X & Y

Y: Otros enigmas

Conocer a D, Edgar y a Jacob ha sido una de las cosas más ridículas que me han pasado, y me han pasado muchas.

Verán, se que Jacob se acerco a mi solo por pura necesidad. Necesitaban un equipo de 5. No había nadie más. Yo estaba solo. Bingo.

Sin embargo me trataron con amabilidad cada uno de ellos, aunque seguramente era fingida.
Ninguna persona quiere ser amable conmigo, ni siquiera por fingir, les causo terror.
Pero la verdad es que prefiero un rechazo autentico que a un intento patético de parecer amable, solo para caer bien.

A pesar de mis pensamientos sombríos y mi odio general por la gente, siempre he pensando que todas las personas merecen una amabilidad pura, real.

Así que un grupo de imbéciles trate de ser amable conmigo solo por necesidad me parece bastante asqueroso y patético. Todo eso resumido en un suceso ridículo.

Aun así Jacob fue el único que mostró cierta incomodidad al convivir conmigo, signo evidente de que su "amabilidad" era puramente una máscara. 
Pero esto solo me rebelo algo interesante, creo que siempre al verlo desde el otro extremo del aula lo juzgue mal, supongo que le incomodan las personas tanto como a mí. La diferencia es que él si los quiere tener cerca.

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Me encuentro en el segundo piso de mi casa, en realidad no es un piso, solo es una zona al aire libre con loza. Me gusta venir aquí, puedo estar alejado de las personas que viven conmigo.

No quisiera que esto pasara, pero no se puede evitar.
Yo no los soporto y es evidente que ellos tampoco me soportan a mí.

Estar en este lugar, donde se puede ver el cielo, respirar el aire, escuchar los sonidos amortiguados de todo lo que te rodea. Para mí se combinan para figurar algo así como mi "paraíso"

Normalmente vengo aquí cuando requiero reflexionar, pensar e incluso divertirme un poco en esta soledad.

Pero por alguna razón se me está complicando un poco ahora.
No dejo de pensar en los intrigantes del equipo.
Sobre todo en Jacob y D.

D.

No creo haber conocido antes a una persona que decidiera omitir su nombre y poner solo una letra.
Yo lo hago, pero son por razones de defensa.
Y allí estaba ella, diciendo que se llama D, con toda la naturalidad del mundo. Me tiene intrigado, es bastante diferente a otras chicas que he conocido.
Su forma de hablar, algo sarcástico y fastidiado. Normalmente, las mujeres que me rodean hablan en un tono educado, respetable y bastante amable. Ella no, ella solo va al grano y directamente.

Ahora te preguntaras por qué lo digo.

Cuando estuvimos en equipo, ella se encargaba de decirnos qué hacer, nos ordenaba y todo lo decía con fastidio, cosas como:

"Claro que lo harás, si piensas que yo lo haré te falta un tornillo."
"Solo hazlo, no te quejes, piensa en todas las personas que querrían hacer algo tan "útil" como esto,"

Nos repetía estas frases continuamente, cuando se dirigía a mí, no lo hacía con temor, me consideraba otra persona más, aunque creo que es más acertado decir "otro tipo imbécil más"

No puedo asegurar que fuera fingido, pero sí lo era, no lo parecía.

Es una chica, una chica bastante perra, pero no lo intentaba ocultar como la mayoría de las chicas que conocí. Es como si te restregara en la cara que realmente le importaba poco si le agradabas o no.

Me impresiona, y creo que de cierta forma me agrada.
No me gustan las personas que fingen, si eres una persona que todos piensan que es una bendición conocerte solo porque les haces cumplidos, cuando realmente a sus espaldas eres un imbécil, te advierto, desde ya, no te me acerques.
Prefiero que sean desagradables, amargos y groseros, todo esto pero en tu maldita cara.

Así era ella, era desagradable, pero te lo estaba diciendo en la cara. Sin embargo no era una persona irritante, es decir ¿conoces ese tipo de personas que es idiota con todo el mundo solo por sentirse mejores? no es esa clase de persona, solo así es su carácter, no era fingido, no fingía ser amable, no fingía ser imbécil, solo era así.

Yo soy de esa manera.
Ella era de esa manera.

Hay veces en las que conozco personas y quisiera acercarme a ellas, pero esas veces solo duran poco. Esto me estaba pasando ahora, me quisiera acercar a ella pero estoy seguro que esta clase de "emoción" pronto pasara, así que no lo intentare si quiera.

Ahora otro enigma.

Jacob.

Este personaje que se topo por coincidencia conmigo.
Me tiene en un enigma bastante grande. No dejo de pensar en sus expresiones, cada vez que me volteaba a ver y veía a los demás, su alrededor.

Era como ver a un animal enjaulado.
Estaba tan alerta que seguramente, si alguien se le acercaba por detrás saltaría como un grillo y saldría corriendo del salón.

Sin embargo todo su ser emanaba una alegría extraña.

Si te soy sincero, es el tipo de persona que quisiera ser.
El tipo de persona que detesto solo por el simple hecho de que me restriegan todo lo que jamás podría tener.

Él no tiene la culpa de lo amargura de mis pensamientos.
Él no, pero otras personas sí.

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Me he recostado en el suelo de loza.
Miro las nubes que pasan, cada una de ellas tan cerca y tan lejos de mi.
Todo en este mundo es para mí como una nube. Las cosas que más quisiera tener están allí, al alcance de todos, pero cuando yo intento tomarlas se difuminan y vuelve a ser todo tan oscuro como un cielo al aviso de una tormenta.

La amistad es una nube.
El amor es una nube.
La felicidad es una nube.

Y como las nubes que pasan sobre mí, se me es imposible alcanzar todas estas cosas.

Elevo mi brazo izquierdo hacia el cielo, se ve como si las estuviera tocando, cuando en realidad solo es una ilusión óptica.

Es gracioso como la gran mayoría de las cosas que vemos y percibimos en nuestro entorno son solo ilusiones ópticas. Todo es tan falso, todo es un juego de nuestro cerebro.

Sin embargo, quisiera que mi cerebro jugara conmigo continuamente, en lugar de obligarme a ver lo duro de mi realidad.

Mi realidad.

¿Cuál es mi realidad? 

Es la triste espera de algo que no sucederá, aunque la verdad deje de esperar cuando me di cuenta de que no llegaría.

Un amigo.

He esperado por tanto tiempo un amigo real, no ese estúpido concepto que tienen todos.
Las personas ven a los amigos como objetos que pueden usar por momentos y luego desechar porque les ha dado todo lo que querían.

No lo quiero, no quiero usar, ni ser usado.
Quiero amar, sentir y alegrarme por saber que alguien me importa.

Desafortunadamente no he encontrado una persona con quien compartir todas estas cosas.
Quizás no la encuentre.

Otro lado de mi realidad es que ni en mi propia familia me puedo sentir bien.
Mis padres y mi hermano solo me ven como una persona que se ha convertido en un objeto. Un objeto amargo y detestable.

Sin embargo no soy el único que se siente así, apuesto que a muchas personas sienten este vació en su interior.

A veces me pregunto por qué las personas huyen de las emociones.
Del dolor, de la alegría, de la emoción, de la tristeza.

Yo daría muchas cosas por sentir cada una de ellas.
No siento dolor porque para sentirlo debes perder algo que te importa, nada me importa.
No siento alegría, las cosas que suelen causarme felicidad son materiales, duran poco. Demasiado poco.
No siento emoción, nada existe que me haga gritar de euforia.
No siento tristeza, no puedo llorar por cosas que se que no valían la pena.

Estoy vació. 
Estoy vació y nada es peor que esto.
Se siente como estar muerto, sabes que estás vivo, estas aquí, respiras.
Pero al menos yo no tengo un propósito, solo estoy aquí porque quiero ver mi vida pasar, quejarme después de lo que jamás hice, y poder sentir mi muerte corporal.

He presenciado mi muerte interior.

 Estoy muerto y vivo a la vez.