X & Y

Y/E: Por todas estas cosas

Y: "P" 

Sólo han pasado 2 semanas después de que Jacob me pidió que fuera su amigo.
Primera semana y ya estoy arrepintiéndome.
Segunda semana y aún no término de aceptar que tengo un amigo, o se supone que lo es.

No me malinterpreten, no es que no quiera ser amigo de Jacob, en realidad, me he dado cuenta, de que es lo que más quiero. Sí, me cuesta creerlo.

Aunque me cuesta creer más que él haya querido ser mi amigo, quizás yo no sea un amigo especial o diferente a otros que ha tenido, pero formo parte de su vida ahora. Y él forma parte de la mía también, sólo que él es una parte mucho más importante. Más importante de lo que yo jamás podre ser.

Aún así no es fácil para mí aceptar que tengo un amigo, después de tanto tiempo, hace años que nadie había querido acercarse a mí. Jacob lo ha hecho.

En los últimos días de estas dos semanas, hemos hablado en todas las clases, también en los tiempos libres. Él me habla sobre las cosas que le gustan, lo que quisiera tener, también se queja mucho porque sabe que no lo tendrá. Por mi parte yo intento hablarle sobre mí, no me funciona muy bien, a veces me cierro, entro en pánico y no puedo evitar cerrarme otra vez. Jacob nota cuando no puedo o no quiero hablar sobre algo, lo nota y no sé cómo, nadie había notado jamás lo que me pasaba. Qué sucede dentro de mi cabeza, eso sólo yo lo sabía, él está intentando saberlo.

Lo está logrando, y tengo miedo. Tengo miedo de que pueda dañarme, utilizar toda la información en mí contra, eso todas las personas lo hacen. Toman gran parte de ti y lo destruyen, de múltiples formas, de maneras muy crueles. Siempre tienen que ganar.

Quiero estar seguro, seguro de que Jacob no lo hará, no tomara las cosas que pueda darle y las destruirá, y se burlara de ellas. Quiero pensar que no es ese tipo de persona.

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Ahora mismo es sábado, son sólo las 9:34 A.M. y estoy realmente nervioso.

El viernes, es decir ayer, Jacob y yo quedamos en que nos reuniríamos para salir, no sé a dónde, pero la razón por la que estoy nervioso es porque realmente jamás nos hemos visto fuera de la escuela. Siempre nos saludamos, hablamos y comemos juntos, pero eso pasa en la escuela, ahí no puede suceder nada, es un lugar en el que estamos obligados a estar, no un lugar donde decidimos ir, donde quizás él se fastidie y termine por irse, si en la escuela llegara a cansarse de hablar conmigo, sólo se iría al salón y no pasaría nada.

En cambio, en un lugar que no es la escuela, que quizás sea una plaza, una calle cualquiera, el puede enojarse y largarse sin más, dejándome completamente solo.

Me aterra quedarme sólo en un lugar que realmente no conozco, no puedo preguntarle a nadie a donde ir, porque no conozco a esas personas. Ya me han dejado abandonado en algún lugar.

La última vez fue en un centro comercial, tuve que obligarme a pasar por la vergonzosa tarea de llamar a mi hermano para que vinieran por mi, porque realmente no sabia a donde ir. Y no es que no me haya aprendido de memoria mi dirección, la sé, sólo que... me bloqueo, sufro un bloqueo emocional y al mismo tiempo se bloquean mis pensamientos, no sé qué se supone que tendría qué hacer.

Siempre sucede esto, soy un completo inadaptado.

No quiero que esto suceda con Jacob, se arruinaría todo.
No quiero que me abandone.
No quiero que se canse.
No quiero.

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Estoy en la cocina, sentado frente a la mesa y mirando una taza de café. No tengo idea de por qué lo hago, sólo para calmar un poco el flujo de mis pensamientos, quizás.