Como Perros y Gatos [NCT]

La dulce espera

HaeChan apoyo su espalda contra la pared y se deslizó hasta chocar contra el suelo, sentándose y escondiendo su rostro entre sus manos. Mark se lo quedó mirando sin saber que hacer, solo quería abrazarlo y protegerlo de todo aquel que le hizo daño, pero para eso debía protegerlo de sí mismo.

—¡DongHyuck!.— El menor levantó su rostro rápidamente al escuchar aquel llamado.— ¡Dong…!— JaeNo no pudo terminar de pronunciar su nombre por que el castaño ya se había lanzado sobre el, abrazándolo con fuerza y escondiéndose en su pecho.

JaeNo estaba ahí, junto a el. Ahora nada podía pasarle, por que JaeNo lo protegería.

Suspiró aliviado cuando sintió las manos de JaeNo sobre su espalda, acariciándolo con suavidad.

— Te dije que no me soltarás.— Lo regaño en un susurro.

— Perdón, quería estirar mis deditos por que tenga un calambre y me solté.— Se disculpó con el mismo tono con el que el mayor le hablaba.

— Esta bien, si tú estás bien, todo lo está.

— Estoy bien, Mark Hyung llegó justo a tiempo.— Jen alzó la miraba y vio a su hermano con sorpresa.

— Hyung…— MinHyung hizo una leve sonrisa dándole a entender a su hermanito que todo estaba bien. Era la primera vez que JaeNo le dedicaba la palabra luego de la discusión, al menos ya no estaban tan mal.

— Bueno, creo que me iré.— Antes de que el canadiense pueda darse vuelta, un pequeño cuerpo se aferró a él.

— Gracias, Hyung.— La suave voz de HaeChan acarició su oído y lo dejo petrificado. Sus bracitos se aferraban a su abdomen y su cabecita tocaba los labios del mayor.

— N-no fue nada… Si vuelve a aparecer no dudes en llamarme.— Hyuck asintió con una sonrisa y volvió a su lugar, junto a JaeNo.

El menor entrelazo sus dedos con el Lee y le pidió.

— No me aprietes tanto, por favor, así no volveré a soltarte.— Jen asintió con una sonrisa y aflojó el agarre en la mano del castaño.— Me gusta la forma en que tus ojos también sonríen.— Murmuró cuando comenzaron a caminar, saliendo del pasillo en el que estaban y volviendo a la entrada de la sala donde sus hermanos los esperaban.

— A mí me gusta la forma en que tu sonrisa ilumina cualquier lugar.— Hyuck se sonrojo y golpeó el brazo del más alto cuando lo escucho decir eso.

— Tonto.

Kun se había salvado de la charla ya que tenía que llevar a SiCheng y a Ten a sus clases de danza y luego irse a trabajar.

Pero otros tenían mejores métodos para evadir eso.

RenJun y JaeMin salieron del baño bastante agitados y con la respiración acelerada.

— Eso fue…

— Espeluznante.— Completo JaeMin.— Es la última vez que vemos videos de cosas paranormales que ocurren en los hospitales encerrados en el baño de un hospital.

— La próxima iremos a una casa embrujada.— Propuso el mayor mientras guardaba su teléfono.

— Es una cita.— Confirmo el más alto besando los labios de su novio.— Ahora vámonos antes de que un espíritu nos aparezca en el espejo.— Ren río y tomo de la cintura a su Nana caminando fuera del cuarto de baño.

Sin darse cuenta, que alguien más a parte de su reflejo los observaba…

— ¿Qué es eso que tiene esa señora ahí?.— Pregunto aterrado JeongIn mientras se escondía en el hombro de su mejor amigo.— ¡Es horrendo!