Un Príncipe De Regalo

Capítulo 20

Me detuve en un árbol y me recargue en el, mi espalda se deslizaba mientras me hacia daño por la fricción de la cortesa.

Trataba de hacerme la fuerte para no llorar pero no podía evitarlo, mi vida iba a cambiar desde este momento, ver a mi madre aquí me complicaba más las cosas y sabía que no se daría por vencida hasta volver a encontrarme. Me aterraba la idea de volver a verla.

--Ey Olivia, ¿estás bien? ¿qué fue eso?--grito, alce la mirada y vi que venía corriendo en mi dirección, volví a bajar la mirada no quería que me viera llorar-- ¿estás bien?

--Claro-- dije.

--¿Por qué discutas con esa señora? ¿Por qué te llamaba Nicole?-- empezó a bombardear con preguntas y preguntas.

--Vamos-- me levanté y empecé a caminar-- hoy trabajo-- me tomo de la mano y la apretó.

Camine sin voltear a verla mientras me perdía en mis pensamientos.

--Ara, tu no me conoces pequeña-- dije-- no sabes quien soy realmente... no sabes que clase de persona soy.

--Claro que si, tu...-- no la deje continuar.

--Yo no me llamo Olivia, cariño-- nunca le había contado la verdad a ella ni a Fernando.

--¿Qué?-- pregunto.

--Mi nombre es Nicole Monterreal, hija del miltimillonario Richard Monterreal, el hombre más rico de México, posicionado como un hombre de poder en el mundo-- relate mi historia. Ella procesaba la información.

--¿Qué..?-- me miraba atónita-- ¿ell...ella es tu mamá?-- apunto hacia atrás, no cabía en su asombro creo que estaba en shock-- ¿por qué te haces llamar de una forma diferente?

--Por que no deseaba ser encontrada-- vi algo en su mirada.

La dejé con los demás mientras yo iba a la casa a alistarme para trabajar, debo de ser honesta conmigo misma tengo la necesidad de ir ahora más que había aparecido aunque no tuviera ganas.

Mi tía estaba en la sala leyendo un libro, la salude y me dispuse a refujirame en mi habitación.

--¿No salió bien su salida?-- preguntó.

--No tía.

Nicolas

Viajamos casi al otro lado del mundo para ver a un especialista que viera a mi padre, necesitábamos un donante con urgencia y según los médicos que mi padre veía dijeron que en Inglaterra podríamos encontrar uno con mayor facilidad.

Mi padre estaba hospitalizado ya que su estado era muy malo, necesitamos ese riñón con urgencia a pesar de todo no pudimos encontrarlo por ningún lado. Logramos obtener algunos donantes pero todos los que encontrábamos ninguno era compatible con él.

Llegamos directamente con el doctor Lowell para que atendiera a mi padre, él hacia todo por encontrar uno peor no había resultados.

Su vida dependía de un hilo y yo no podía hacer nada.

Mi madre entró a la habitación se veía derrotada, desde que papá enfermó ella ha estado cuidándolo día y noche.

--Esta aquí hijo-- empezó a llorar-- mi niña esta en Inglaterra-- ¿que? ¿Nicole estaba aquí? No podía ser.

--¿La viste?-- rápido me acerqué quería que me contara todo, quería verla. Estaba tan preocupado por ella, creía que la había perdido--¡mamá responde!

--Fui por un café y estaba allí con una niña-- me abrazó-- no me quiere, me odia-- imagine una discusión por parte de ella.

Cuando regrese a la casa y me entere de todlño sentí que era el peor hermano del mundo por no estar con ella, claramente golpeé al tipo y discutí con mis padres pero ya era tarde, ella se había ido y a pesar de buscarla como loco nunca la encontré.