capítulo 12:"Joe"

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Narra Owen.
Las palabras de Derek no dejaban de sonar en mi cabeza: “Ella está estable".
Realmente lo logró. 
-¿Lo logró?-preguntó Amelia.
-Lo logró-respondí.
Saltó a mis brazos emocionada y no pude evitar aferrarla a mí. 
Cada vez que la tenía cerca mi corazón latía rápidamente, parecía un adolescente. 
-Me alegro, en serio-sonrió.
Le di un beso en los labios y sonreí.
-¿Podemos verla?-Pregunté a Derek, que observaba la escena sonriendo. 
-Pueden verla pero yo me quedaré  con ella, deben descansar-dijo -Sobre todo tú,  Owen.
Asentí y fuimos hacia mi madre.
Verla bien, me hizo bien. Lo necesitaba más que a nada en el mundo. 
Todavía no estaba despierta, pero Derek dijo que pronto lo haría si evolucionaba bien.
-Es hora de irnos-dije mirando a Amelia.
Tomó mi mano y ambos salimos del hospital en busca de las niñas.
-Hey-Maggie sonrió. -Aquí están, las dos.
Por supuesto ambas estaban dormidas así que tomé a Irina y Amy a Cielo.
Al llegar recostamos a ambas y bajamos al living. 
-Creo que debo darme una ducha-dije.
-Ve, yo lo hice hoy en la tarde-sonrió.
Al salir, Amelia me esperaba en la habitación. 
-Necesitaba esto-dije mientras la abrazaba.
-Siento como si me hubiesen aplastado treinta elefantes-dijo.
Reí ante su comparación. 
-Creo que si te hubiesen aplastado treinta elefantes no estarías aquí-respondí.
-Owen, sólo duerme-rió.
Narra Amelia.
La noticia sobre la mamá de Owen provocó que me alivie, estaba muy nerviosa. 
Desperté feliz, todo estaba bien, como antes. O eso parecía.
Lo primero que hice fue levantarme y ver a Cielo que estaba profundamente dormida.
Luego me preparé y bajé a desayunar.
Oí unos pequeños pasos provenientes del living y al instante supe que Irina ya estaba despierta.
-¡Mami!-dijo y saltó hacia mí. 
-Hey, pequeña. ¿Cómo te trató la tía Maggie?.
-¡Bien, jugamos con las princesas!
-¿Ah, si?-Pregunté fingiendo intriga.  -Dime más. 
-También fuimos al parque con el tío Jackson y Harriet-sonreí al escucharla.
-Así que te divertiste.
-Sí. 
-Toma-dije extendiendo su desayuno. -Debes estar hambrienta.
Hoy era el día de volver al hospital,  luego de  un tiempo largo.
Dejé a Irina en el jardín,  como todas las mañanas y luego a Cielo en la guardería del hospital.
-Buenos días,  princesa-saludó Owen.
Al salir de casa no lo vi ya que él seguía durmiendo.
-Buenos días príncipe-dije mientras me acercaba a él. 
Lo besé, me besó, nos besamos.
Necesitaba tanto un beso así. 
-Ven, vamos al cuarto de descanso-dijo tomando mi mano.
Claramente todos sabemos que sucede en el cuarto de descanso.
-Lo necesitaba-dijo Owen. 
-Yo igual-reí.  -Es hora de volver al trabajo.  Adiós.
Salí rápidamente del lugar y fui hacia mi primer consulta: una señora de cuarenta y cuatro años con síntomas de un tumor.
-Bien-dije. -Esme, le  haremos unos estudios.
Una vez que todos salieron de la habitación,  cerré la puerta y los seguí. 
Justo antes de llegar al ascensor lo vi a él. No, no era Owen. Era el papá de mi hija, Irina.
¿Qué hacía él aquí?
-Hola amor-habló refiriéndose a mi paciente.
-¿Por qué te retrasaste tanto?-preguntó ella.
Los siguientes minutos, parecían ser eternos. Ellos seguían hablando, pero no pude oírlos. Mi cuerpo estaba con ellos pero no mi mente.
No aguanté más y corrí hacia el primer baño que vi, vomité de una horrible manera, pero me alivié.
-Hey, Amy.
Arizona estaba aquí. 
-No se lo digas a Owen-advertí.
-No, no le vas a ocultar que estás embarazada.
Reí al escucharla.
-No estoy embarazada, Arizona. Estoy nerviosa.
-Ven aquí-dijo sonriendo y abriendo sus brazos.
Arizona es posiblemente la persona más comprensiva del mundo, aún  más que Maggie.
-Creo que debo volver al trabajo-dije.
-Ve, pero tranquila, todo saldrá bien.
Sonreí por última vez y volví al pasillo.
Todos me miraban, posiblemente la manera en la que salí corriendo los alertó. 
-Amy-dijo aquel hombre.
-Doctora Amelia Shepherd-dije mostrando el pequeño cartel que decía mi nombre.
-Cuídala.
-Por supuesto que sí.  -respondí con fastidio. 

-Es un tumor cerebral-afirmó Jo.
Asentí desganada, la realidad es que no podía pensar en ella ahora.
-Le pediré al doctor Shepherd que nos ayude-dije. -Ve por él. 
Jo se fue y a los minutos regresó con Derek.
-Los dejo, Alex me necesita-dijo y se fue.
-Derek, no te llamé por ella-dije haciendo referencia a la paciente.  -Joe está aquí. 
-¿Hablas en serio?-preguntó abriendo sus ojos.
-Es el esposo de esta mujer. Jamás mentiría con algo así. 
-¿Planeas decirle la verdad?
-Claro que sí-respondí de una manera obvia.  -Estoy segura de que él jamás se hubiese interesado en mi niña de todos modos.
-¿Cómo estás tan segura?-preguntó. 
-Porque él dijo que si en algún momento yo quedaba embarazada debía abortar.
-No hablas en serio-soltó.  -Le romperé la cara en cuanto lo vea. 
-Nadie lastimará a nadie. Intenta mantener la calma.-por dentro seguía pensando en él, debía enfrentarme al monstruo. - ¿Puedes terminar con ella?-pregunté. 
Claramente debía hablar con él acerca del estado en el que estaba su mujer y sobre Irina.
-¿Cómo está mi mujer ?-preguntó al verme.
-Tiene un tumor cerebral-hablé.
-No puede ser.
-Joe, creo que debemos hablar.
-No, Amelia,  no hablaremos de como te fuiste meses a quién sabe dónde sin decir absolutamente nada. Ya no te necesito.
-Nunca me necesitaste.
-En realidad, no, eras una zorra al igual que todas.
-No me hables de esa manera-elevé mi tono de voz.
-Todos sabemos que tu único amigo era Owen, quizá él era a quien querías.  Zorra.
-Yo no fui la que engañó aquí.  Tampoco fui la que golpeó.
-Fue solo una vez.
-¡Una vez en la que casi pierdo a mi hija!.
Oh, no.
Lo dije, otra vez lo hice. Así como le dije a Owen aquella vez que tendríamos un bebé. 
-¿Tuvimos una hija?
- Sí.
Se retiró del lugar ignorando por completo mi presencia y ahí fue cuando decidí que jamás hablaría con él acerca de Irina. No le haría eso a mi niña.

{♡}
VOLVÍ.  OTRA VEZ HACIENDO QUE SE ABURRAN CONMIGO.
ME TENGO MENOS FÉ QUE AMELIA AL PAPÁ DE IRINA.
LES PRESENTO A JOE: EL PAPÁ DE IRINA.
YA VAN A CONOCER MÁS DE ÉL,  LO PROMETO.
¿SIGOOOOOOOOOOOOOO?
BYE BYE😘








I Need You||Omelia. (editando) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora