcan. — Hago una pequeña y mal hecha reverencia.

— Yo no tengo nada que hacer hoy, así que los puedo acompañar — dijo Sofia.

— Yo también voy — dijo Rayden.

— Yo tambien — dijo en voz baja Katie.

— Que bien, por que no iba a aceptar un no por respuesta, así que levanten su trasero y subamos a mi auto — todos obedecieron y ya para cuando me di cuenta estábamos en camino a la casa de la manada.

El camino fui muy animado, tenia demasiada energía, tenia que disfrutar el momento después de todo no había pasado mucho tiempo con esas personas, y debía de hacerlos son las que estarían en todo momento en mi vida y en la vida de mis seres queridos. Justo cuando llegamos sentí una pequeña presión en el pecho, muy ligera, pero la sentí. Bajamos Tommy y yo, entramos y vimos a Lidya toda atareada dándole biberón a las dos pequeñas criaturas.