—Quiero a un jodido doctor ahora mismo —vociferó Yoongi desde la puerta de su habitación.
—¿Quiere que llame al mismo que vino la otra vez? —pregunto Taehyung, intentando ver disimuladamente del otro lado de la puerta.
—No, tu llama a Namjoon y dile que lo necesito ahora mismo aquí —observa ahora a su asistente personal—. Tu llama a ese doctor.
Los dos empleados se retiraron dejando frente a él solamente a Jungkook.
—¿Y tú qué?
—Quiero verlo —respondió sin importancia.
—Tu ve a ver si los hombres de Namjoon ya despertaron e intenta averiguar qué mierda pasó —sin decir nada más, cerró la puerta y observó al pequeño ser que estaba al medio de su cama.
Jimin usaba una de las camisas de Yoongi mientras, maravillado tocaba sus suaves piernas con piel tierna y brillante.
No importa cuántas veces se tocara, aún no podía creer que su hermosa cola había desaparecido para dejar en su lugar, esas piernas.
—No me duele, Yoongi —Jimin dijo sin despegar sus ojos de su mitad inferior.
—¿Sabes cómo pudo haber...? —cuestionó acercándose, la voz suave, tranquila y dulce de Jimin lo llamaba.
—No... Nunca me había pasado, aunque nunca había estado tanto tiempo fuera del agua —murmura pensativo—. Mira toca, es suave.
Mostró tomando la mano de Yoongi una vez que este se sentó a su lado, la comenzó a deslizar de arriba hacia abajo, mostrándole la suavidad de la piel de sus piernas.
—No te ves muy intranquilo para alguien que perdió su cola —murmura siguiendo con el movimiento, realmente era suave.
—Porque... Siento como que no la perdí, ni yo mismo me entiendo —refunfuño—. Pero estoy seguro de que aún está conmigo, además, estar así significa que ahora puedo pasar más tiempo contigo.
—Tú... ¿Cómo no me tienes miedo? —pregunto sin alzar su cabeza—. Viste la sangre en mi ropa y la viste en el agua, no entiendo cómo puedes estar tan tranquilo conmigo cerca.
Y realmente se preguntaba eso, incluso su primo había tomado una pequeña distancia luego de haber visto cómo mataba a ese hombre lobo, dejándolo una imagen bastante sangrienta y macabra a decir verdad... Como su pasado.
Era de sentido común para todos alejarse de él.
—¿Por qué te tendría miedo? —pregunto realmente confundido.
—... Tú no entiendes nada. —graznó tensando su mandíbula, intentando alejarse.
Frunciendo sus labios, Jimin atrapó el rostro del vampiro con sus dos pequeñas manos, obligándolo a observarle.
—No me importa quién eres o qué hiciste antes. Me importa que siempre que he necesitado a alguien, hayas sido tú el que ha ido por mí, sin importar el por qué.
—Soy malo —insistió—. Realmente no me conoces, no conoces mi pasado, solo tienes un ideal perfecto de mí que no existe.
—Para mí no eres malo —se encoge de hombros—, para mí eres mi héroe y no hay nada que cambie mi opinión, no me importa tu pasado, me importa el ahora.
Yoongi suspiro rendido, comprendiendo de que no podría convencer al pequeño tritón de lo contrario. Era una cosita terca.
—¿Y cómo sabías que iba a ir por ti? —cuestionó alzando una ceja.
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Algo más...
FanfictionUna subasta. Lo compró perdido en su belleza, pensando lo bien que quedaría junto a sus otros objetos pero... ¿Por qué se siente diferente? Yoonmin.