Capítulo 27

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Maraton 5/10

Den la nada llego una chica corriendo asustada.

--¡Sol!, no salgas así, si algo te pasa tu madre nos mata-- tenia una mano en el pecho mientras soltaba un suspiro de alivio-- ¡chicos ya la encontré!-- grito.

Volteo a vernos detenidamente hasta que sunmirada se posó en mi esposa era como si la examinara detenidamente.

--Oye, yo te conozco-- dijo mi esposa de repente-- ¿no eres la chica que estaba con mi hija el otro día? Ara ¿no?

--Si esa soy yo-- estaba nerviosa y miraba a la niña con preocupación-- vamos pequeña, debemos comer-- trato de sostenerla en brazos.

--No quiero-- abrazo aún más a mi esposa, no quería irse con ella.

Rápido llegaron otros adolescentes, cada uno diferente y al igual que sus ojos, los tenían de diferentes colores.

--Las cocineras nos esperan para cenar-- dijo uno de ellos, se acerco a la chica y le susurró algo.

--Si, son ellos-- rápido el chico de ojos grises nos miró perplejo, que se traen esos dos ¿por qué nos miran con asombro?

--Vamos Sol, todos nos esperan para comer-- el chico también trato de acercarse para llevársela pero no cedió, no sabía el porqué.

--¿Este es un orfanato chicos?-- todos asintieron-- ¿y la niña también pertenece aquí?, hace un rato nos dijo que tenía una mamá.

--Técnicamente si, Sol no es como nosotros, ella tiene una mamá-- respondio la chica.

--Yo no tengo una mamá, no me quiere y no ha venido a verme-- tenia la carita pegada en el pecho de Cynthia.

--No digas eso pequeña, una mamá siempre va a querer a sus hijos, tal vez ella no a podido venir pero cuando lo haga te explicará-- esta vez mi esposa interfirio-- ella te ama mucho.

--¿Me lo prometes?-- le pregunto y ella asintió.

Mientras todos veíamos como la pequeña niña sonreía de verdad, llegó mi hija con Marta y otra señora. No se porque pero los mayores se le dejaron ir como si fueran a taclearla.

Me preocupé un poco porque ella tenía una herida en el abdomen y eso podría lastimarla. Podría jurar que la señora que no conocía me leyó la mente porque rapido los interceptó y protegió a mi hija.

--No pueden hacer eso, pueden abrazarla pero suave-- todos la miraban confundidos mientras abrazaban a mi hija diciéndole Olivia, ¿por qué todos la llaman así? Lloraban mucho mientras la abrazaban y algo que también llamó mi atención fue la pequeña que cargaba mi mujer, también empezó a llorar y aferrarse más a ella.

Como instinto de mamá leona defendiendo a sus cachorros Nicole  volteo a ver a la niña y sus ojos se pusieron vidriosos.

--Hola mi amor, ¿no vas a saludarme?-- le hablo en español, ¿ella sabía que la niña hablaba español?, mi esposa y yo nos volteamos a ver dudosos-- ¿ves a la mujer que te tiene en brazos?-- la niña volteó su carita hacia el rostro de Cynthia-- ella es mi mamá-- la niña volteó a ver a mi hija-- ¿y ves a la persona que está a su lado?-- ahora volteó a verme-- él es mi papá, cariño él estaba muy enfermo y estuvo muchos días en el hospital, tiene una herida en su pancita-- volteó a verme pidiéndome con la mirada una prueba. Rápido me levanté un poco la plallera y la niña vio mi vendaje-- yo estuve cuidándolo y no te llevé conmigo porque no podía llevar niños al hospital.

< pero no significa que no te quiera, te quiero mucho-- rápido se agachó-- ¿vas a perdonar a mami?-- espera ¿qué? ¿Mami? ¿De qué va todo esto?

Un Príncipe De RegaloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora