La Chica Que Unió MAGCON || Old Magcon [Completa]

Capítulo 45

-¿Estás lista Liza?- Preguntó Tom abajo y yo salí de mi habitación para mirarlo al final de las escaleras. Estaba recién bañada, con mi pijama puesta y diecinueve años de flojera encima.

-Dije que no iría, Tommy.- Le sonreí y alcé mis hombros restándole importancia.

-¿Por qué no?- Preguntó Tom por décimo quinta vez en el día, y no, no estoy exagerando, las conté.

-Porque no quiero ir de soplavelas, apagavelas, violinista, mal tercio, la amiga sola, qué más... qué más... Lo que sea. Es aburrido.- Le saqué la lengua bajando las escaleras y me dirigí al sofá a sentarme mientras él venía detrás mío.

-Estaremos como amigos, Liza.

-Solo YO estaré como la amiga, mientras ustedes se besuquean... compartiendo su... ADN... salival. Asquito. No quiero. Me niego.- Me crucé de brazos estremeciéndome levemente al imaginarme tal escena.

He tenido experiencia con mis amigos de mi país para saber que no es agradable.

-Podemos... no besarnos esta noche.- Alzó sus hombros y sus manos al intentar darme una buena razón, pero vamos, lo conozco, no mantendrá su palabra.

-"Exclamó el princeso antes de sacarle la comida de las muelas a su cita frente a la violinista".- Agravé mi voz haciendo un intento de imitar a un narrador y fallando totalmente.

-Eso... es asqueroso.- Me miró asqueado y yo reí.

-¡Lo sé! Ya ves por qué no quiero ir.

-No te voy a convencer ¿verdad?- Negué y le sonreí.

-Ni un poco, Tom. Vete ya, se hace tarde.- Me levanté y lo volteé para comenzar a empujarlo hasta la puerta del departamento.

-¿ Y si te doy una semana de Doubles?- Paré de empujarlo y lo pensé. Era tentador.

¡Era malditamente tentador!

Pero mi trauma después de la cita sería aún más grande que mi hambre y eso si es algo que no quisiera conservar.

-Buen intento, pero declino tu oferta.- Lo escuché bufar, mientras yo abría la puerta y lo empujé fuera del departamento.

-¿Dos?- Me miró esperanzado y yo le cerré la puerta en la cara.

-¡Qué te vaya bien! ¡Usa condón! ¡Bendiciones muy temprano hacen daño!- Reí y me dirigí de nuevo al sofá donde estaba anteriormente. Me quedé aproximadamente cinco minutos ahí sin hacer más que mirar el techo, hasta que el timbre volvió a sonar y me extrañó.

-¡Tom no pienso ir! ¡Lárgate ya!- No hubo respuesta y el timbre volvió a retumbar. -¡Tom! ¡No me hagas golpearte!- Siguió sonando varias veces seguidas y ya cansada de escucharlo me levanté enojada dispuesta a golpear a Tom si seguía jodiendo la vida. -¿Qué parte de que no quiero no entiend...?- Abrí la puerta y me interrumpí al ver a Taylor, Matt, los Jacks y Nash en la entrada de mi departamento. Luego caí en cuenta que Gilinsky era el que tenía la mano en el timbre, el cual volvió a sonar varias veces más.

Recordé cuando meses atrás hizo lo mismo y aún estaba Jade conmigo. La extraño a la estúpida esa, aún hablamos de vez en cuando.

-Te voy a golpear si no paras, Jack.- Lo amenacé mirándolo mal.

-No soy el único Jack, entonces...

-¡Hola!- Saludaron casi perfectamente a coro los demás y eso me hizo recordar que jamás lograré a acontumbrarme a esos pequeños gestos y palabras que suelen hacer y decir al mismo tiempo.

-¿Qué hacen aquí?- Pregunté interrumpiéndolos y mirando a todos para luego centrar mi mirada en Taylor. Él me miraba con una pequeña sonrisa en la cara que solo me hizo querer abrazarlo muy fuerte, pero me contuve y aparté mi vista.