Or nah ➳ Jason McCann || +18

46. Stockholm syndrome

Abrí mis ojos y todos los recuerdos comenzaron a llegar como una cascada, Jason siendo golpeado brutalmente por varios hombres, Justin luchando contra otros y Garret arrojándome a una cajuela como si fuera un costal.

Tardé algunos segundos en que mi vista se acoplara a la luz que inundaba la habitación en donde me encontraba, mi cuerpo dolía y me sobresalté al sentir a alguien tocando mi brazo.

Me levanté rápidamente, perdiendo un poco el equilibrio y cayendo al suelo en el proceso, había varias personas frente a mí y por las siluetas que podía distinguir, eran hombres.

-Tranquila cariño, aquí estás más segura que con McCann.-Habló alguien a quien de inmediato reconocí, Garret.

Una vez que mis ojos obtuvieron una vista clara de la habitación, me sorprendí de no estar en un calabozo o una celda, parecía un lugar normal en donde solo estaba la cama y algunas sillas en las cuales estaban algunos tipos, incluido mi captor.

-No te haremos daño, siempre y cuando cooperes con nosotros.-Habló de nuevo y asentí.

Sorprendentemente no me sentía insegura, parecía estar diciendo la verdad y todos los hombres frente a mí parecían relajados, me observaban y hablaban en voz baja entre ellos de vez en cuando.

Me levanté del suelo, me senté en la cama y decidí escuchar, al final no tenía otra opción.

-Sabemos que no estás con McCann por tu propia voluntad. Sabemos todo lo que te ha hecho y el amor enfermizo que tiene por ti.-Hizo una pausa, dándome tiempo para asimilar todo y siguió.-Tú eres su única debilidad, jamás lo habíamos visto rendirse hasta que te apuntamos con un arma.-Un escalofrío recorrió mi cuerpo al escucharlo decir todo eso, no conocía demasiado a Jason pero por todo lo que había oído sobre él, realmente no parecía de los que se doblegan ante cualquier situación.

-¿Qué quieren de mí?-Hablé, con la voz aún un poco temblorosa.-Yo no sé nada de él, nada que los pueda ayudar, ni siquiera estoy segura de que esté dispuesto a hacer algo por mí.

-Él estaría dispuesto a dar su vida por ti.-Habló otro de los hombres que estaban en la sala, parecía ser el más joven. Su cabello parecido al de Jason brillaba con la luz y su piel blanca parecía de porcelana, no encajaba en absoluto con todos los que lo rodeaban.-Está enloquecido buscándote, no se rendirá.-Se levantó de la silla en la que se encontraba segundos atrás y recargó su cuerpo contra la pared.

-¿Eres feliz con él?-Soltó de repente Garret.-¿Te gusta la forma en que te tiene controlada? ¿Estás contenta al no poder ver a tus padres, amigos y familia?-Algunas lágrimas cayeron por mis mejillas, ni siquiera estaba completamente segura de lo que sentía.-No seas tonta Dulce, él no te ama, él sólo ama el dinero, el control y más que nada el poder.-Dijo, se levantó de la silla y caminó hacia mí, se sentó a mi lado en la cama y tomó un mechón de mi cabello que caía sobre mi cara para colocarlo detrás de mi oreja.

No me sentía intimidada, ni siquiera tenía miedo, tan sólo me sentía bastante estupida por estarme preocupando por la salud de McCann cuando mi propia vida estaba en riesgo, ¿Estaría vivo?

-De seguro ahora estás pensando en él.-Una sonrisa cubrió la cara de Garret.-No serás la primera ni la última persona en el mundo en sufrir el Síndrome de Estocolmo.-Fruncí el ceño y negué.

-No estoy enamorada de él.-Dije sin pensar, ni siquiera tendría que estar dándole explicaciones.

-No intentes convencerme a mí, pequeña. Convéncete a ti misma.-Asentí y bajé la mirada.-¿Nos escucharás? Tan sólo queremos ayudarte y por supuesto, ayudarnos a nosotros mismos.-Asentí de nuevo, esta vez levantando la mirada y observado a todos.

-Díganme que tengo que hacer.-Limpié mis mejillas de cualquier rastro de debilidad que hubiera sobre ellas y me levanté de la cama.

-¿Podemos confiar en ti? ¿Estás segura de que no regresarás corriendo a los brazos de McCann? Sabemos su capacidad de convencimiento.-Dijo el chico que estaba recargado contra la pared y giré los ojos.-Y sabemos que si está con Justin, es capaz de quitarle las bragas a cualquier chica.-Sentí mis mejillas arder y apreté los puños, ¿Todos sabían que me habían usado menos yo?

-¿Tienen otra opción además de confiar en mí?-Los observé y al no recibir una respuesta, pude deducirla, estaban tan desesperados que estaban recurriendo a mí, una adolescente de 19 años, que hasta hace unas horas creía estar desarrollando sentimientos por un imbecil manipulador.

-Necesitamos que obtengas la información que está en su teléfono.-Dijo otro de los hombres que estaba en la habitación, quien, llevaba una tablet en la mano y leía algunas cosas provenientes de la misma.-Tiene un sistema muy peculiar de seguridad, huella dactilar, escaneo de retina y desbloqueo facial. Tienes que convencerlo de que agregue tu información para que puedas acceder sin problema.-Me observó y asentí. Siempre creí que su iPhone era común y corriente, otra cosa más en la que fui demasiado ingenua.-Una vez que obtengas eso, tendremos la clave para entrar a su computadora de forma remota y obtener lo que necesitamos.

-De acuerdo.-Dije con firmeza.

-Tendrás que hacer que se aleje de Justin.-El chico que estaba recargado en la pared habló y fruncí el ceño.-Ellos dos juntos son casi literalmente invencibles, ambos tienen a muchos hombres a su cargo, si logras que se distancien será más fácil derrocar a McCann.-Eso sería fácil, ellos habían jugado conmigo y ahora yo podría hacerlo con ellos.

-Y por último, debes destruir su seguridad. El ego de Jason es un iceberg y es más grande que un puto estadio de fútbol, debemos arruinarlo en todos sentidos.-Concluyó Garret y asentí.

Realmente quería destruirlo y lo haría, aunque me llevara la vida en ello.

Y seguramente así sería.

-Quiero quedarme con todo lo que hasta ahora le pertenece.-Dije y observé la cara de sorpresa de todos.

-¿A que te refieres con "todo"?-Garret cruzo los brazos frente a su pecho y me observó intrigado.

-Quiero manejar todo lo que él maneja ahora. Entiendo que ustedes quieren su lugar, pero será muy complicado que consigan el respeto de sus hombres, yo lo obtendré y dejaré que ustedes hagan lo que se les de la puta gana, pero seguiré en el negocio.-El silencio inundó la habitación y unos segundos después varios murmullos comenzaron a escucharse.

-Eres más inteligente de lo que pareces.-Habló de nuevo el chico de la pared y una sonrisa iluminó su rostro, vaya que era lindo.

-Bien. Pero tendremos que hablar más a detalle sobre eso, primero tenemos que deshacernos de Jason.-El semblante de Garret se relajó después de mencionar eso y asentí.-Ahora, tenemos algo para ti.-Dijo y fruncí el ceño.

No quería más sorpresas.

Todos comenzaron a salir de la habitación, menos Garret y el chico de la pared.

-Soy Sebastian, por cierto.-Dijo tomando mi mano y dejando un ligero beso sobre ella. Giré los ojos por lo cliché que estaba siendo y prosiguió a salir de la habitación igual que todos.

-¡Hija!-La voz de mi madre inundó la habitación y sentí mi corazón estrujarse.

Mis padres entraron casi corriendo dentro de la habitación y los abracé fuertemente, algunas lágrimas rodaron por mis mejillas y me sentí fuerte de nuevo, eran todo lo que necesitaba y quienes me darían fuerza para terminar con todo esto.

"Gracias" le murmuré a Garret, quien sólo sonrió y asintió en mi dirección.

Prepárate para tu final Jason McCann.

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DAMN! Después de meses, al final un poco de inspiración regresó a mí.

No pienso alargar mucho más la historia, así que váyanse preparando para un posible final dentro de muy poco :)

Gracias por seguir aquí, perdón por tardar tanto en actualizar, soy un asco, I know.

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All the love, Xx