Claudio
Un hijo¡¡¡ un hijo¡¡ es lo más maravilloso que me puedo haber pasado, estoy tan feliz Emilia, Martina y yo los tres juntos más el bebé que viene en el camino haremos una gran familia feliz.
Observo a Emilia dormir mientras me pregunto cómo sera el bebé, a quién se parecerá, tendrá mis ojos, tendrá su sonrisa o quizas tenga su cabello, a mí me gustaría que fuera un varoncito ya tengo una princesa. Entonces sería bueno tener la parejita.
Estoy pensando decirle a Emilia que será mejor que dejé de trabajar mientras dure su embarazo no quiero que se arriesge o que se agote o que se fatige por trabajar mientras esté embarazada y tampoco quiero que ponga en riesgo nuestro bebé.
Pero la conozco se va a negar ella no está acostumbrada a estar en casa todo el día recostada y descansando está, acostumbrada a sus actividades diarias a trabajar, a ver los negocios que tenemos con Ulises pero de una u otra manera la tengo que convencer.
Estamos listos para irnos a trabajar, de un momento a otro ella luce más radiante que nunca quizás el embarazo la hace ver más bella de lo que ya es.
Emi amor -le dije- porque no te cambias los zapatos y te pones unos más cómodos, los tacones están demasiado altos no vaya a ser que te caigas y te pase algo.
Claudio deja de preocuparte por favor, siempre he usado tacones altos -me dijo ella algo fastidiada- estoy bien no me va a pasar nada y no voy a poner en riesgo nuestro bebé, tranquilo.
Pero Podrías hacerme caso por favor-le exigi- ponte unos zapatos más descansados tus tacones me preocupan, no quiero que te caigas o algo te pase, hazme caso por favor.
Está bien, está bien - me dijo al fin haciendo caso a mis palabras- ire a ponerme unos zapatos más descansados, dame cinco minutos y nos vamos.
Emilia dice que soy un exagerado. Bueno me he pasado metido en su oficina todo el día atendiendola, viendo que no se pare, que se quede sentada pero no me hace caso, camina de un lado a otro , no puede estar tranquila, sentada descansando. No quiero que tanto trajín le haga daño a nuestro bebé.
Claudio por favor ya para- me dijo gritándome- Estoy embarazada no estoy enferma no quiere decir que me voy a pasar las 24 horas del día recostada o sentada tienes que calmarte por favor me estás asfixiando.
Pero bueno Yo sólo quiero lo mejor para ti - le dije tratando de sonar lo más tierno posible- Entiéndeme por favor no quiero que te pase nada ni a ti y a nuestro bebé.
Ya ya está bien Caminaré más despacio estaré más tiempo sentada pero por favor ve a tu oficina y avanza tu trabajo- me dijo - No tienes que estar pegado a mí todo el día también tienes cosas que hacer, por favor.
Quizás para Emilia es más fácil todo esto ella ya fue mamá una vez. Pero en realidad yo estoy viviendo esto por primera vez y quiero estar pendiente de ella todo el tiempo, por si necesita algo o se le antoja algo, voy a tratar de controlarme para no aburrirla pero no me puede pedir que no esté pendiente de ella todo el tiempo simplemente no puedo hacerlo, si normalmente quiero estar a su lado siempre ahora más que nunca quiero estar para ella todo el tiempo.
Me estoy imaginando la cara de nuestra Martina cuando sepa que va a tener un hermanito , aunque me preocupa que quizas Martina se ponga celosa, ella es muy pegada a mi, quizas no le guste compartir mi cariño pero debe estar tranquila yo la amo y también amo a mi hijo. Los amo a los dos por igual Nunca habrá diferencias entre ellos.
He pasado el día soñando, imaginando cómo será el día que mi hijo llegue, tengo tantos planes quiero enseñarle tantas cosas pero sin dejar de lado nunca Martina,yo voy a compartir mi tiempo entre los dos para que sientan de que puedo ser un buen padre para ambos.
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Hagamos de este amor algo nuestro (Terminada)
FanficEl amor puede estar tan cerca y tan lejos al tiempo