—¿Qué intentas hacer? —chilló Taehyung preocupado cuando salió del baño y observó a Jungkook jadear de dolor, intentando correrse de la luz solar que se filtraba por la ventana abierta.
—Pe-pensé que ya estaba mejor —siseo de dolor, hablando entre dientes—. Pero veo que no... Tal vez p-para mañana esté mejor.
El castaño se apresuró a correr las cortinas antes de ayudar a Jungkook a alejarse y volver a la cama, aún debía de estar débil como para que el sol le afectara.
—Bueno, pues obviamente no lo estás, casi tuviste que quemarte con el sol antes de entenderlo —riño sentándose a su lado con expresión preocupada.
Con dolor y todo, el vampiro de cabello gris sonrió ladino, contemplandolo por sus entrecerrados ojos.
—Con un enfermero tan sexy quién quiere mejorar —bromeó logrando que las mejillas de Taehyung adquirieran un adorable rubor mientras negaba con su cabeza como si el vampiro fuera un caso perdido.
—Descansa —su pareja le observó por última vez con aquella sonrisita petulante antes de obedecer y cerrar sus ojos.
Volviendo a tomar el anhelado descanso que tanto necesitaba su cuerpo para sanar por completo.
Taehyung suspiró y se inclinó para besar los labios de Jungkook, repartiendo tiernas caricias en su rostro hasta que finalmente el vampiro se quedó dormido.
Luego de contemplarlo unos minutos más, se levantó con cuidado y salió de la habitación cerrando con prudencia la puerta, sabiendo que su pareja vampiro necesitaba dormir para recuperarse totalmente.
Bajando al segundo piso, pasó por la habitación que Jin compartía con su tío, observó curioso el interior al estar la puerta abierta pero encontrando con que no había nadie en el interior.
Sabiendo probablemente dónde estaría cada uno, siguió caminando hasta la habitación que había sido concedida a Hoseok, encontrando a Jin en el interior.
—¿Aún nada? —preguntó observando al postrado pelirrojo con sus ojos cerrados.
—No —niega con su cabeza, corriendo las cortinas para que luz natural invadiera el interior—. Estoy preocupado, ya son tres días.
—Y Jimin está igual, es preocupante ver al señor Yoongi encerrarse en su habitación con él para cuidarlo.
—Perdió mucha sangre —comentó con preocupación Jin, abriendo ahora la ventana.
Abajo percibio a su pareja jugar con algunos cachorros, sonrió un poco ante la vista y observó su abdomen, deseando pronto tener los suyos propios.
—Deberías de ir e intentar que Yoongi salga para que coma algo, sé que no es sangre pero los otros alimentos le pueden ayudar... Supongo —realmente no conocía mucho sobre los vampiros, o cualquier otro ser.
—No lo creo, pero tal vez le ayudará el salir de la habitación un poco —coincidió acariciando la mano de Hoseok antes de retirarse y volver a subir.
Una vez frente a la habitación, tocó suavemente y entró. Yoongi estaba sentado al lado del tritón, dándole la espalda mientras sostenía con fuerza la mano de su amigo.
Las puertas que dirigían al balcón estaban abiertas permitiendo que la luz se filtrara en el interior al igual que una fresca brisa.
—¿Señor? —Yoongi alzó la cabeza, pero no volteo a verlo—. Por qué no toma una ducha y baja por algo de comer, sé que eso no le podrá ayudar mucho pero tampoco creo que a Jimin le guste que esté encerrado aquí sin cuidarse —expresó.
ESTÁS LEYENDO
Algo más...
FanfictionUna subasta. Lo compró perdido en su belleza, pensando lo bien que quedaría junto a sus otros objetos pero... ¿Por qué se siente diferente? Yoonmin.