"LA SEÑAL - SEGUNDA TEMPORADA"

Capítulo 19: "Un duro combate: Cayendo en tu propia trampa"

Un apuesto jovencito de cabello alborotado miraba asombrado a una peli roja que reía como loca mientras un aurea de color plomizo la rodeaba.

Ja ja ja, no lo esperabas, ¿verdad?, y lo mejor de todo es que tú ni imaginas la dimensión de mi magia, he estado preparándome mucho en el mundo de la hechicería negra, y al fin veo el fruto de esa preparación, no soy una simple hechicera, tengo poder, poder infinito y con este poder te ganare y a ti, mi amado y hermoso Gokú no te quedara más que aceptar tu derrota y cumplir el trato, trato que tú solito propusiste hermoso, decía Cirys mientras reía haciendo una pausa para decir: Que bueno, ya soy nuevamente yo.

Acepto, me sorprende tú poder, pero ello no quiere decir que yo no tenga el mío, así como tú has entrenado para perfeccionarte en tus falencias y en el mundo de la hechicería negra, así como tú has aprendido a mantener tú mente en blanco para que yo no pueda leerla, yo, yo también he estado perfeccionando mis técnicas y mis poderes ocultos, y me alegra, si me alegra saber que este combate de magia y poder será como lo espere, increíble, respondió Gokú con una amplia sonrisa en su rostro.

Ríe, ríe mientras puedas, dijo con rabia Cirys mientras formaba con sus manos una especie de humo al tiempo que en un lenguaje extraño pronunciaba unas palabras.

No se valen los hechizos de maldad, dijo Gokú que había logrado entender lo que la peli roja decía.

Como buena hechicera, yo no sé cumplir pactos, pero tú que vas a saber de eso, dijo con rabia Cirys mientras lanzaba su hechizo contra el apuesto joven de cabello alborotado que de un rápido movimiento lo esquivo, haciendo que el mismo caiga sobre un pequeño insecto, convirtiéndolo inmediatamente en piedra.

Se me había olvidado que tú no tienes palabra, respondió Gokú con firmeza, mirando hacia el lugar donde la hechicera había lanzado su hechizo, al tiempo que la mariposa se elevaba más en el aire.

Estuvo cerca, sin duda esa chica, es una malvada, dijo la mariposa mientras movía sus hermosas alas coloridas en el aire.

Claro que la tengo cariño, pero tampoco soy estúpida, sé que tú en algún momento vas hacer lo mismo que yo, pues una batalla sin magia sería aburrida, respondió Cirys.

Bien, si quieres que usemos la magia, bien, eso sí, que no haya resentimiento, pues no abra vuelta atrás, dijo Gokú con firmeza.

Me parece bien, respondió con una sonrisa irónica Cirys.

Entonces, la magia negra contra la magia blanca, dijo Gokú.

Si, respondió Cirys.

Entonces empecemos, dijo Gokú formando con sus manos una especie de energía blanca al tiempo que pronunciaba una y otra vez unas palabras, mientras Cirys hacía lo mismo, solo que la energía que emanaba de sus manos era oscura.

En tanto:

En una pequeña cueva bajo una cascada, una bella pelinegra dormía profundamente mientras su rostro mostraba temor debido al sueño que la jovencita estaba teniendo.

-. Sueño. -

Una pelinegra tomaba una foto a una flor cuando escucho algo que la dejo paralizada.

Basta de juegos, ya me cansé de estar jugando contigo a la amiguita, niña estúpida, ¿no comprendo como Gokú prefiere a una chiquilla como tú antes que a mí?, escucho la pelinegra dejando de tomar la foto para girar a ver a la dueña de la voz.

¿Por qué dices eso Lía?, pregunto con cierto temor la pelinegra.

Lía, ja ja ja, echó a reír una joven de lentes.