Cuando me gradué del colegio y obtuve un trabajo estable jamás pensé que volverá a un tipo de situación como las que viví en mis años rebeldes. Veanme aquí escapando con mí peor enemigo de un grupo de tipos que nos quieren ver muertos por órdenes de alguien que nos tiene en la mira y no se atreve a dar la cara. Ciudad Fucsia se encontraba ya cerca y podía ver la ciudad en el horizonte. ¿Qué iba a hacer cuando llegara ahí? Pues improvisar como siempre lo he hecho, no tengo de otra más que acelerar y buscar alguna forma de escondernos.
No puedo creer lo que estoy viviendo, mi peor enemigo me está salvando la vida. ¡Jamás me he sentido tan humillado! ¿Por qué lo hace? Desde el principio lo he tratado a él y a sus amigos como basura. El dolor en mis brazos es intenso y no puedo evitar gemir por el dolor. El viento sopla violentamente mientras este tipo acelera endemoniadamente. ¿Acaso cree que podremos escapar de ese maldito sujeto? Ese tipo ha controlado todo desde hace años y ahora quiere deshacerse de mí.
La persecución era intensa en ese momento, la gran longitud del puente entre Ciudad Azulona y Ciudad Fucsia había sido testigo de una carrera de vida o muerte. Al llegar a la entrada de la ciudad, Ash observo su primera esperanza de salvación la cual era el parque más grande de Kanto. Al estar al aire libre les sería difícil a todos esos tipos poder alcanzarlos. Sin tiempo que perder, acelero directo hacia la entrada del parque pero antes se le ocurrió una idea.
-¡Khristophe! ¡Dime por favor que fumas!- Para qué diablos este sujeto quiere saber si fumo en un momento tan crítico como el que vivimos.
-Eso que te importa.- Perfecto, el señorito simpatía me brindaba su lado más dulce.
-¡Solo contesta!-
-¡Claro que fumo! ¿Para qué rayos deseas saberlo?-
-¡Porque así podremos ganar tiempo!- Tenia que aplicar un viejo truco que use hace mucho que hasta al mismo Paul sorprendió. Insisto, nunca pensé volver a experimentar este tipo de situaciones.
En ese momento, Ash detuvo el auto derrapándolo y haciéndolo chocar contra un poste cosa que aturdió a ambos en especial a Khristophe.
-¿Estas demente? ¡Esos tipos ya nos van a alcanzar!-
-¡Por eso no hay tiempo! ¿Dónde está tu encendedor?
-Bolsillo derecho....- Rápidamente tome el encendedor y cogí un pañuelo que tenia. Patee la puerta con toda mi fuerza y salí deprisa hacia la parte trasera del auto donde el conducto para la gasolina estaba.
-¡Khristophe! ¡Dime cuando ellos estén cerca!- No sé que planeaba ese tipo pero desafortunadamente tenía que seguir su plan ya que mi vida dependía también de ello. De repente vi como todos esos autos que nos seguían empezaban a venir hacia nosotros desde el final de la calle.
-¡Ahí vienen!-
-¡Sal del auto ahora! ¡Trata de que no te vean salir!- Por suerte hoy Khristophe andaba muy cooperativo y salió como era debido.
-¿Ahora qué hacemos?-
-¡CORRE COMO NUNCA LO HAS HECHO!- ¿Eh? ¿Por qué? En ese momento vi como ese sujeto coloco el pañuelo en el orificio del depósito de gasolina. ¡En llamas!
Ambos jóvenes corrieron lo más aprisa que pudieron cosa que tomo la atención de los coches que los perseguían. La ventaja era clara y ellos se acercaron casi de golpe. Lo que no esperaron es que el auto donde ellos iban exploto de gran manera que alcanzo a uno de los rufianes mientras que a otros los ensordeció y distrajo haciendo que chocaran entre sí o con alguno que otro obstáculo en la calle desolada. Ash y Khristophe pudieron tirarse al suelo a tiempo para evitar ser alcanzados por la onda de choque.
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Deseos Congelados en el Tiempo.
Romance"Serena es una joven que vive el día a día sin colores, sin emoción ni deseos. Sonrisas falsas por aquí y por allá era su diario vivir. Complacer a los demás antes que a ella sin sentir satisfacción. Lo que ella no sabe es que la vida puede cambiar...