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¡Hola! No es casualidad que estés leyendo ésto. Quiero primero bendecirte e invitarte a que tomes una buena posición y dispongas tu corazón para que Dios sea quien te hable a través de éstas palabras. Hoy te hablaré sobre el suicidio. Para empezar quiero decirte una sola cosa, y dejártelo bien en claro: Yo no te juzgo si alguna vez ha pasado por tu mente el terminar con tu vida. No sé qué es lo que has pasado, o lo qué pasas en la actualidad, de lo único que te puedo dar seguridad es que eso que estuviste por hacer, o has estado planeando NO es la salida a tus problemas. Ésta es una mentira que el enemigo ha puesto en tu cabeza, pero amigo (a), por favor, ponme un poco más de atención; ¡Jesús es la salida a TODOS tus problemas! No sé cuántas veces lo has intentando, pero te reitero, NO es lo adecuado. ¿Te has puesto a pensar cuántas luchas has ganado ya? ¿Cuántos sueños, metas y anhelos hay en tu corazón? ¡Yo sé que los tienes! Y precisamente en eso es en lo que te tienes que fijar. El enemigo anda como ladrón buscando las almas y mentes vacías sin ocupación alguna, para llenarlos de mentira, haciéndoles creer que todo se solucionará. Pero te digo una cosa, ésto automáticamente te conduce a la condenación. No lo digo yo, lo dice la palabra de Dios. Por eso mismo te insto a que sigas luchando, busca personas que puedan ayudarte, busca a Dios, él está ahí. Yo no quiero que ocurras a esa acción, y sé que muchos de tus seres queridos tampoco. No lo pienses, sacude esa cabeza y ponte en marcha. Vamos, deja esa cuerda para utilizarla para algo productivo, en lugar de pararte en esa silla, toma asiento ahí y mira a tu alrededor. Quizás el panorama no sea el mejor, pero te aseguro que lo mejor está por venir. Mejor usa esa cuerda para hacer una hamaca y disfruta del viento pegando en tu rostro mientras juegas allí. Esa silla utilizala para sentarte y leer la biblia. Vamos, sé que puedes hacerlo, puedes seguir un poco más. Dios está ahí contigo, él es un Dios de amor, un Dios de perdón, un Dios de milagros; maravillas y prodigios. Dale una oportunidad para que entre a morar en ti y verás que todo se acomoda en su lugar. Piensa en las personas que te quieren... escucha esto: "Los amigos van y vienen pero una madre, un padre o algún miembro de tu familia, NO podrán recuperarte con el pasar del tiempo" No dejes de luchar. Respira profundo, sé que puedes. Repite conmigo esta oración: "Señor, hoy me presento delante de ti, pidiendote perdón por lo que he estado planteando, o simplemente por el hecho de que ese pensamiento suicida se ha querido aprovechar de mí. Ven, dejo que entres en ésta habitación; en mí. Sé que estoy necesitado de ti y que hiciste un sacrificio porque me armaste muchísimo más antes de que fuera creado en el vientre de mi madre. Toma el control de mi mente, mis pensamientos, mis acciones, mi corazón.  Te entrego todos los problemas y adversidades que hacen que quiera realizar dicho acto. No quiero tirar la toalla. Quiero seguir avanzado. Quiero obtener la salvación y gozar de una eternidad contigo. Ven, Señor. Entra a mí morada y cambia todo, enciende la luz, quita las telas, quita esos vendajes que no me dejan ver la realidad de las cosas, no me dejan verte a ti. Limpia mis oídos para poder escuchar tu voz. Señor no le des más cabida al enemigo para que venga a atormentarme. Me cubro con tu sangre preciosa, usame, quebrantame, llename. Quiero ser una vasija en tus manos. Te agradezco por todo lo que has hecho por mí." Agradezco al Señor si tú has leído hasta aquí. Espero que todos tus problemas se solucionen, si necesitas a alguien con quién hablar envía un mensaje a la página y sino quieres ahí, puedes buscarme a mí, pero NO te dejes destruir. Sé que Dios tiene planes grandes contigo. Dios te bendiga.

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RED DORADA ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora