One Shots [윤민]

Mafia Min (omegaverse)

Maratón 1/?

El esposo de Jimin es asesinado por el mafioso más famoso de toda Corea, y Jimin no puede estar más agradecido, además, se dará cuenta de que el amor se encuentra simplemente a la vuelta de la esquina, o mejor dicho: En forma de un pálido mafioso con una mirada profunda y aura asesina...

Un estrepitoso ruido en la planta baja despierta a un omega rubio y a su esposo.

-Mierda.-escucha que el hombre se queja y rápidamente se baja de la cama, tomando su pistola.-Quédate aquí, Jimin, ni se te ocurra moverte.

-S-sí.-dijo apenas.

El moreno de nombre JongIn bajó las escaleras de forma sigilosa, viendo como la puerta principal de su casa fue destrozada y unos hombres sostenían a las asustadas empleadas que estaban a punto de regresar a sus casas luego de una larga jornada de trabajo.

-Joder.

El alfa se apegó a la pared, evitando llamar la atención, lentamente iba bajando, pero de pronto ve a uno de los hombres olfatear en el aire y mirar en su dirección, rápidamente se agacha, escondiéndose por unos segundos y, a gachas, regresando al piso superior para esconderse tras las barandas, creyendo que ya está a salvo se asoma levemente, pero su sorpresa fue grande al ver a un hombre que, si pudiera, no hubiese querido ver en su vida, el imponente pelinegro terminó de subir las escaleras y observó al moreno en el suelo.

-Vaya, vaya, la ratita que me debe dinero por fin apareció.-y rápidamente se vio siendo rodeado por varios.

-M-Min...-susurró.

-Ya me harté de esperar, quiero mi dinero ya. Lo tienes?-alzó una ceja interrogante, JongIn tragó saliva.

-N-no.

-Pues... Me veo en la necesidad de tomar medidas drásticas. El dinero o la cabeza de tu esposo, apuesto a que está muy cómodo durmiendo bajo sus sábanas y acariciando su pancita, o me equivoco?-amenazó.

-A él puede matarlo o hacerle lo que quiera, no me importa, es un estorbo que forzaron a casarse conmigo, y el bebé que lleva dentro es otro estorbo más, no me importan.-dijo con desdén, automáticamente recibió un golpe en el estómago, haciendo que cayera acostado en el suelo.

-Pues el que morirá serás tú.-dijo el pelinegro, destrabó el seguro de su arma y apuntó a la sien del moreno.-Hasta nunca, rata.

Un disparo resonó, despertando de un salto al omega que había caído dormido nuevamente preso del sueño.

Comenzó a temblar asustado, abrazando su panza, tratando así de proteger a su bebé de 5 meses de gestación.

Un grito agudo salió de sus labios cuando, de una patada, abrieron la puerta de su cuarto.

Dos hombres armados se acercaron a él, asustándole momentáneamente, pero luego ingresó un tercero, haciendo suspirar de alivio a Jimin.

-YoonGi.-saludó con una sonrisa.

-Hola Jimin. Cómo está ese mini campeón?-preguntó, acercándose a la cama y sentándose a la orilla de esta para acariciar la panza del mencionado.

-Muy bien.

-Entonces vámonos.-dijo el mayor para cargar al embarazado chico al estilo princesa y sacarlo de la habitación.-Tapa tus ojos, matamos a Kai y no quiero que veas toda esa sangre.-el menor asintió, escondiendo su cabeza en el cuello del alfa, inhalando su olor característico, cigarrillos y menta.

Al bajar las escaleras, los hombres de Min habían cubierto los ojos y bocas de las sirvientas con pedazos de tela, ellas lloraban asustadas.

-H-hyung. Q-qué vas a hacer con ellas?-preguntó con miedos.