¿Mi ayuda viene de la montaña?
No.
¿Mi ayuda viene Dios?
Sí.
Del creador de los cielos y la tierra.
Cuando la confusión es mi compañera
Y la desesperación me lleva a pedir rescate no sentiré miedo, porque sé que estás cerca. Cuando estoy atrapado en el valle con el caos de compañía, encontraré mi comodidad aquí, porque sé que estás aquí, conmigo.
Mi ayuda viene de ti.
Estás justo aquí, atrayéndome. Llevas mi debilidad, mi enfermedad, mi quebrantamiento todo en tus hombros.
Tus hombros son ese hermoso espacatorio a todo lo de mí alrededor. Eres mi descanso, eres mi rescate.
No tengo que ver para creer eso.
Me estás levantando sobre tus hombros, siempre me llevas ahí. Arreglas lo que una vez se hizo añicos, vuelves mis lágrimas en risa. Tu perdón es mi fortaleza y tu misericordia es implacable.
Mi ayuda es tuya, creador del cielo y de la tierra.
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RED DORADA ©
SpiritüelAquí encontrarás: predicas, motivaciones, consejos, enseñanzas, devocionales y más. Pero principalmente reflexiones. Espero que Dios pueda hablarte a través de este libro. Mi propósito es ganar almas para Cristo y ser de ayuda para aquellos que ya...
