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Capítulo 23

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Yoongi dejó de fingir que revisaba unos documentos cuando en verdad pensaba sobre el muy desnudo cuerpo de cierto tritón que había dejado antes de bajar a ocuparse de otros asuntos.

La sonrisa en su rostro no hacía más que crecer al recordar lo insaciable que resultó ser Jimin respecto al sexo, aunque al parecer su límite solo era tres orgasmos por noche, tendría que ayudar a su amante a controlar aquello para hacer el acto más duradero y por lo tanto, más excitante.

Tal vez un anillo para el pene podría ayudar y sabía que el pequeño tritón estaba abierto a aprender más.

Un golpeteo en la puerta interrumpió sus divagaciones, alcanzó a controlar su sonrisa justo en el momento en el que Taehyung se asomo en el interior de su despacho.

—¿Señor?

—Qué sucede —preguntó dejando sobre el escritorio los documentos no leídos.

—Yo... Uhm... Me preguntaba dónde estaba mi tío —dijo algo avergonzado.

—Sabes que ese chico resultó ser su pareja ¿cierto? —cuestionó arqueando una ceja.

—Sí —afirmó también asintiendo con su cabeza, pero aún se veía extrañado por estar teniendo esta conversación.

—Tal parece que las heridas de Jin no eran tan graves por lo que Namjoon lo debe de estar marcando, me pidió unos días al respecto para tener sexo desenfrenado, tipo cuando entra en celo.

Si Taehyung hubiese estado bebiendo algo, lo más seguro era que lo escupiría ante la brutal información proporcionada por el vampiro. Aquello absolutamente no era necesario, le bastaba con un está ocupado con Jin y él entendería a que se refería.

—Demasiada información —pronunció arrugando su nariz, por culpa de su jefe se imaginó brevemente a su alfa teniendo sexo.

Sacudió su cuerpo en un pequeño estremecimiento traumático, rápidamente quitó aquella imagen de su cabeza.

Yoongi no alcanzó a retener la pequeña risa ante lo traumado que se veía el menor luego de sus palabras.

—Bien... Yo... Ugh necesito quitarme esta horrorosa imagen —exclamó angustiado antes de retirarse apresuradamente, llegando a incluso estrellarse contra la otra persona que entraba.

—Hey, ¿estás bien? —pregunto Jungkook afirmándolo por la cintura con ambas manos.

—¡No! ¡El señor Yoongi me traumó! —exclamó horrorizado antes de salir.

El peligris observó extrañado al vampiro contrario.

—Le dije dónde estaba Namjoon —contestó la silenciosa pregunta.

—¿Y dónde está?

—Teniendo sexo con la persona que salvó, Jin —sonrió malvado.

—Okey, ya entiendo por dónde va eso —rió antes de sentarse frente a Min.

—¿Necesitas algo? —arqueó una ceja mientras observaba al menor.

—A decir verdad, sí. Ya sé por qué mantenían a Taehyung aquí en la mansión y el porqué querías que me mantuviera lejos de él... No de hecho aún no entiendo esa parte —frunció el ceño.

—¿Cómo te enteraste? —pregunto Yoongi recargándose en el respaldo de la silla.

Jungkook se sorprendió al verlo tan calmado al respecto.

—Taehyung escuchó sin querer una conversación que tenía ese alfa con su pareja acerca de su pasado y luego me lo contó —se encoge de hombros.