Una más.

XXV - Día del Padre.

Tras la comida, brindamos por Bruce, él parecía realmente feliz. Nos fuimos del local y nos condujeron a un monovolumen de siete plazas, especialmente aconsejado por Alfred. Jason nos llevó al parque de atracciones. En cuanto nos bajamos, todos nos descubrimos las camisetas. Bruce se rió por primera vez desde que le conocí, al igual que Damian, estaba camuflado. 

-¿Esto es en serio? - todos nos miramos desconcertados.- Venid aquí.- nos regaló un abrazo grupal, en el cual fui yo la primera en aceptarlo. 

-Chicos, esto se merece un selfie.- Dick sacó su móvil. 

-Damian, debes sonreír.- le advertí. 

-Pues dile a Jason que no se pegue tanto a ti.- gruñó. 

-Si no, no salgo en la foto, además de agacharme por canijos como tú.- le devolvió.- Metro cincuenta. 

-A lo mejor si te corto el cuello ya no mides tanto.

-Chicos, ¿podemos hacernos una foto familiar sin que os matéis por una vez?- con cansancio trató de poner orden Tim. 

-Cállete, Drake, si fuera familiar solo estarían Bruce y Cyl.- sujeté a Tim. 

-Ya vale.-Bruce agravó la voz, todos ya nos callamos y posamos para la foto. 

Al entrar, me maravillé ante todo lo que vi: montañas rusas, un tiovivo, barcazas, una noria, una casa del terror, puestos de comida basura, puestos para ganar un peluche... 

-¿Qué quieres probar, princesita?-Bruce me agarró del hombro. 

-No sé.-hablé emocionada. 

-Podemos ir a algo flojo para ir acostumbrándola.-sugirió Tim.- ¿El tren de la bruja? 

Nadie se negó, en esa atracción lo divertido era ir con tu familia, los vagones eran de tres, me senté entre Damian y Tim. Nos tocó parar a Damian porque casi le rompe el tubo de aire en la cabeza. Luego, Damian propuso ir a las montañas rusas. En la primera, que era la floja, eran de dos, Damian se puso de nuevo conmigo, Dick y Tim juntos, y, por último, Jason y Bruce. Sólo escuché mis gritos y los de Dick, Damian parecía aburrido. Fuimos aumentando la potencia y las acrobacias de las atracciones, siendo la cuarta mi elección. No evité notar el impacto al público de mi compañía. 

-¿Red Hood?- Damian leyó con un tic en el ojo. 

-Dicen que es la tercera más rápida y loca, después de la Joker y Batman.- sonreí emocionada, Jason me cogió por los hombros. 

-Vamos a comprobarlo.- sonreía. 

Bruce se encogió de hombros. Cuando entramos en el edificio que te llevaba a la atracción, básicamente era un mausoleo a Red Hood. No podía evitar admirar sus imágenes en la pared, realmente molaba mucho. 

-Ve más deprisa, idiota.- me empujó Damian.- Y límpiate la baba.

-Yo no...- me alzó una ceja.- No es mi culpa.- bufé.-Es demasiado guay. 

-¿Tú crees?- Tim se metió en la conversación. 

-Sí, es muy diferente al resto.

-Tengo una duda, ¿cuál es tu favorito?-Bruce sorpresivamente me preguntó.- Quitando a los Robins. 

-Red Robin.- casi sin pensarlo, lo solté. 

-¿Por qué?-Jason me miró fastidiado. 

-Me parece una evolución de Robin y es muy elegante dando palizas.- expliqué.- Casi nadie habla de él, está muy infravalorado. 

-¿Y Nightwing? - preguntó Dick.

-Es muy sexy, solo puedo decir eso.- bromeé. 

Nos montamos en la montaña rusa, Jason y yo nos acomodamos la seguridad,  eran vagones con seis plazas de dos, sujetas a los raíles desde arriba, Damian y Dick se sentaron en primera fila y Bruce y Tim en la tercera. Jason me agarró de la mano.