XY: Culpa

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Diciembre

x: Jacob

Al fin, sólo faltaba 1 semana para ser libre. La escuela terminaría, vendrían los exámenes finales y al fin llegarían las vacaciones. Luego navidad, eso no me emociona en absoluto, pero, bueno, no todo es perfecto. Olvidemos eso ¡las vacaciones! ya no tendría que aguantar más a mis compañeros ni a los maestros, hasta febrero, eso es malditamente hermoso. Además el próximo año cumpliré 17 años, un paso más a tener 18 y ser definitivamente libre. Si, pienso hacer muchas cosas cuando sea mayor de edad, probablemente no el día que los tenga, pero haré algo.

Además el próximo año ya no estaría solo. Ahora tengo a P, tengo muchas cosas planeadas para hacer en las vacaciones, no nos podremos ver en la escuela, pero él podría venir a mi casa o yo a la suya, podríamos salir más. Podríamos hacer muchas cosas, podríamos estar juntos.

Creo que al fin mi vida comienza a cobrar sentido.

***

Era miércoles, hoy todos mis compañeros, incluyéndome, estaban muy atareados, pues era la entrega final de trabajos y tareas, el viernes tendríamos los últimos exámenes. Todos querían aprobar y largarse a vivir la vida.

Me encontraba sentado en el suelo del salón, P se encontraba junto a mí pero estaba tan ocupado haciendo trabajos en el último momento que no me prestaba atención, realmente no me molestaba, yo también tenía que hacer otros trabajos más. Jamás dejen al final todas las tareas atrasadas... se sufre mucho. Yo estoy muriendo ahora mismo.

Mire hacia el frente, donde mis compañeros hacían una fila para hablar con el profesor. Se podía sentir la frustración y tensión en el ambiente, este tipo de cosas me ponen los nervios de punta. Mire a P y él levanto la vista de las hojas de máquina que tenía en las manos y me sonrió. Yo le devolví la sonrisa. Los ojos de P miraron en dirección hacia la entrada del salón y pude notar que se ponía en tensión, como si hubiera visto algo que le desagradara. Me voltee yo también y mire qué es lo que había disgustado a P.

Rose. La hermosa y preciosa Rose, con su cabello negro largo y lacio. La relación, si es que tenían una, entre P y Rose era muy extraña. Siempre sorprendía a P mirando a Rose con asco y veía como Rose le devolvía la mirada con una sonrisa burlona.

Sin embargo a mi me agradaba. Además era alegría a la vista. Si, sonare bastante superficial pero me gustan las chicas hermosas. Rose era hermosa, no la dejaría de mirar.

P me había dicho algunas cosas sobre Rose, nunca me había contado qué había pasado exactamente entre ambos, pero por las cosas que sabía, no creo que quisiera saberlas. Si, Rose le había hecho daño, se supone que tendría que alejarme de ella, pero cuando eres estúpido y te gusta una chica, no haces mucho caso a las advertencias.

Rose había entrado al salón y estaba hablando con una de sus amigas, igual de bonitas que ella, bueno, no, ella era hermosa, sus amigas sólo eran bonitas. P me toco un hombro e hizo que volviera a la realidad. Miserable, no hagas eso cuando los ángeles están en mi campo de visión.

—Jacob, creo que tendremos que entregar los trabajos mañana.

¿Qué? ¿Por qué? así no me daría tiempo de estudiar.
P debió notar mi cara de estúpido porque señalo hacia al frente.

—El profesor ya se ha ido.

Maldición, genial, además de tener miles de trabajos por terminar, no tendría tiempo suficiente para estudiar. Todo porque me había quedado idiotizado mirando a Rose, aunque no recuerdo que haya pasado mucho tiempo.

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