Bien

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—¿Puedes ir por el?

MinHyung tenía a todos los menores frente a él, mirándolo con súplica.

—Por favor, Mark Hyung.

Oh no, eso no. No podía soportar a DongHyuck mirándolo con su carita de bebé y pidiéndole por favor.

¿Por qué tenía que ser tan lindo? ¿Y por qué había hecho todo lo estúpidamente posible para alejarlo de el? Joder no podía decirle que no a esos ojitos llenos de estrellitas y brillos.

—Esta bien.— Acepto tragando duro cuando sintió los brazos del menor rodear su cuerpo.

Pero más allá de tener los brazos de aquel precioso sol sobre el, algo más preocupo su ya estresada mente. ¿Cómo iría? Nunca llegaría caminando o en bici y…

Y ninguno de sus hermanos sabía sobre “ella”.

Podría ir en un tiró y regresar para volver a esconderla pero corría el riesgo de que alguno de los mayores lo vea y que TaeYong, como consecuencia, lo matara.

—¿Qué esperas? Se hará de noche y podría ser peligroso para el.— La advertencia de JungWoo lo hizo despertar de su transe.

Era cierto, ya estaba anocheciendo y lo único que sabía era que ChangBin lo había llevado a un parque de skates cerca de la casa del mayor, el sabía donde quedaba y era bastante lejos debía ir ya.

—Escuchen: Ninguno de los Hyungs debe enterarse de esto…— Les aviso, especialmente a sus hermanos, ganándose una mirada de confusión de parte de todos.— Ni siquiera Ten Hyung, TaeYong Hyung me mata si se entera.

—¿De qué hablar Hyung?.— Pregunto curioso JaeNo pero MinHyung no contesto, solo suspiro y se alejó de su casa.

Camino seguido de los otros hasta cruzar los jardines de dos casas y a la tercera se detuvo, tocando la puerta.

—¿Qué haces, Mark?.— Está vez fue RenJun el que lo cuestionó.

—Solo esperen un momento.— Les pidió mientras esperaba que le abran.

Un minuto más tarde, un chico alto y rubio le abrió la puerta.

—¿Mark?

—¡Daniel! ¡Lamento molestarte a estas horas pero es urgente!.— El mayor le sonrió y palmeo su hombro despreocupado.

—No hay problema amigo ¿Qué necesitas?

Los demás chicos no alcanzaron a escuchar lo que el canadiense dijo, solo lo vieron entrar y al rubio cerrar la puerta detrás de él.

—¿Creen qué Mark Hyung se haya escondido para no ir a buscar a Lele?.

—No, seguro le pidió a su amigo que lo lleve a dónde están, el no sabe conducir, ni tiene auto.

—¡Quizás tiene un caballo en el garaje! ¡Y va a ir a buscar a Lele montando en su noble corcel!.— RenJun puso una mano sobre el hombro del de rulitos y negó.

—YangYang… No.

La respuesta a sus preguntas llegaron cuando el tipo rubio abrió la puerta del garaje, mostrando un gran manto de oscuridad del que salió Mark montando su…

—¿¡Moto!?.— Gritaron los presentes impresionados.

MinHyung parecía ser un chico tan bueno, correcto, miedoso y que seguía todas las órdenes de Papá TY (entre ellas: “Nada de motos, pueden caerse, y morir.”). Siempre bueno con sus tareas y obediente…

Y ahora tenían a Mark frente a ellos, montando su moto negra y con el casco puesto, pero el vidrio levantado por lo que veían su tímido rostro dentro de el.

Como Perros y Gatos [NCT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora