"LA SEÑAL - SEGUNDA TEMPORADA"

Capítulo 16: La conciencia prevalece: Confesiones

Ya había pasado un mes desde la supuesta muerte de la pelinegra, un mes de búsqueda, un mes de inmenso dolor para Gokú y el padre de Milk.

Durante ese mes Kanato y Michino habían tratado de ubicar a Cirys, pero parecía que la hechicera ya no estaba en el pueblo, ya que ella según los datos que ellos habían recolectado había vendido el departamento donde vivía y algunas personas que la conocían del edificio habían comentado haberla visto salir con maletas, ello no hizo más que confirmar la hipótesis que los guardaespaldas, el padre de Milk y los padres de Gokú tenían, "La malvada hechicera había estado tras la supuesta muerte de Milk", los guardaespaldas junto a un investigador se encontraban siguiéndole los pasos a la hechicera sin imaginar que ella estaba más cerca de ellos.

Cirys haciéndose pasar por Lía, había acudido a cada citación que le había hecho llegar a una dirección de departamento que ella había dado la primera vez que se acerco de manera voluntaria a rendir su testimonio en la delegación policial, ella se mantenía firme en su testimonio de que Milk había caído al vacío por tomarle fotos a unas flores, lo peor de todo era que su testimonio era tan firme que no daba dudas de lo que ella argumentaba, así mismo ella acudía cada dos días a casa del padre de la pelinegra para según ella saber algo sobre la búsqueda del cuerpo de su amiga, allí ella conoció a Bulma y Dieciocho, amigas de Milk y empezó una supuesta amistad con ellas, todo ello era seguido por Túrles, quien cada vez que la veía llegar a casa del padre de la pelinegra sentía un ligero temor dentro de él pues no sabía que era lo que la malvada jovencita venía planificando en su mente enferma, además Túrles seguía comunicándose con Vegueta, el moreno en un intento de liberar su conciencia le confeso a Vegueta todo lo que él sabía de la hechicera, Vegueta quedo sorprendido y a la vez sintió malestar de haber apoyado a una mujer tan perversa como lo era Cirys, pero lo peor de todo era que sentía impotencia pues sabía que no podría ponerse en contra de una bruja o su vida también correría peligro.

Gokú seguía buscando el cuerpo de su amada junto al equipo de búsqueda, aunque cada día el dolor que sentía se hacía más grande al no encontrar a su amada, él seguía en pie, tratando de mantener la esperanza de encontrarla aunque esta cada vez disminuía más y más.

Valle Encantado:

En una cueva, ubicada bajo una cascada, se encontraba el cuerpo de una bella jovencita pelinegra que parecía inerte, mientras a su alrededor una mariposa sobrevolaba.

Creo que ya está por llegar el momento mi niña, pronto todo acabara y volverá la paz y felicidad a tú vida, perdóname nuevamente por haberte separado de tú amor, pero si no lo hacía esa bruja malvada hubiera acabado con tú vida, decía la mariposa mientras roseaba un polvillo brillante sobre la jovencita.

Duerme, duerme tranquila mi niña, que todo ya va a terminar, mientras tanto aquí estarás protegida, decía la mariposa posándose sobre la frente de la pelinegra.

Montaña:

Ya estamos en la base de la montaña, tras un mes de búsqueda, este es el único sector que nos falta inspeccionar, decía el jefe del grupo de rescate.

¿Y si no está aquí?, pregunto Gokú con temor.

Entonces cayó al río y de ser así, pues su búsqueda será imposible, hay veces en que los cuerpos que caen al río nunca se encuentran, dijo el jefe del grupo haciendo una pausa para decir: Desde que iniciamos la búsqueda se ha estado rastreando la rivera del río en todos los pueblos por los que este pasa y hasta ahora no hemos tenido ningún reporte, eso significa que si no esta aquí y con todo este tiempo trascurrido tal vez algún animal....

No, no lo diga, respondió con dolor en su voz Gokú.

Bueno, esta semana es la última que estaremos aquí joven, si no hallamos el cuerpo de la señorita Ox, es porque ella ya no está en este mundo, dijo el hombre con cierta nostalgia.