CAP. 21

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Si él hubiera amado a una chica, ¿algo cambiaría?, todas las críticas e insultos desaparecerían, ese sentimiento de repulsión ya no estaría ahí ... Si no hubiera sido gay, ¿Toothless tampoco lo sería?

Sentía algo por ese hermoso chico de bellos ojos verdes, sí. Pero algo no encajaba, durante varios meses observó a Toothless de lejos, sin quererlo terminó por conocerlo a más profundidad, pero tal vez... Sólo tal vez, ese chico pelinegro jamás lo hubiera besado e incluso hablado si Hiccup no viviera en el mismo edificio, si su esposa no fuera la mejor amiga de su hermana mayor. Su encuentro fue extraño, irreal... Doloroso

— Tengo tanta envidia de Snow — Respondió sin más causando que la mente de Toothless se crearan varias incógnitas

— ¿Y eso por qué? — Cuestionó sentado en las escaleras del edificio, tratando de descifrar sus pensamientos

— Me da tanta envidia su valor para decirte frente a toda la universidad que le gustas, esa valentía yo nunca la tendré... — Sus ojos se volvieron a encontrar, como si durante todo el día ese fuera el objetivo de ambos

Toothless intentó acercarse al lindo chico rubio con tranquilidad, hoy había sido una tarde confusa, llena de fuertes sentimientos capaces de herir a alguno sin ser consciente de ello, y eso es lo que Storm más temía

— Me gustas Toothless... ¿Qué debería hacer al respecto? — Esa era una pregunta difícil, no importa cuanto valor llegara a juntar, estaba al tanto que el chico que quería estaba rodeado de chicas hermosas tratando de conquistarlo, ¿cómo podría competir con eso? No se consideraba un ser apuesto, y eso ya era un problema. Sin embargo, también estaba el obstáculo de lo que dirán los demás, podían herir a Storm de cualquier forma, la que fuera, pero nunca permitiría que Toothless experimentara ese dolor, jamás...

Porque ese chico ya era parte de su vida

El rostro de Toothless quedó grabado en su mente, era una tentadora imagen que ya no podía borrar, estuvo la mayor parte del tiempo fuera de sí. Incluso tomó el autobús equivocado teniendo que caminar más de la cuenta, ese día llegó más tarde a su apartamento. Anna lo mataría y esta vez era enserio, intentó demorar su llegada buscando las llaves dentro de su bolsillo, y cuando las encontró, comenzó a jugar con ellas hasta que la puerta del apartamento de enfrente fue abierta. De ahí salió Hiccup con su celular en manos tecleando a la pantalla tratando de mandar un mensaje de texto

Por unos segundos fue ignorado, hasta que el hombre de cabellera castaña desvío su mirada del aparato brindándole una cariñosa sonrisa

— ¡Storm! Astrid y yo ya no te hemos visto en estos días — Comenzó a hablar tomando su hombro con afecto, el chico mostró una expresión amistosa como respuesta

— Solo he estado ocupado con mis exámenes, eso es todo — Fue en ese pequeño instante que Hiccup notó que su adorable vecino no estaba bien, algo estaba atormentándolo

— ¿Seguro? Elsa nos ha contado sobre tu bajo estado de ánimo en estos últimos días — Storm negó evitando preocupar a Hiccup, pero este no dejó el tema en el olvido invitándolo a entrar

El chico rubio pudo notar el cambio de atmósfera al instante, el color de las paredes había cambiado, ahora eran más coloridas, resplandeciendo de vida, su repisa de fotografías estaba más llena que nunca, ahora Toothless estaba ahí junto a la pareja de casados bastante contento, una sonrisa se dibujó en su rostro algo que Hiccup pudo alcanzar a ver

— Algo pasa entre ustedes, ¿cierto? — Cuestionó Hiccup tomando asiento en su sofá, Storm lo miró con temor, indeciso si contarle sus problemas. El castaño soltó una moderada risa ante el temor del chico — Si crees que le diré algo a Toothless, estas equivocado...

Hiccup Es Mi... ¿¡Hermana!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora