One Shots [윤민]

Amor prohibido

Sabían q lo suyo no estaba permitido, pero el hecho de q su amor era prohibido hacía todo más excitante para los amantes...

Jimin estaba agitado y sudaba, su cabello se pegaba a su frente mientras respiraba con dificultad, sus manos se mantenían aferradas a ese fornido pecho desnudo, hace unos segundos había llegado al tercer clímax luego de una noche salvaje y caliente con su amante; Min YoonGi.

-Te amo, YoonGi-susurró el pequeño rubio sobre los labios del mencionado, quien sonrió antes de juntar sus labios en un beso tranquilo y lleno de amor.

-Yo te amo más, bebé.-sonrió el peli-azul y besó la frente del rubio.-Es increíble como Rosé y tus padres se creen q solo vienes a verme porque eres mi amigo y como se tragaron la mentira de q hoy íbamos a hacer tu despedida de soltero.-dijo soltando una pequeña risa provocando q el menor sobre las piernas del chico pálido riera.

-No es mi culpa, en primera porque no debieron obligarme a casarme con alguien q no amo, en segunda, porque ella también me pega los cuernos.-YoonGi alzó una ceja.

-Ah sí? Con quién?-preguntó y Jimin rió ladinamente.

-Con mi mejor amiga Lisa. Puedes creerlo?-dijo el rubio riendo, poco le importaba si la chica le pegaba cuernos, total, él no la amaba ni ella a él tampoco, pero tenían q estar juntos para unir las empresas de sus padres.

-Sip, de todas maneras, yo soy el mejor amigo de Rosé.-dijo él y Jimin se mordió el labio para luego acercarse al cuello del mayor comenzando a besar este y moviendo sus caderas en busca de contacto entre sus intimidades.

-Q te parece un cuarto clímax? Será nuestro récord.-susurró el menor en el oído de YoonGi para luego morder el lóbulo de su oreja.

-Sería maravilloso.-dijo YoonGi antes de voltear al menor, haciendo q este cayera de espaldas a la cama.

Sin dudas sería una noche bastante caliente y excitante...

A la mañana siguiente una somnolienta Rosé despertó, se dio cuenta de q le había agarrado tarde, así q se levantó rápidamente y comenzó a vestirse, Lisa, quien estaba a su lado despertó y sonrió.

-Buenos días, preciosa.-se levantó de la cama y se acercó a Rosé, besando cortamente sus labios.-Por qué el apuro?-preguntó observando como ahora la chica se peinaba y arreglaba rápidamente frente al espejo.

-Hoy es el puto día de mi boda con Jimin y si no llego rápido mis padres me crucifican.-dijo tomando su bolso y dirigiéndose a la salida, antes de irse dio un pequeño beso a los labios de la tailandesa y habló.

-Apúrate, te quiero allá pronto. Adiós, te amo.-susurró Chaeyoung antes de irse corriendo.

En la entrada de la casa, Jimin y Rosé chocaron pues ambos venían por caminos distintos.

-Ay!-se quejó la pelirroja y Jimin sonrió ladinamente.

-Te divertiste?-le preguntó y la chica pudo notar leves marcas en el cuello de Jimin, al igual q el chico en el cuello de Rosé.

-Muchísimo, fue increíble.-dijo la chica.-Y tú?

-Uff, fue la mejor noche de mi vida.-el chico le guiñó el ojo, a pesar de q ambos se ponían los cuernos no se llevaban mal, ya q se conocían de años.

Ambos entraron corriendo a la casa y fueron a sus habitaciones a vestirse, al salir, ambos observaron al otro y sonrieron.

-No te queda mal, se te nota bastante el trasero.-dijo la chica y Jimin rió.

-A ti te hace ver menos plana.

-Oye!-se quejó la chica y ambos rieron, pero de pronto la chica se puso sería-Cómo se llama?-preguntó alzando una ceja.