The Devil in the Details (Traducción)

Capítulo 24. Hipócrita.

Stiles llamó a la puerta del viejo loft de Derek. Peter vivía aquí ahora, eso lo sabía, sin embargo, no sabía que Scott, Peter y Malia le esperaban dentro.

"Stiles", Malia sonrió con cautela cuando abrió la puerta.

"Hey, Lia", Stiles sonrió falsamente cuando entró en el loft familiar. La última vez que estuvo aquí tuvo un ataque de pánico por su posesión del nogitsune, pero esta vez no le importaban los recuerdos.

"Stiles, mírate", sonrió Peter caminando hacia el cazador.

"¿Así que ahora eres parte de la manada de Scott?" Stiles preguntó mirando al ex alfa.

"Le ayudo cuando lo necesita", respondió Peter simplemente.

"¿Dónde está Lydia?" Stiles había esperado que estuviera allí.

"No está aquí", respondió Malia. Estaba mirando a Stiles con ojos curiosos.

"Entonces, ¿quién es tu amigo?" Peter preguntó entonces, haciendo un gesto hacia el demonio detrás de él.

"Kai," el demonio sonrió extendiendo una mano hacia el hombre lobo.

"He oído que no funcionó lo tuyo con Derek", dijo Peter ignorando la mano de Kai.

"¿Vas a darme un largo discurso sobre cómo debería darle una oportunidad?" Stiles preguntó aburridamente.

"Supongo que eso sería intrascendente", Peter sonrió brevemente, "¿Qué tal si os ponéis cómodos? La pizza debería estar aquí pronto".

Stiles dejó escapar un suspiro, pero Kai le empujó hacia el sofá. Tan pronto como los dos tomaron asiento, sonó el teléfono de Scott.

Scott se alejó mientras respondía. Stiles observó atentamente mientras Scott hablaba en voz baja. Lanzó algunas miradas hacia Stiles.

"Sabes, ha sido genial veros, pero deberíamos irnos", dijo Stiles poniéndose de pie. Conocía a Scott lo suficientemente bien como para saber que algo estaba pasando. Había pasado dos años de su vida con el chico. Sabía cuándo estaba mintiendo y sabía cuándo estaba tramando algo y ahora mismo estaba tramando algo.

Kai obviamente entendiendo a Stiles, se levantó para seguirle a la puerta, pero parecía estar atascado.

"¿Qué?" Kai miró a su alrededor confundido.

Peter apagó las luces para revelar una trampa de demonios brillando a su alrededor.

"Pintura de luz negra", sonrió Scott, apartando su teléfono.

Las luces volvieron a encenderse entonces.

"Chicos, no ha detenido a Stiles", señaló Malia.

De hecho, Stiles había caminado a través de la trampa sin problemas.

Stiles se rió "No soy un demonio, Malia".

"Tampoco eres Stiles," Scott frunció el ceño, asustado.

"Técnicamente lo soy", Stiles se encogió de hombros y se volvió para mirar a Scott.

Peter aprovechó la oportunidad para agarrar un sujetalibros de hierro fundido del estante cercano, dejando a Stiles inconsciente.

"Peter," Scott miró boquiabierto al hombre lobo.

"¿Qué? Dijeron que no le dejáramos irse. No puede escapar estando inconsciente", Peter se encogió de hombros.

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Derek se sentó en silencio en el asiento trasero del impala. Habían estado en la carretera apenas tres horas y el incómodo silencio entre Cas y Dean era ensordecedor.

"Cas apestas a irritación y preocupación, Dean, apestas a molestia y estrés, ¿vais a hablarlo?. Ya me estoy atragantando", resopló Derek.

Dean se tensó visiblemente mientras Cas miraba a su novio sin decir nada.

"No, sí, hacéis un muy buen punto", Derek puso los ojos en blanco.

"¿Qué propones que diga, Derek? Dean no va a escucharme, nunca lo hace. Piensa que es invencible, por lo que ignora todas las señales de peligro y continúa siendo lo más imprudente posible", dijo Cas con irritación.

"¿Conoces el problema de Cas, Derek? Se preocupa demasiado. Vivimos una vida peligrosa, si me volviera loco cada vez que mi vida corre peligro, el mundo habría terminado, tres veces. También es un hipócrita", se burló Dean.

Derek echó la cabeza hacia atrás con un gemido.

"Dean es el hipócrita, si Lydia hubiera afirmado que yo iba a morir, me habría encerrado en la mazmorra del búnker. Y tal vez debería preocuparse un poco más. Esta es una vida peligrosa, lo entiendo, pero lo trata como un trabajo de escritorio todos los días, "Cas respondió bruscamente.

"Tal vez no tendría que esforzarme tanto como para encerrarte en la mazmorra si no tomaras decisiones estúpidas que casi te matan. Sé lo que estoy haciendo, tengo cuidado. Él no piensa. Dice que soy imprudente, bueno, si esa no es la mayor subestimación", se burló Dean.

"¿Tienes cuidado, Dean? ¿De verdad? Dice el tipo que ignora la profecía directa de su muerte", Cas se volvió para mirar a Dean.

"Ella no es una profeta, Cas, es una banshee", Dean respondió bruscamente.

Al menos ahora estaban discutiendo directamente.

"Sí, una banshee, un heraldo de la muerte. ¿Sabes qué es la definición de heraldo? Algo que presagia un evento futuro o da una señal anticipada de lo que está por venir", dijo Cas en tono condescendiente.

"Ella misma dijo que no siempre tiene razón", resopló Dean agarrando el volante con más fuerza.

"Eso no significa que te arriesgues, Dean".

"Entonces, ¿se supone que debo quedarme al margen mientras mi hermano corre como la puta de un demonio?"

"Tu problema es el control, siempre tienes que estar en control de la situación. No puedes confiar en que nosotros nos encargaremos de esto".

"No se trata de confianza, Cas. Se trata de que no me quede sin hacer nada mientras que las personas que me importan arriesgan sus vidas porque existe la posibilidad de que me hiera", gritó Dean. Claramente se estaba irritando más.

"No se trata de que te hieras, se trata de que mueras. Si mueres, eso nos duele a todos", gritó Cas.

"Entiendo tu preocupación, sí, lo entiendo, pero he muerto antes, no es nada nuevo", Dean calmó un poco su tono.

"Una de estas veces no volverás", se quebró la voz de Cas.

Dean permaneció en silencio por un momento, antes de volver a hablar "Estaré bien, Cas, lo prometo".

Cas se volvió, mirando por la ventana. Ya no quería tener esta conversación. Dean era demasiado terco y Cas iba a ser el que sufriera por ello.